La provincia de Jujuy fue escenario de una lucha de extraordinaria importancia. El 20 de julio del año 2011, el pueblo de Libertador General San Martín ocupó 15 hectáreas del latifundio más grande de la provincia y uno de los más importantes del país. La lucha que aún hoy estamos librando es una de las más significativas de nuestra historia, de carácter antiterrateniente y antimonopolista y de gran importancia para la estrategia revolucionaria de nuestro partido. En este trabajo hacemos un aporte para que el hecho se valore en su verdadera dimensión.
Después de producida la nueva pueblada, el Estado y sus fuerzas represivas desataron una feroz y planificada represión dejando decenas de heridos y asesinando a los jóvenes Ariel Farfán, Juan José Velazquez, Félix Reyes y al policía Alejandro Farfán. A pesar de esto el pueblo de Libertador y la CCC enfrentaron heroicamente a la policía impidiendo el desalojo y sosteniendo la ocupación.
Este triunfo provocó un reguero de ocupaciones en Libertador y en otras áreas locales, forzando la expropiación de 40 hectáreas a Ledesma y el Plan provincial “un lote para cada familia que lo necesite”. Se abrió así, una crisis política en el gobierno muy aguda, lo que generó una gran incapacidad operativa y que a tres semanas de este acontecimiento aún se mantiene una situación, que no ha sido superada ni con el acto electoral.
“Argentina es un país dependiente, parte del conjunto de países coloniales, semicoloniales y dependientes oprimidos por los países imperialistas. En él predominan relaciones de producción capitalistas, con un importante desarrollo industrial que la llevó a ocupar el primer lugar en América del Sur en los años 1950. Estas relaciones de producción se encuentran trabadas y deformadas históricamente por la dominación imperialista y el mantenimiento del latifundio en el campo. Esta estructura y las políticas implementadas por las clases dominantes hacen que contrasten las riquezas y posibilidades de nuestro país con el hambre, la desocupación y la miseria de la mayoría del pueblo y la desarticulación y raquitismo de su industria nacional que hoy la caracteriza.” (Programa del PCR).
El atraso de la economía de Jujuy y sus consecuencias de desocupación, pobreza e indigencia tienen como base la extraordinaria concentración latifundista de la tierra, el predominio del monopolio de la producción industrial y la penetración del imperialismo.
En el año 1974 en la provincia de Jujuy estaban en producción 140.000 hectáreas de tierra agrícola, donde se incluyen la caña, el tabaco, los cítricos y la horticultura. El censo del 2008 mostró que el área sembrada era de 162.000 hectáreas, o sea un crecimiento de solo 22.000 hectáreas en un periodo de 34 años. La extraordinaria concentración latifundista, que es superior a la que se registra a nivel nacional, se evidencia en el hecho de que 5 grandes propietarios terratenientes concentran el 40% del valor fiscal de todas las tierras rurales de la provincia. En relación a las tierras aptas para la forestación se registran un millones de hectáreas, según estudios del Colegio de Ingenieros, de las cuales sólo 20.000 están con implantaciones, según este estudio por cada 10 mil hectáreas se pueden generar 3.500 puestos de trabajo.
Lo más grave desde el punto de vista de cómo ubicar a Jujuy en el presente y su futuro es la cantidad de industrias manufactureras que hay en la provincia, porque la tierra como un factor de producción tiene limitaciones físicas, pero fundamentalmente hay una clara decisión política de mantener la concentración de la tierra.
Según el Censo Nacional Económico del año 1974 había en nuestra provincia 707 establecimientos manufactureros que ocupaban 15.120 obreros, ocupados en la industria azucarera, la siderurgia y el procesamiento de minerales. El Censo Industrial del 2003/2004 registra la existencia de 825 establecimientos industriales con una ocupación de 7.601 trabajadores. Este ínfimo crecimiento de establecimientos al mismo tiempo va acompañado de una mayor concentración de la producción industrial y agroindustrial en un puñado de monopolios y latifundistas. Del total de la producción manufacturera cinco empresas concentran el 95 % del valor creado.
