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09 de mayo de 2018

Sigue la lucha contra los despidos en Cargill

Aceiteros rompieron el techo salarial

Este viernes 4 de mayo los trabajadores aceiteros firmaron un nuevo acuerdo paritario consiguiendo romper los techos salariales impuestos por el gobierno y las patronales.

El acuerdo de los trabajadores agrupados en la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina con los representantes patronales de las cámaras Ciara, Ciavec y Carbio, llevó el salario inicial, correspondiente al peón, ingresante sin formación ni experiencia, de los actuales $25.000 a $29.750 desde el 1º de enero de 2018, a lo que se suma el adicional por presentismo de $690, que es igual para todas las categorías. Volvieron a poner sobre la mesa que la democracia sindical y la lucha son caminos firmes para avanzar.
Como en años anteriores también se consiguió de forma adicional una suma no remunerativa correspondiente al año 2017 de $26.987. Esta suma, que se logró en por primera vez en el año 2010 y se mantiene dentro de las negociaciones paritarias hasta la actualidad, es un pago extraordinario que el sindicato plantea como participación en las ganancias. Recordemos que estamos hablando de unas de las patronales de los sectores que más facturan en la Argentina, en donde reinan los capitales extranjeros y los nacionales asociados al exterior, y que han sido beneficiados en los últimos 15 años y que han profundizado sus ganancias con las políticas del macrismo.
El acuerdo paritario es retroactivo a enero por lo que los saldos retroactivos de enero, febrero, marzo y abril se liquidarán con los haberes de mayo, y se logró también una revisión en setiembre para verificar que la inflación no haya superado el aumento logrado.
Este acuerdo generó ruido entre los trabajadores aceiteros agrupados en el Sindicato Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA), donde se encuentra la mayoría de los trabajadores del complejo agroindustrial del norte del gran Rosario, donde se asientan la mayoría de las multinacionales del sector. El SOEA, dirigido por Pablo Reguera, acordó en enero un aumento del 15% y sin cláusula gatillo, en línea con los pedidos del Ministerio de Trabajo.

El salario mínimo como base
El planteo de la Federación que dirige Daniel Yofra para establecer los aumentos salariales intenta escaparle a la lógica de aumentos por porcentaje para basarse en el derecho a un Salario Mínimo, Vital y Móvil según su definición en el artículo 14 bis de la Constitución Nacional y artículo 116 de la Ley de Contrato de Trabajo, esto es, que asegure a los trabajadores “alimentación adecuada, vivienda digna, educación, vestuario, asistencia sanitaria, transporte y esparcimiento, vacaciones y previsión”.
“El mismo es parte fundamental de nuestra política gremial y fue reafirmado por las compañeras y compañeros de todo el país en el Noveno Plenario Nacional de Delegados de Base Aceiteros y Desmotadores realizado los días 14 y 15 de marzo en la Ciudad de Buenos Aires, quienes definieron su monto actual y mandataron a la Federación a tomar las medidas de fuerza necesarias para su consecución”, asegura Yofra.

La pelea por
no morir trabajando
Además de las conquistas salariales en la negociación paritaria se obtuvo un compromiso de regularización y funcionamiento en todas las plantas (en las cuales aún no se encuentran adecuadamente funcionando) de los comités mixtos de Salud y Seguridad en el Trabajo, para asegurar la integridad sicofísica de cada compañera y compañero trabajador.
El sector viene siendo golpeado por gran cantidad de accidentes y muertes obreras, como se expresaba en el informe del Observatorio de Seguridad Laboral de las Agrupaciones René Salamanca publicado en ediciones anteriores. Solo este mes hubo dos grandes incendios en plantas de la región y un buque se llevó puesto un embarcadero. Por casualidad no hubo heridos en ningún de los tres incidentes.

La lucha
Esta negociación se da en momentos en que el sindicato de aceiteros de Rosario y el de Bahía Blanca, enrolados en la Federación, llevan adelante una dificilísima lucha por la reincorporación de 33 trabajadores que fueron despedidos sin causa de la firma Cargill, la mayoría de la planta que la empresa tiene en Villa Gobernador Gálvez. Este 1º de Mayo esa lucha fue el epicentro de conmemoración del día internacional de los trabajadores por parte de los gremios, organizaciones sociales y políticas combativas del sur santafesino, con un gran acto en el Club Talleres de VGG.
“Para lograr nuestras reivindicaciones debemos avanzar en conjunto en nuestra lucha contra toda forma de precarización, flexibilización y tercerización, defender los derechos al ejercicio de huelga, de negociación colectiva y de paritarias libres contra todo intento de imponer límites y techos”, afirma el comunicado de los aceiteros en el marco del logro de la paritaria.
Y finaliza reflexionando sobre los motivos de esta victoria al afirmar que “una vez más, la huelga y la democracia obrera son las herramientas con las que los trabajadores defendemos nuestros derechos y obtenemos nuevas conquistas. Hoy podemos celebrar con orgullo porque lo que logramos se consiguió con unidad, con solidaridad y con conciencia de clase, para una vida digna como trabajadores y para nuestras familias”.

 

Hoy N° 1716 09/05/2018