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25 de January de 2012

Ya han transcurrido veinte días del corte protagonizado por los habitantes de Famatina, Chilecito y otros pueblos de los alrededores.

Con el pueblo riojano de pie, Famatina no se toca

Hoy 1403 / Ayer la Barrick, hoy Osisko, mañana los chinos...

En Alto Carrizal, unos 10 kilómetros al noroeste de Famatina, a más de 2.000 metros de altura, soportando de día un sol que raja la tierra, y de noche temperaturas muy bajas, enfrentando amenazas y provocaciones, se encuentra acampando la dignidad de las mujeres y de los hombre del pueblo de La Rioja.
Se trata de una treintena de carpas chicas, una gran carpa para cocinar y unas 500 personas que rotan permanentemente.

En Alto Carrizal, unos 10 kilómetros al noroeste de Famatina, a más de 2.000 metros de altura, soportando de día un sol que raja la tierra, y de noche temperaturas muy bajas, enfrentando amenazas y provocaciones, se encuentra acampando la dignidad de las mujeres y de los hombre del pueblo de La Rioja.
Se trata de una treintena de carpas chicas, una gran carpa para cocinar y unas 500 personas que rotan permanentemente.
Manifiestan la decisión de impedir que pase un solo contingente de exploración o de producción de la Osisko Mining Company, para subir los faldeos del cordón del Famatina hacia los lugares donde extraer los minerales de los que sacarán el oro, la plata y decenas de otros minerales valiosos.
No van a permitir que una empresa imperialista, que se presenta como canadiense se lleve una riqueza de centenares de millones de dólares, dinamitando los cerros, utilizando millones de litros de agua por día para dejarla contaminada con cianuro y otros productos altamente tóxicos. Explotar a los trabajadores riojanos durante no más de diez años y dejar tras si, miseria, desertificación, contaminación.
Durante cientos de años los pueblos originarios descubrieron y explotaron los minerales del Famatina para sus necesidades. Los ingleses, posteriormente, utilizaron esos descubrimientos y explotaron en gran escala la plata, con mineros traídos de Chile que le dieron el nombre a la naciente ciudad de Chilecito. Inmensas ganancias durante unos años para los ingleses y sus sirvientes nacionales. Para la provincia, explotación sin límite de los trabajadores, y disminución de la producción agrícola. Para terminar yéndose, dejando como único legado inútil, el cablecarril a la mina, uno de los más importantes del mundo en su momento, en una de las provincias más pobres de la Argentina.
Pero ahora vienen por más, el afán de ganancias de las grandes mineras, exacerbadas por la crisis mundial, exige derribar los cerros, moler las rocas, mezclarlas con miles de toneladas de cianuro y llevarse un producto apenas concentrado que se elaborará en Australia, en Canadá o en Europa. Dejando para el país en concepto de impuestos el 3% de las ganancias que las mismas mineras declaren obtener.
Ya existen pocos países en el mundo donde esas mineras puedan actuar con semejante nivel de exigencias y sin control alguno. Y menos aún países donde su presidente (Cristina Kirchner) juegue todo su prestigio al apoyo de estos megaemprendimientos, en algunos de los cuales como Cerro La Vanguardia en Santa Cruz, están personalmente asociados.
Alentados por semejantes apoyos y con la ayuda de suculentos “incentivos” de millones de dólares, se aseguraron el apoyo del gobernador Beder Herrera. Y con total impunidad frente a autoridades policiales y judiciales, reservan para los opositores: calumnias, amenazas, juicios y garroteadas.

 

Una vanguardia. Una historia.
Como en toda gesta popular, existe una vanguardia. Un grupo decidido de mujeres, chileciteñas, de Famatina y de la ciudad de La Rioja que se pusieron de pie, dieron forma a la resistencia y enfrentaron similares intentos de la minera Barrick hace pocos años, ganaron lentamente la adhesión del pueblo, fueron precisando su programa, extendiendo sus denuncias, buscaron la unidad con los núcleos de otras provincias opuestos a la mega minería y conformando lo que es hoy la confluencia de las Asambleas de los Pueblos.
Pocos recuerdan ahora que esas mujeres, sin siquiera aparecer en los “grandes medios” de prensa, establecieron durante días el bloqueo al cerro Famatina en Peñas Negras, en condiciones mucho más precarias, sufriendo feroz represión del gobierno riojano. Y también pocos recuerdan que esa lucha triunfó, que la Barrick, la primera empresa de megaminería del mundo tuvo que retirarse y abandonar sus proyectos.
Fue tan duro el golpe que se le aplicó al entonces gobernador Mazza, que actuaba como gerente provincial de la Barrick que lo hizo tambalear y renunciar, lo que permitió que asumiera el vicegobernador Beder Herrera.
Todo el pueblo acudió al estreno en Chilecito, de la película “La tierra sublevada” de Pino Solanas en el mes de octubre del 2009. Y vieron a ese grupo de mujeres, almacenera una, abogada la otra, amas de casa las más, con sus hijos en brazos, pedir al pueblo su apoyo para juramentarse que no volviera la Barrick ni ninguna otra megaminera. Llamaba la atención su firmeza, cuando parecía conjurarse el peligro con la posición favorable de Beder Herrera, que hizo campaña electoral contra los emprendimientos y la sanción de la Ley 8137 que prohibía la megaminería contaminante en la provincia.
Bastó que Beder ganara la elección, para que se derogara la Ley, se formara una sociedad anónima integrada por el estado provincial y esa sociedad contratara a la Osisko para explorar y explotar el oro y otros minerales en el Famatina.
Cegados por los dólares fáciles, cometieron un error, subestimar a las mujeres y a los hombres de La Rioja y no tener en cuenta la historia.