Ledesma S.A. sobre 157.556 hectáreas solo explota 40.000
La Esperanza S.A. posee 64.219 y explota 8.000
Río Grande S.A. posee 26.563 y explota 7.000
Forestal Norte S.A. La empresa Aceros Zapla le transfirió 24.500
La familia Bracamonte posee 24.544
La empresa Minetti que pasó a manos de capitales imperialistas suizos en los últimos años, se ha convertido también en uno de los principales grandes terratenientes debido a que por nuevas compras pasó de 12.000 hectáreas a 36.000.
En la minería esta en producción Minera Aguilar, en manos de los suizos, Glencore S.A.
Reactivaron la explotación de Mina Pirquitas, la empresa Silver Standar de capital imperialista canadiense y un fondo de inversión de capitales imperialista norteamericano.
La empresa de capital imperialista Chino San He Hope Full Grain & Oíl Group ha solicitado exploración sobre 150.000 hectáreas de Yungas.
Con el tema del mineral estratégico del litio operan en Jujuy la empresa de capitales imperialistas canadienses Lithium América asociada a la japonesa Mitsubishi. Y también están la empresa Toyota Tsusho Corp. asociada a la australiana Orocobre.
El grupo Ledesma: Martin Blaquier hijo de Carlos Pedro Blaquier, está en el Banco Boston en la Argentina y en Estados Unidos, también se desempeña en el grupo Camuzzi (italianos asociados a yanquis). En el petróleo y gas se asociaron a Tecpetrol (Italia), Repsol (España), Petrobras (Brasil), Mobil Argentina y Compañía General de Combustible. La última asociación es con el grupo yanqui de Cargill, para ampliar la planta Glucovil en San Luis.
Ingenio Ledesma:
En la década de 1880 se inicia el periodo de plena integración de la economía azucarera de Jujuy al mercado.
En 1908 se crea la Compañía Azucarera Ledesma, empezaron con 7.000 hectáreas hasta llegar a las 157.556 de estos días.
La historia en la zona de Ledesma ha sido de rebelión y de luchas donde se derramó mucha sangre de los pueblos originarios que habitaban esa región. A Jujuy llegaron los vientos del levantamiento de Tupac Amaru a los pocos días de su inicio. Fueron los originarios de esa zona los primeros en adherir a la rebelión. A los pocos días la represión de la fuerza militar realista ejecutó a 17 rebeldes.
En 1908 y 1909 hubo rebeliones de los Guaraníes contra Ledesma
En 1916 los obreros del Ingenio Ledesma iniciaron la lucha contra el pago de sus salarios con vales y especies y contra la superexplotación en jornadas laborales de 10 y 12 hs. Como consecuencia de la represión murieron 10 obreros y hubo once heridos. Dos años después, en junio de 1918, también hay una lucha en cuya Comisión de huelga están conectados los caciques de los 4.000 indios venidos del Chaco.
En el año 1923 se vuelve al conflicto en Ledesma. En esa oportunidad la huelga se extendió por 6 días y una movilización obrera intentó asaltar y ocupar el Ingenio. La represión arroja esta vez, el saldo de un muerto y 29 detenidos.
Mucha gente recuerda el alzamiento de 1930, de originarios del lote San Antonio (parte de lo que es hoy el “Triángulo”). En ese entonces, el comisario Molinari mató a cuatro personas y dejó un tendal de heridos.
En el peronismo hubo dos alzamientos de zafreros y servidores de altos jefes en el Ingenio. Uno en 1943, y el segundo –el más recordado- en 1946. Este último fue en plena reivindicación obrera del gobierno peronista. Las cosas cambiaron en cierta forma; quizás sea la única vez que los obreros tuvieron primacía en la lucha. Los directivos estuvieron sitiados en la fábrica, sin agua ni alimentos por varios días.
