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15 de mayo de 2014

Pablo Juárez (Neuquén)

¿Hacia dónde va el gobierno? Soberanía energética ó la nueva era de la entrega y el saqueo

Hidrocarburos

En su reciente discurso a la Asamblea Legislativa la Presidenta Cristina F de Kirchner hizo una serie de consi-deraciones en materia energética que sería necesario analizar.
Planteó la mejoría de la producción de YPF SA y defendió la indemnización a Repsol, pero lo central de su afirmación fue que la actividad principal de su política petrolera  es apostar a la explotación de los No Conven-cionales.

En su reciente discurso a la Asamblea Legislativa la Presidenta Cristina F de Kirchner hizo una serie de consi-deraciones en materia energética que sería necesario analizar.
Planteó la mejoría de la producción de YPF SA y defendió la indemnización a Repsol, pero lo central de su afirmación fue que la actividad principal de su política petrolera  es apostar a la explotación de los No Conven-cionales.
Así, haciendo asociaciones y concesiones a monopolios petroleros como la de Chevron donde todavía  no se conocen  las clausulas secretas del convenio, piensan recuperar “el autoabastecimiento y la soberanía energética”.
Según la AIE (Agencia Internacional de Energía), Vaca Muerta es la cuarta reserva de Petróleo llamado No Convencional después de Rusia, EEUU y China. Y la segunda reserva de gas luego de China.
Pero es muy importante no perder de vista que cuando se habla del potencial en Vaca Muerta son todavía Recursos y no Reservas. Es necesario cuantificarlas y que puedan ser extraídas a precio económicamente rentable, según el criterio económico de las petroleras privadas.
La propaganda oficial  y de varios sectores de las petroleras hablan de que Vaca Muerta tiene riquezas por 800 mil millones de dólares. 
Esto es como decir que en la cordillera hay una parva de dinero  en oro enterrado, o en el centro de la tierra hay  hierro y niquel… pero hay que sacar el oro y convertirlo en monedas.
Las petroleras, sus representantes, y tanto  la presidenta Cristina Kirchner como Sapag,  apuntan a que  sea nuevamente el estado argentino a través de la nueva YPF, quien  pague el costo de desarrollar la exploración-explotación de los hidrocarburos No Convencionales. 
Por este camino vamos a  repetir la historia ya conocida, como en la vieja YPF: tomaron el arcón lleno de monedas y lo vaciaron.  Ahora hay que volver a llenarlo, pero el costo actual es mucho más elevado por las poderosas contratistas que dominan la industria. 
Ya la YPF estatal conocía la existencia de estos recursos, pero sólo en los últimos años, desde los  80, EEUU desarrolló  su  explotación masiva al perder el autoabastecimiento.
Cuando el Gobierno Nacional expropia a Repsol y crean la nueva YPF Sociedad Anónima y no Sociedad del Estado, deciden asociarse a los monopolios extranjeros principalmente yanquis que son los que dominan la tecnología y tienen el equipa-miento para la explotación no convencional.
Por eso dijimos  que no fue una casualidad que impusieran como CEO de la nueva YPF a Galuccio, directivo de los negocios de Schlumberger en Inglaterra.
La situación actual es que el déficit energético se profundiza. La compra de energía en el 2013 fue de 12.800 millones de dólares, con tendencia a seguir creciendo. Este déficit es uno de los rubros que afectan seriamente las reservas del Banco Central y uno de principales generadores de inflación.
Si bien es cierto que la producción de petróleo y gas por parte de YPF creció levemente, la tendencia general es negativa. Cayó 1,7 % la producción de petróleo en el 2013 respecto del año anterior  y un 4,4 % la producción de gas en el mismo período. 
 
 
PETRÓLEO
 
Año 2012 m3 m3/día
Totales 33.151.596 90.578 Año 2013 m3 m3/día
Totales 32.588.019 89.282
 
GAS
 
Año 2012 Mm3 Mm3/día
Totales 44.123.366 120.556
Año 2013 Mm3 Mm3/día
Totales 42.181.938 115.566
 
Fuente: Secretaria de Energía de la Nación.
El gobierno no dice, y  se encarga de ocultar a las masas,  que YPF representa un poco mas de 30% de la actividad petrolera, mientras que el otro 70% está en manos de monopolios principalmente extranjeros como Panamerican, Chevron, TOTAL, Sinopec, etc.
 
