“…y sepan que solo muero, si ustedes van aflojando, porque el que murió peleando vive en cada compañero”.
La emoción fue intensa ya desde la llegada de una gran delegación de camaradas del PCR y de la JCR de Alberdi, Aguilares y la capital tucumana. Con ellos y con familiares, amigos y camaradas, más de un centenar de personas colmaron el salón cargado de emociones y recuerdos, en este acto organizado por una comisión amplia.
“…y sepan que solo muero, si ustedes van aflojando, porque el que murió peleando vive en cada compañero”.
La emoción fue intensa ya desde la llegada de una gran delegación de camaradas del PCR y de la JCR de Alberdi, Aguilares y la capital tucumana. Con ellos y con familiares, amigos y camaradas, más de un centenar de personas colmaron el salón cargado de emociones y recuerdos, en este acto organizado por una comisión amplia.
Llegaron numerosas adhesiones de todo el país: Buenos Aires, Corrientes, Chaco, Tucumán, Entre Ríos, y de nuestra provincia. El acto se inició con un video mostrando imágenes del Flaco, con su familia, trabajando en el campo, y en distintos cortes de ruta y tractorazos, siempre a la par de los trabajadores en los reclamos y en la lucha por sus derechos, junto a campesinos, docentes y estudiantes.
Entre las adhesiones leídas, tomamos las palabras del Carlos Retamoza de Paraná: “El flaco fue un imprescindible, de los que siempre enfrentaron la realidad por más dura que fuera, para aprender y sacar enseñanzas de ella, ayudando a los demás”.
El Flaco nos marcó
Su hermana Mari fue la encargada de abrir el recorrido de voces en homenaje al querido Flaco, sin escatimar metáforas para referirse a él: “hacías semillas en la vida, hacías semillas en lo ideológico, ‘semillero’ era tu condición”. Expresó: “Nos marcaste como se marcan en las señaladas, con la verdad en el camino, con tus afanes por que estudiáramos, que no olvidemos nuestras raíces, que no cometamos jamás el crimen vil de traicionar a nuestra clase, que estemos siempre dispuestos a servir al pueblo”.
Laura, hija del Flaco, relató anécdotas de la vida familiar, de la cultura del trabajo de su padre, heredada de su abuelo, y algunas características de la militancia del Flaco: “un buscador de la unidad, siempre”.
Cacho García, que conoció al padre del Flaco, fundador de la escuela de la Familia Agrícola de Forres, quien fuera un gran dirigente, destacó que “de tal palo tal astilla”, y que “Él nos unió a todos aquí; el flaco era un hombre muy solidario”.
Lilia de Depetris, compañera integrante de la comisión de padres de la escuela Programa Emeta dijo que el flaco fue un gran luchador, un hombre siempre dispuesto. Recordó que lucharon juntos “por el engrandecimiento de la escuela, por la creación del albergue para que los hijos de campesinos de lugares alejados pudieran estudiar.” Contó que al conocerlos, Lund les dijo: “soy comunista revolucionario”.
También hablaron integrantes del programa Pro huerta del INTA Santiago del Estero: Juan Abdala, Elsa Rodríguez y Juan Carlos Arias.
En el homenaje se trajo al recuerdo la confluencia de las luchas en la provincia de agricultores y docentes; que fue posible “porque el Flaco estaba en el medio”, como recordó Ziomara. También lo recordó Titi Rodríguez, amigo personal de Jorge, destacando su trabajo con las cooperativas y con productores.
Juan Carlos Chazarreta saludó en nombre del PCR y la JCR de Santiago del Estero; expresó muy emocionado a todos los presentes: “El Flaco nos posibilitó encontrar un puesto de lucha en la JCR, ha sido quien posibilitó el Partido en Santiago y en la UNSE particularmente”. A continuación, evocó luchas universitarias, y la importancia de tener un partido como el PCR, del que Lund era su secretario zonal.
Una vida al servicio del pueblo
Cerró el acto Carlos Aramayo, Puca, en nombre del Comité Central del PCR, quien trajo el saludo del secretario general del Partido, Otto Vargas.
Aramayo describió al Flaco como “El cuadro más valioso del PCR en el norte argentino, que conocía las luchas de las ligas agrarias, y desde muy joven fue parte de la Comisión Agraria; conoció las clases sociales en el campo en China, fue un revolucionario teórico y práctico, había mamado del maoísmo que en el campo existen las clases sociales. Y su preocupación fue conocer las clases sociales en el campo, conocerlas científicamente en su región. Esto ayudó enormemente a la tarea agraria del PCR.”
Destacó Aramayo que Lund era miembro suplente del CC, y que “si hay algo que se puede decir de la semblanza del Flaco Lund es que fue un campesino que definió su vida al servicio del pueblo, que el objetivo era la revolución democrática popular agraria antiimperialista en marcha hacia el socialismo”.