Los directivos que cayeron en manos de los huelguistas, sufrieron castigos corporales y fueron obligados, a látigo, a trotar por las calles, con riendas y arneses, como animales de tiro. Una Guaraní cocinera de una casa, la “Cuña” María, fue la primera en levantar el látigo contra el lomo de los patrones, los obreros querían, por todos los medios, que los jefes supieran, aunque sea por unos días, lo que es el hambre (Diez Décadas: Libertador 1899-1999, Olga Demitropulos)
En las últimas décadas hubo varias conducciones combativas en el sindicato de Ledesma, una en 1973, con militantes de Vanguardia Comunista como Jorge Weis, luego en 1983 después de la dictadura y en 1988 con una marcha a San Salvador y acampe en la legislatura.
Recientemente en la última elección del sindicato gana una lista que en una asamblea el 28 de junio del 2011, vota salir de la CGT para ingresar a la CTA, y deciden el primer paro en muchos años para el día 7 de Julio.
Muchas son las historias de represión y muerte en la que tuvo participación el Ledesma, pero nada supera la ocurrida durante la dictadura fascista de 1976, la empresa en la noche del 20 de Julio, provoca un apagón en la zona de Calilegua, el ejército, junto con vehículos del ingenio, y todo el apoyo logístico secuestra cerca de 400 personas, de un listado confeccionado por la empresa; son trasladados a campos de concentración dentro de la misma, torturados y desaparecieron 33 personas.
Fue muy importante la investigación histórica, económica y social realizada por el camarada Carlos Aramayo quién en su libro Jujuy en el Bicentenario. Contexto e historia de luchas, publicado en abril del año 2009, realizó un importante aporte al conocimiento de la formación económico-social de Jujuy, lo que le ha permitido al partido de Jujuy avanzar en un análisis correcto de la realidad de nuestra provincia, y también para que el zonal aborde con más fundamentos el trabajo político y organizativo a realizar. El libro señalado nos sirve como base para escribir este trabajo.
El zonal del partido definió como centro de concentración en la provincia el trabajo sobre el Ingenio Ledesma, fue a partir del Jujeñazo con centro e inicio del mismo en lo que fue el Libertadorazo de mayo de 1997, donde después de varios intentos logramos afirmar una relación que con el tiempo fue creciendo. Fue importante para esto el trabajo realizado por Gustavo Funes, en ese momento Secretario de la Juventud y por Susana Valerdi que escribió el folleto La pueblada de Libertador y el Jujeñazo, y que junto a Santiago Zamora de la dirección de la Juventud de Jujuy ayudaron a enraizar el partido y la juventud. Luego Kike Mosquera decidió radicarse en Libertador General San Martín en el año 1999 apoyado por la Juventud de la zona. Ya hacía un año que se había venido a vivir a San Salvador de Jujuy.
En un trabajo de muchos años se afiliaron algunos jóvenes y se organizó la CCC, tras lo cual Kike Mosquera fue objeto de 13 atentados a su casa y a su persona. Para enfrentar esta situación tuvimos que elaborar minuciosamente tareas de partido y del movimiento donde fuimos planificando cada acción de lucha reivindicativa y cómo avanzábamos fortaleciendo a la CCC como organización de frente único revolucionario en lo político e ideológico para lograr enfrentar a un enemigo que es parte del bloque de clase dominante de la Argentina. En este proceso sufrimos muchas represiones y las muertes de Marcelo Cuellar y Cristian Ibáñez en el año 2003 durante la gobernación de Fellner.
El control de Ledesma sobre el Estado de Jujuy le asegura, que se legisle a su favor, que se le cobre pocos impuestos y se los exima, y el uso de la represión para resguardar su propiedad, sus ganancias, sus leyes.
Ledesma es la base del Estado de la provincia de Jujuy, controla la policía, cuyos jefes regionales viven en casas dentro del ingenio; tiene instalado en el Barrio Ledesma, dentro de las instalaciones del Ingenio, un destacamento de Gendarmería. El tema de la seguridad y los trabajos de inteligencia lo realiza un oficial retirado del ejército con especialidad de inteligencia, y hacen un seguimiento capilar de la vida social, política y gremial de toda la población. También instaló cámaras de seguridad con las cuales monitorea todo lo que ocurre en la ciudad de Libertador General San Martín.