Aumento del precio de hidrocarburos
El gobierno mantiene una política de  aumentos sostenidos e injustificados en el precio del barril  de petróleo y en el gas a las compañías petroleras. Son concesiones a estos grupos monopólicos para que no bajen los niveles de producción.  Pero el resultado está a la vista. Lo único que logró es una trans-ferencia de  millones de dólares  del bolsillo de los trabajadores, el pueblo y la producción nacional  a las ganancias de esos grupos económicos.
En lugar de recuperar el control del recurso y extraerlo a los costos internos como ocurría hasta 1992 con YPF SE, van elevando el precio de  los hidrocarburos vendidos al mercado interno, al precio internacional.
 Con el gas ocurre algo parecido, ya que una parte de lo extraído se está pagando  más de 3,70  y hasta 7,5 dólares el millón de BTU
Al mismo tiempo, el gobierno fue permitiendo el aumento de los precios de los combustibles, un 60% de enero de 2013 a enero de este año.
El costo de producción de petróleo de YPF  antes de la privatización era bastante inferior a 10 dólares el barril. Hoy tiene un costo promedio de 20 dólares
Sin embargo la evolución del precio que se paga a las contratistas en los últimos años fue la siguiente:
Enero 2004 / u$s 25.
Enero 2005 / u$s 30.
Enero 2006-Julio 2007 en torno a los u$s 40.
Julio 2007-Enero 2010 en torno a los u$s 45.
Y después en 3 años crece hasta los u$s 75 a diciembre 2013.
En 2014 trepó a u$s 82.
 
O sea, un aumento de precio superior a los 30 y 40 dls. por barril en los últimos 3 años.
Teniendo en cuenta que la producción total del país  ronda los 200 mill. de barriles por año, significa sólo en la extracción petrolera una renta adicional de 6.000 a 8.000 millones de dólares anuales que se llevan las operadoras de área.
Este nivel de rentabilidad del negocio petrolero, como vemos,  no requiere de ningún auxilio externo para desarrollar cualquier recuperación del sistema energético. Convencional, no convencional, nuclear, hidráulico… energías alternativas, o combinado mixto.
Para ponerle un número, si controláramos nosotros la actividad petrolera pagaríamos como máximo promedio 20 dólares por barril,  contra los más de 100 dólares  por  barril, precio  que terminaremos pagando  con las decisiones que está tomando el gobierno. 
El costo para la macro-economía de los argentinos será muy alto si esta política tiene  éxito.  Con el consecuente aumento de pobreza, el cepo que significa para toda la producción nacional, mayor debilidad política-estratégica y dependencia.
 
Indemnización a Repsol
El gobierno pagará 5000 millones de dólares con distintos  bonos por más de 6000 millones  y con  tasas anuales  del  8,5 %. Se terminará de pagar en el 2032, pero en ese momento habremos  pagado más de  11.000 millones de dólares. 
El Presidente de Repsol declaró “estar muy satisfecho con el acuerdo”, ahora lo debe aprobar el Parlamento de nuestro país. 
 Con esta negociación el gobierno retrocedió radicalmente desde el anuncio de Kicillof en abril del 2012 cuando el estado nacional expropió la mayoría  de las acciones  para pasar a controlar YPF.  De anunciar que no sólo no iban a pagar un peso por esa expropiación, sino que Repsol nos debía indemnizar por los pasivos ambientales, pasó a pagar lo que impuso Repsol. Y, peor aún, se explica la satisfacción de Brufau, Presidente de la compañía, ya que también ocultaron las  denuncias de vaciamiento de la empresa que hizo el propio Kicillof y De Vido en el Informe “Mosconi”. 
Vaciamiento que involucra a Repsol, los Eskenazi y al propio Néstor Kirchner, que pactó con los españoles el ingreso de los Eskenazi con la llamada “Argentinización”, permitiendo sacar del país 90% de las utilidades de la empresa.
El Gobierno decidió así pactar con Repsol condiciones muy desfavorables para nuestro país, tratando de cerrar un conflicto que le dificulta acceder a créditos internacionales,  y porque cree que facilitará las inversiones en el proyecto de Vaca Muerta, al que apuesta para mitigar el gravísimo cuadro energético al que ellos mismo llevaron a nuestro país.
 
