A pesar de las intrigas del gobierno provincial, de los rumores de caos y presiones para que no se realice la marcha y el acto, unas 15 mil personas reclamaron tierras para habitar y producir, y justicia por los cuatro jóvenes asesinados en la feroz represión del 28 de julio.
Familiares de los asesinados fueron acompañados por organizaciones de pueblos originarios locales y por un arco amplio de organizaciones sociales y políticas a nivel nacional, en una marcha encabezada por la consigna “Justicia, tierra y trabajo”.
A pesar de las intrigas del gobierno provincial, de los rumores de caos y presiones para que no se realice la marcha y el acto, unas 15 mil personas reclamaron tierras para habitar y producir, y justicia por los cuatro jóvenes asesinados en la feroz represión del 28 de julio.
Familiares de los asesinados fueron acompañados por organizaciones de pueblos originarios locales y por un arco amplio de organizaciones sociales y políticas a nivel nacional, en una marcha encabezada por la consigna “Justicia, tierra y trabajo”.
Se leyeron numerosas adhesiones y se contó con la presencia de Juan Carlos Alderete (coordinador de Desocupados de la CCC), Ricardo Peidro de la CTA, Luis Aredes de Capoma, Raúl Domínguez de Liberpueblo, Margarita Peñailillo de Originarios en Lucha, Cristina Cabib de Madres de Plaza de Mayo de Quilmes, Ana María Riveiro de Movimiento de Mujeres en Lucha, CTA Salta; Hugo Blazco, secretario de Derechos Humanos de la CTA nacional, y por la Federación Nacional Campesina, Daniel Benítez de la Unión Campesina del Chaco; Néstor Villacorta de la Asociación de Medieros y Afines de La Plata; Dalmiro Sánchez de Asociación de Trabajadores Campesinos de Jujuy; Hugo Díaz de la Asociación Campesina de Tucumán; Darío Bonaventura. Estaban presentes delegaciones de la CCC y el PCR de Tucumán, Salta, Chaco, Santa Fe, Capital Federal, y de la provincia de Buenos Aires compañeros de La Matanza y Quilmes-Berazategui-Varela.
Tierra para vivienda y trabajo
Luis Aredes abrió el acto planteando que hay impunidad porque “no llegó la justicia”.
Conmovedoras fueron las palabras de saludo de los familiares de los asesinados el 28 de julio, exigiendo justicia.
Margarita Peñailillo acusó al gobierno nacional de ejecutar “el segundo genocidio que pretende ser silencioso” con el saqueo de tierras para la sojización, la extranjerización de la tierra, la especulación inmobiliaria, etc.
Ricardo Peidro, en referencia a los Blaquier denunció que son “responsables de aquel genocidio de la dictadura” y de ser parte de los “grupos económicos que definieron instalar un modelo económico y social” en nuestro país.
Juan Carlos Alderete dijo que “vayan sabiendo todos los poderosos que se quieran adueñar de nuestra Argentina que vamos a enfrentar en las calles para derrotarlos y así se hará justicia”. Y al gobierno nacional instó a que cobren más impuestos “a los poderosos, a los que más tienen”, “para solucionar el problema social”.
Milagro Sala, dirigente de Tupac Amaru, recordó que en ese acto estaban unidos los que “estuvimos en la década del ‘90 pidiendo más trabajo, más salud, más educación”. Y denunció que mientras en una cooperativa pagan 128 pesos en impuestos, “Blaquier por hectárea paga $9,80”.
El cierre estuvo a cargo de Enri-que “Kike” Mosquera, coordinador de la CCC provincial, quien responsabilizó a Ledesma de los asesinatos y pidió al gobierno provincial y nacional que soluciones el problema de la tierra y justicia por los cuatro asesinatos.
Extractos de las palabras de Kike Mosquera
“El pueblo mostró su dignidad y su rebeldía”
“Compañeros, a pesar de lo que decía el gobernador, a pesar de que durante toda la mañana intentaron meter miedo, asustar al pueblo de Libertador, asustar al pueblo jujeño (…)
Hoy el mismo juez que ordenó el desalojo, que se llevó el expediente de vacaciones, hoy volvió a querer investigar para decir que somos nosotros los asesinos, para decir que somos nosotros usurpadores. Es el mismo juez empleado de Ledesma y tiene un padrino político que es Gerardo Morales. El mismo que ha dicho que no iban a dar lotes para todos.
