En la llamada “belle époque”, cuando los oligarcas argentinos “tiraban manteca al techo” en París, se decía que el sueño de toda francesa era tener un perrito pequinés y un amante argentino.
En la llamada “belle époque”, cuando los oligarcas argentinos “tiraban manteca al techo” en París, se decía que el sueño de toda francesa era tener un perrito pequinés y un amante argentino.