Cuenta con usina propia, y el excedente de energía lo vende a la red nacional, también cuenta con aeropuerto propio, a 7 km. en Calilegua, donde casi todos los días realizan vuelos a Bs. As. con aviones privados propios.
Desde ya influye en toda actividad cultural, en la iglesia, en algunos medios periodísticos locales, en qué carreras se estudia y también en la actividad religiosa.
A lo largo de la historia del siglo XX, con excepción del gobierno peronista de 1946-1955, los gobiernos nacionales y provinciales han beneficiado a Ledesma, por su papel en el bloque de clases dominantes. Desde ya su tamaño nacional, con respecto a las clases dominantes de Jujuy es enorme por lo que nada ocurre en la vida económica, política, social de Jujuy al margen suyo. Los beneficios provinciales son enormes, desde el control del agua para riego, la excepción de impuestos o pagos irrisorios de los mismos, como que en el año 2008 pagó $1.440.594 de impuesto inmobiliario por las 157.556 hectáreas que posee, lo que significa $ 9,14 por hectárea. Paga el 1,6 de ingresos brutos, cuando el comercio minorista paga el 2,5 % y los profesionales el 1,8 % y paga menos impuestos de alumbrado, barrido y limpieza que la feria de frutas y verduras de Libertador. En los balances de los tres últimos años, que cierran al 31 de mayo de cada año, la empresa Ledesma S.A. declara que sus ganancias crecen de la siguiente manera: $ 83 millones en el 2009, $ 158 millones en el 2010 y $ 210 millones en el 2011. En los últimos 10 años sólo generó 120 nuevos puestos de trabajo.
Los sucesivos gobiernos provinciales desde 1983, todos del PJ, y las legislaturas provinciales, nunca sacaron leyes o tomaron medida alguna que perjudique a Blaquier, sólo los beneficiaron de distintas formas. Blaquier siempre se encargó de bendecir a cada candidato a gobernador, sea del partido que sea. También su preocupación mayor fue la de que ocupen los primeros cargos de las listas de legisladores sus “amigos”. Siempre tuvo decisión en poner hombres vinculados al ingenio Ledesma en los principales cargos del ejecutivo provincial.
Los acuerdos y beneficios con el Gobierno de K y luego el de CFK, también son importantes, como el cupo de la exportación del azúcar, el cupo de etanol de 48.996 metros cúbicos, el más importante de los que se distribuyó entre los monopolios productores de este biocombustible.
El gobierno nacional de los K, que se dice “nacional y popular” en todos estos años ha beneficiado a un pequeño número de monopolios imperialistas, de burguesía intermediaria, bancos y terratenientes. Estos son los que junto a los distintos gobiernos locales han reprimido sangrientamente luchas como el acampe de La Primavera en Formosa, el Parque Iberoamericano en Capital Federal, la dudosa muerte de Mártires López luego del triunfo del acampe en el Impenetrable en Chaco y ahora apañan la sangrienta represión de Libertador.
El gobierno nacional, Blaquier y los distintos grupos del bloque de clases dominantes han decidido actuar con mano dura, con muertes, a aquellos que osen tocar los intereses de esos terratenientes que son el sostén de los imperialismos y la lacra que mantiene el cepo estructural de la argentina, que empobrece al pueblo y que impide el desarrollo del país. Por esta razón también han judicializado la protesta social y a miles de luchadores y dirigentes populares. Una muestra más de esto es que actualmente el mismo Juez Samman que ordenó la represión lleva adelante el juicio por los hechos de libertador caratulados como “Atentado y resistencia contra la autoridad seguida de cuádruple homicidio”
Desde el PCR reafirmamos que sólo la revolución democrática, popular, agraria y antiimperialista, en marcha ininterrumpida al socialismo podrá terminar con el estado de los Blaquier y del bloque de clases dominantes que gobiernan Argentina, y para ello en cada momento elegimos la táctica que nos aproxime a la revolución.
