El desprecio del gobierno a los reclamos de los gremios estatales se expresó en la única reunión entre el gobierno y los gremios el 15/5 (a dos meses de iniciado el conflicto), donde no ofrecieron respuesta a ninguno de los reclamos.
Pese a que los ingresos de la provincia aumentan -principalmente por el aumento del dólar y el barril de petróleo-, la propuesta salarial del gobierno es cero. No hay paritaria salarial, continúa el pago escalonado -se cobra entre el 11 y el 25 de cada mes de acuerdo al monto del salario- y saquean la obra social. A la fecha, hay trabajadores que aún no cobraron el mes de abril. Mientras, se aprueba tarifazo tras tarifazo (colectivo, luz, gas) y se devalúa el salario con el peso.
Con la lucha se ha limitado, en parte y por ahora, el ajuste definido por el gobierno con el paquete de medidas aprobadas entre fines de 2017 y principios de este año. Se frenaron centenares de despidos y el avance contra derechos conquistados, pero el ajuste sigue y se sigue perdiendo frente a la inflación.
El viernes 18 se volvió a movilizar a la capital, Rawson, y en las principales localidades. Se aprobó un paro de 96 horas (del 21 al 24/5) y se prepara una gran movilización de la Mesa de Unidad Sindical al sur de la provincia, donde las petroleras, principalmente Pan American, saquean los recursos de los chubutenses. Las petroleras, junto con las pesqueras, Aluar y los terratenientes (Benetton entre otros), deben pagar. A los trabajadores les pagan (monedas) en pesos pero las empresas facturan en dólares… sus ganancias se multiplican beneficiados por la política de Macri y Arcioni, mientras el pueblo se empobrece.
Como reconoció un funcionario: los grandes terratenientes no pagan impuesto inmobiliario rural. Esto demuestra que es necesario y posible llevar adelante la ley de emergencia impositiva que planteamos, para que paguen Pan American, Aluar, Benetton y las pesqueras. Es necesario convertir la indignación y la necesidad en lucha para frenar el ajuste.
Corresponsal
Hoy N° 1718 23/07/2018