Nosotros estamos exigiendo para toda la provincia que se apruebe el lote para todos, porque lo hemos arrancado con la lucha. No nos dio ningún gobierno, lo hemos arrancado con la lucha, con la sangre de nuestros compañeros, ese lote para todos. (…)
Cómo Ledesma y toda la familia Blaquier no van a tener miedo si este pueblo le mostró de frente su dignidad, su rebeldía, su coraje, recuperando la tierra cuando nos habían matado los compañeros. Cómo no van a tener miedo esos mismos que le obligan a pedirle permiso a la municipalidad para ir al río a buscar algo y los pobres, los originarios, los trabajadores hemos osado tomar las tierras, hemos pasado esa tranquera, y hemos dicho que la tierra es nuestra, compañeros. (…)
Cómo no va a tener miedo esa empresa que nos contamina todos los días (…).
Qué le podemos decir a esta empresa que intentó secuestrar a la hija de una compañera. Qué le podemos decir a esta empresa, que un compañero fue atropellado intencionalmente por una camioneta de esta empresa. Qué le podemos decir si es la misma empresa que mató a un compañero del sindicato del azúcar, de la nueva comisión directiva hace un mes y medio atrás, y eso lo sabemos todos en este pueblo, y lo han tapado.
Esta empresa es un feudo. No se casa con ningún gobierno, pero todos los gobiernos han sido serviles a esta empresa, a los Ledesma, a los Blaquier… y estos Blaquier, hoy cuando se van en su yate tienen las manos manchadas de sangre. Hoy cuando se produce esta azúcar, cuando Ledesma mira el color del azúcar, ven sangre porque tienen ellos manchadas las manos de sangre. Porque ellos son los responsables de los cuatro asesinatos, de los cuatro jóvenes que nos han matado en Ledesma. Es Blaquier el primer responsable. Pero nosotros decimos que el gobierno también tiene su responsabilidad, este gobierno provincial nos mandó 700 policías a reprimirnos. (…) Nos quisieron inculpar de las muertes, nos quisieron inculpar de la represión, nos dijeron que éramos usurpadores, que éramos asesinos, que somos violentos. Vaya si esto es violencia. Qué violencia, la violencia es la opresión que vivimos todos los días con esta empresa. La violencia es que nuestros chicos no tienen para llevar un plato de comida y Blaquier se reparte ganancias por 90 millones de pesos. Eso es violencia, no que estemos movilizando acá. (…)
Nosotros hacemos públicamente responsable a la empresa Ledesma, a los Blaquier, si pasa algo con alguno de nosotros, con alguna de nuestras familias, pero también al gobierno nacional y al gobierno provincial. (…)
Los Blaquier estuvieron, fueron cómplices, y fueron parte de esta dictadura, y han estado con dictaduras anteriores. Y a nosotros nos acusan de golpistas. Pero resulta que Blaquier dice que la tierra es de ellos, le hemos desafiado públicamente y le volveremos a desafiar: queremos ver los títulos de propiedad porque ni el expediente nos han mostrado, y no lo han mostrado porque hay 10 mil hectáreas de esas tierras que se las vendió Martínez de Hoz a 10 mil pesos fuertes. Porque eso no lo mostró, porque ni siquiera son de ellos esas tierras. Porque no tienen ni un papel que lo acredite. Esas tierras son nuestras.
Nuestros cuatro compañeros han sido asesinados, pero hay una continuidad porque los compañeros de Chaco, Mártires López, y los compañeros qom de Formosa fueron asesinados; y han sido asesinados los compañeros de Soldati. Entonces acá hay una continuidad, acá hay una represión, acá hay muerte sistemática. Entonces nosotros, cuando exigimos justicia, exigimos las tierras, exigimos trabajo, exigimos la vivienda y estamos reclamando al gobierno nacional, al gobierno provincial, a los gobiernos municipales”.