 

Otros antecedentes
Se olvidó Cristina que producto de su posición reaccionaria, cuando viajó a la ciudad de La Rioja y quiso utilizar para su campaña electoral la conmemoración del martirio del obispo Angelelli, muchas organizaciones se desprendieron del acto oficial e hicieron su propio homenaje. Se olvidó Beder que tuvo un cierto castigo electoral, que favoreció al radicalismo, justamente en distritos como Chilecito.
Y se olvidó que tuvo que asumir rodeado de toda la Policía de la provincia, mientras 1.500 personas en La Rioja (una cantidad muy grande para esa ciudad) manifestaron su repudio particularmente por la política minera en un sitio emblemático: la primera y centenaria Escuela Normal, fundada por Castro Barros, convertida en escuela shopping por Beder.

 

La batalla actual
Pero sobre todo, Beder se olvidó de las mujeres y de las Asambleas del Pueblo. El 15 de diciembre una delegación de Osisko y de la Secretaría de Empleo de la Provincia se instaló en Famatina para hacer promesas y “comprar voluntades”. Advertidos de ello se movilizaron las asambleas y se convocó al pueblo de Famatina por el método tradicional: haciendo repicar las campanas de la Iglesia del pequeño pueblo.
Sin haber preparado la represión policial, las autoridades emprendieron un veloz retorno por la ruta a Chilecito a más de 150 Km por hora, mientras en esa ciudad se preparaban otros compañeros para “recibirlos”. Tuvo que jugar la Gendarmería para lograr un desvío que les permitiera llegar con premura a la capital.
En el apuro, dejaron olvidados una cantidad de papeles que demostraban todo lo sostenido por los opositores, pero además una investigación persona por persona de los integrantes de las asambleas, con sus características personales, ocupaciones y “grado de peligrosidad”. Verdaderas listas negras como las de la dictadura en manos de una empresa imperialista extranjera.
Así se fue creando el clima para el corte total, urgidos porque el contrato con la provincia establecía el 16 de enero como la fecha tope para iniciar las “labores de exploración”.
Presionó la policía para quebrar el piquete, luego un grupo numeroso de matones disfrazados de trabajadores. Pero el piquete no sólo continuó, sino que fue creciendo y logrando la adhesión de todos los pueblos de La Rioja de las provincias mineras, de artistas, de centenares de jóvenes hasta transformarse en lo que es hoy: La vanguardia de la dignidad frente a las multinacionales imperialistas y la política verdaderamente entreguista de Cristina Kirchner, en este como en otros terrenos.

 

Y agazapados los chinos
Más disimulados trabajan otros imperialismos. Ya se ha hecho público un convenio de la provincia de La Rioja con el gobierno de China firmado en un viaje de Beder Herrera a ese país, poniendo a disposición de ellos toda la prospección minera de la provincia, acordando otra cantidad de puntos, incluyendo la enseñanza del chino mandarín en una de las universidades nacionales de la Rioja y el desembarco de un pequeño número de estudiantes chinos en esa universidad.
Se ha conocido, oficialmente, la propuesta de la empresa Shandong Gold Group para explotar vetas auríferas en la sierra de Guanchín, inmediatamente arriba de la ciudad de Chilecito. Aunque es más generalizada la información de que el interés principal está puesto en la explotación de minerales de uranio ya determinados y explotados anteriormente en la Sierra de Velazco e incluso se habla de la Sierra de Ulapes, más al sur.

 

Un gran frente único
Un turista puede contemplar maravillado las cumbres casi siempre nevadas del Famatina, oír el canto del agua que baja de los cerros y recorre toda la ciudad y los alrededores por rumorosas acequias prolijamente cuidadas. Pero no darse cuenta que allí está la vida de los valles y su población. Con registros mínimos de lluvia, el abastecimiento urbano y la producción agrícola y ganadera, dependen de ese complicado trazado de canales y turnos de riego.
Desde el pequeño minifundista que produce pimientos, frutas, nueces o chivos que terminarían de arruinarse, hasta grandes inversores, que se dedican a la principal producción de La Rioja: las aceitunas y el aceite de oliva, cuya exportación se cerraría por la contaminación. El que vive del turismo. El que nació en Chilecito o en Famatina y quiere “su lugar en el mundo”. Del cura al intendente. Todos están agredidos. En distinta medida, pero no pueden aceptar ser agredidos por la prepotencia brutal de empresas imperialistas insaciables. Y no lo van a aceptar.

 

Todos somos Famatina
Los sectores populares, incluso algunos que en otros terrenos coinciden o coincidían con las políticas de Cristina, se han ido pronunciando y manifestando su adhesión, muchos de ellos han concurrido al piquete.
Por el otro lado, las declaraciones lacayunas y entreguistas del secretario de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, la posición beligerante de gobernadores como Beder, Gioja, etc. y la decisión de Cristina de vetar la Ley de preservación de los glaciares y las reformas a la ley de minería.
Todo indica que el enfrentamiento va a ser duro y prolongado. El corte se mantendría toda esta semana y se organiza para el jueves una gran marcha a la ciudad capital de La Rioja
Las trincheras están trazadas. El agua vale más que el oro. Todos somos Famatina.