Noticias

28 de noviembre de 2018

Militantes asesinados en represiones

Justicia por Rodolfo Orellana y Marcos Soria

En la madrugada del jueves asesinaron a Rodolfo Orellana, militante de OLP (Organizaciones Libres del Pueblo), integrante de la CTEP (Confederación de Trabajadores de la Economía Popular) en Villa Celina, provincia de Buenos Aires. El domingo se conoció el asesinato de Marcos Soria, de la CTEP de Córdoba.

La muerte de Rodolfo Orellana fue durante el desalojo de un intento de toma de tierras, cuando la policía consumó una brutal represión, dejando además varios heridos y cuatro detenidos.
Al día siguiente, en una conferencia de prensa Pablo Puebla, integrante de la OLP, explicó que el dolor de su familia y todos sus compañeros es muy grande. Asesinaron a “Ronald” como lo llamaban en la organización, un militante, un hombre, un padre de cinco hijos, el esposo de Lía. Cuando intentaba junto a alrededor de 100 vecinos tomar un pedacito de tierra para hacerse una casa humilde en la que vivir con su familia en lugar de continuar pagando un alquiler con enormes dificultades. Pablo explica que la toma no fue organizada, sino que se dio auspiciada por el impulso de las profundas necesidades insatisfechas que sufren en los barrios del conurbano.
Pedro Zamparolo, médico dirigente de la Asociación de Profesionales de la Salud (APS) matancera, y secretario de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) Autónoma La Matanza, integró la delegación de la CCC y el PCR, que acompañó la movilización del viernes, reclamando justicia por Orellana y libertad a los detenidos. Nos decía: “Estamos todos muy conmovidos porque la represión fue salvaje. Este barrio, Celina, está habitado principalmente por compañeros bolivianos que alquilan viviendas muy precarias, y trabajan en la industria textil, confección de guardapolvos, etc. Están desesperados, porque cobran de acuerdo a la producción, y tienen gran necesidad de tierra para vivir. Y se corrió la bola de estos terrenos, próximos al Puente 12, frente a Ciudad Evita, donde se había loteado una parte. Esto es algo que en Matanza ocurre siempre. Todos los días hay ocupaciones y desalojos”.
Los compañeros de Orellana denunciaron que al llegar un centenar de personas hasta los terrenos “se encontraron con dos patrulleros y un grupo de civil que no saben si eran policías; los integrantes de las fuerzas les advirtieron que si entraban iba a haber “guerra”. Poco después de la amenaza pasaron a los hechos, comenzaron los estruendos de los disparos policiales y dieron rienda suelta a una violenta represión en la que Ronald recibió el impacto de balas de plomo que acabaron con su vida en pocos segundos, sin posibilidad de reanimarlo. Varios de sus compañeros recibieron disparos de balas de goma y cuatro fueron detenidos acusados de usurpación”.
Zamparolo cuenta que a Orellana una bala le entró por el omóplato y le salió por la nariz. “Cayó muerto al instante. Es un balazo por la espalda, de abajo hacia arriba. O le dispararon cuando estaba cuerpo a tierra, o hicieron rodilla en tierra para disparar a quemarropa. Nosotros el viernes acompañamos desde temprano. Fuimos a la Fiscalía de Laferrere, donde la jueza resolvió dejar a los detenidos presos hasta el miércoles 28, incluso a una mujer a la que no dejaban llevarse a su hijo de dos meses para que lo amamante. Luego los acompañamos por otros lugares, como el Puente 12 y la comisaría. Expresamos nuestra solidaridad en un acto, denunciando al gobierno de Macri-Vidal y su política de hambre y represión”.
La OLP publica en sus redes sociales un comunicado en el que afirman: “El compañero Rodolfo Orellana fue asesinado producto de un balazo. Tal como desmentimos ayer no fue una “pelea de bandas” como siempre quieren hacernos creer cuando ocurren estos hechos. Las Fuerzas de Seguridad fueron quienes asesinaron al compañero “Ronald” y tendrán que responder por sus crímenes”, aclara la organización tras especulaciones mediáticas sobre lo ocurrido que intentaban borrar la sangre de las manos de los policías y ponerlas sobre quienes intentaban tomar las tierras. Por su parte, el PCR y el PTP de La Matanza expresaron en un comunicado: “acompañamos en su dolor a la familia y a OLP-CTEP ante la muerte de Rodolfo Orellana, y nos solidarizamos con ellos en la búsqueda de verdad, justicia y castigo a los culpables de su muerte. Exigimos se termine la política de hambre y represión que lleva adelante el gobierno nacional y que cese la persecución a los luchadores sociales”.
El repudio a este crimen estuvo presente el viernes por la tarde en la Marcha de la Gorra en la Ciudad de Buenos Aires, donde miles de jóvenes denunciaron la política represiva del gobierno, y en una marcha el lunes, de la CTEP, la CCC y Somos Barrios de Pie, a la Casa de la Provincia de Buenos Aires reclamando justicia por Orellana y libertad a los presos. También se marchó a la Casa de Córdoba, denunciando el crimen por parte de fuerzas represivas de Marcos Soria, parte del Encuentro de Organizaciones, que integra la CTEP de Córdoba.

Hoy N° 1745 28/11/2018