La explotación de Vaca Muerta
El plan piloto de producción de no convencionales esta recayendo sobre los esfuerzos y la inversión de YPF principal-mente. Salvo el dudoso acuerdo con Chevron por 1250 millones de dólares, hasta ahora ninguna petrolera ha hecho inversiones importantes. Todos los acuerdos que se han hecho le permitieron a las compañías poner un pie en los yacimientos que están arriba de Vaca Muerta. 
El gobierno y la conducción de la actual YPF repiten la historia de la vieja YPF estatal  que fue la que exploró, descubrió y desarrolló la inmensa mayoría de los yacimientos. Todo ese esfuerzo hecho por los trabajadores,  el pueblo y la Nación, se transfirieron a las petroleras con Menem y con todos los gobiernos que siguieron hasta los Kirchner.
La mayoría de pozos shale y tigth que se perforaron hasta ahora, se hicieron  con inversiones de YPF.
En sintonía con esta línea, el Gobierno de Sapag prepara una ley de hidrocarburos provincial para que una vez caducadas las concesiones actuales, las áreas pasen a ser controladas por la empresa Provincial Gas y Petróleo, y a partir de allí asociarse y otorgar nuevas concesiones por 35 años  en lugar de los 25 años actuales, con compañías que inviertan en No Convencional.
De acuerdo a la información que dio el gobierno de la provincia de Neuquén en el presupuesto presentado a la Legislatura para el 2014 -la única información oficial de la que se cuenta- hasta agosto de 2013 la producción de petróleo No convencional entre agosto y agosto 2012-2013 fue de  325.000 m3 con 133 pozos de shale.  En un año se produjo un poco más que la  producción de 3 días del total del país
La producción de gas durante el mismo período 2012-2013  fue de 2100 millones  de m3, el 20% de 1 día de la producción del país.
Como vemos, son todavía cifras muy pequeñas. Estamos muy lejos de poder cambiar la tendencia decreciente de producción.   
Es nuevamente YPF la que hace las principales inversiones. La que pone el dinero para pagar lo que llaman la “curva de aprendizaje”. Hasta las universidades nacionales están al servicio de este aprendizaje. Mientras tanto, las  petroleras  interesadas en Vaca Muerta  se posicionan para participar del reparto cuando haya  condiciones de precio, disponibilidad de lo extraído, y para remitir  sus  ganancias  a sus casas matrices con el menor costo posible.
La reactivación que hoy se ve en la indus-tria petrolera, principalmente en la zona de Añelo, la incorporación de equipos, y la incorporación de nuevos trabajadores, técnicos y profesionales van de la mano de las inversiones que está haciendo YPF. Nueva-mente es el estado argentino el que está haciendo el gasto que significa la experi-mentación, búsqueda y desarrollo de los yacimientos, mientras se benefician las empresas de servicios especiales: Halliburton, Weatherfod, Baker, y otras que facturan por sus servicios, particularmente Schlumberger que tiene la batuta de la operación en los pozos, y tiene a varios  hombres de su grupo en la presidencia y en cargos claves de YPF expropiada .
Esta situación la explica el mismo Galuccio en el reportaje publicado en Le Monde Diplomatique, se pregunta: “¿Cuál es el juego grande de todo esto?  El juego grande de todo esto es cambiar el sistema energético argentino: Es ahí donde el estado gana o pierde a lo grande… Por eso 5 o 10 % más de dividendos de YPF hoy o mañana no cambian la ecuación. Lo que sí la cambia es si en los próximos 10 años somos independientes o no; ahí se juega la real soberanía energética del país.”
No sólo son hipócritas las palabras de Galuccio diciendo que se está jugando por la soberanía energética, sino que nos está diciendo que YPF va a poner las inversiones en los próximos 10 años  para desarrollar los hidrocarburos no convencionales.
Mientras tanto no sólo seguiremos pagando el déficit energético, sino que financiaremos todo este desarrollo para que luego los buitres se repartan Vaca Muerta. Por cada acuerdo tipo Chevron se está cediendo la mitad de lo que le queda a YPF, o sea una reprivatización.
La política energética del gobierno sigue  profundizando la dependencia. La podemos definir como la nueva era de la entrega y el saqueo. Por eso tenemos que derrotarla.
 
El tema ambiental
En la provincia de Neuquén, como sucede en todas las cuencas de nuestro país, la contaminación  pasó a ser una preocupación de muchos sectores populares.
Está demostrada  la contaminación de los lagos Mari Menuco  y los Barreales (constatada hace 2 años por la Corte Suprema de Justicia), del acuífero de Rincón De los Sauces,  del río Colorado y otros lugares por los derrames de  hidrocarburos. Esto es así  con  la actividad petrolera convencional. 
Ahora con la técnica del Fraking se potencia la posibilidad de contaminación por la escala de perforaciones, por la cantidad de agua dulce que se necesita, y porque todavía no hay suficiente experiencia en nuestro país para conocer el impacto ambiental que tendrá, aunque es  muy cuestionado su uso en distintas partes del mundo.
 Es justo, entonces que nuestro pueblo y especialmente la juventud estén preocupados por esta nueva técnica. Pero tenemos que ser claros, nada va a cambiar si los yacimientos de gas y petróleo lo siguen teniendo y explotando las empresas monopólicas extranjeras.
 No es una determinada técnica la que ha contaminado y va a seguir contaminando, sino que son los malos manejos de los recursos, y la desidia empresarial con la complicidad de los gobiernos la que nos llevó a la situación actual. 
El saqueo y la contaminación tienen una misma causa,  la dependencia de nuestra economía y el manejo de la energía en manos de los monopolios imperialistas.
Esto es lo que repudió el pueblo de Neuquén cuando el 28 de agosto frente a la Legislatura se movilizó  para oponerse al acuerdo con Chevron y garantizar el cuidado del ambiente, enfrentando valientemente  la represión policial.
Estatizar la operación de los yacimientos es la clave  para poder, por un lado, parar el saqueo irracional, y principalmente, hacer una explotación petrolera responsable y sustentable, controlada por el pueblo a través de sus organizaciones.
 
El camino popular para lograr soberanía energética
Hay que retomar el camino de Mosconi, que hoy tiene total y absoluta  vigencia.
Enrique Mosconi creó y desarrolló exitosamente en 1922  la YPF estatal. En 1925  consideró la posibilidad de una sociedad mixta, estatal y privada, pero producto de su propia experiencia, en 1928 se retractó  y sacó esta conclusión:
“[…] sin monopolio del petróleo es difícil, diré más, es imposible para un organismo del Estado vencer en la lucha comercial a las organizaciones del capital privado.”
Agregando más tarde que: 
“Resulta inexplicable la existencia de ciudadanos que quieren enajenar nuestros depósitos de petróleo acordando concesiones de exploración y explotación al capital extranjero, para favorecer a éste con las crecidas ganancias que de tal actividad se obtiene, en lugar de reservar en absoluto tales beneficios para acrecentar el bienestar moral y material del pueblo argentino. Porque entregar nuestro petróleo es como entregar nuestra bandera.”
Los trabajadores, los partidos políticos y las organizaciones populares debemos tomar en nuestras manos la lucha por la recuperación de los hidrocarburos y las fuentes de energías para ponerlas al servicio de nuestro país y el conjunto del pueblo. 
La propuesta del MRP, Movimiento para la Recuperación del Petroleo y demás Recursos Energéticos de Neuquén que integra distintos sectores e integra nuestro Partido, el PCR, es una propuesta que permitiría resolver la crisis energética con un contenido popular e independiente, de auténtica Soberanía Energética.
 
1- Recuperar la totalidad de yacimientos y áreas, caducando las concesiones otorgadas a las operadoras de área como Chevron, Panamericam, TOTAL, Sinopec , etc., por falta de cumplimiento de las curvas de inversión comprometidas, sin resarcimiento y con cobro de los pasivos ambientales no remediados. Recuperando de esta forma la totalidad de la renta petrolera.
2- YPF 100 % estatal  y convertirla en empresa pública Sociedad del Estado, con control de los trabajadores, técnicos y profesionales, y de las organizaciones populares.  controlando toda la actividad hidrocarburífera en  sus aspectos ambientales, sociales, económicos y productivos.
3- Restablecer la inversión exploratoria de recursos convencionales, en la parte continental y off shore.
4- Prohibir la exportación de hidro-carburos, ajustando la producción a las necesidades nacionales.
5- Realizar convenios de cooperación energéticas regionales (Bolivia, Perú, Brasil, Venezuela, Ecuador, Mejico…)
6- Aceleración de la sustitución de las fuentes energéticas sucias con tecnologías limpias, para cambiar la matriz de energética.
7- Dictar una moratoria para la explotación de hidrocarburos no conven-cionales, mientras se desarrolla más inves-tigación para garantizar una explotación más segura en todos los aspectos: ambientales, sociales y económicos.