El gobierno nacional, en la reunión de la mesa de negociación salarial del pasado 10 de abril, ofreció un incremento salarial de un 20,5% a pagar en tres cuotas. La primera de un 12% en marzo, la segunda un 6% en junio y la tercera un 2,5% en setiembre. En el mismo mes de setiembre también se aplicaría una corrección del nomenclador universitario (establece la relación salarial entre categorías) que implicaría un 1% más.
El gobierno nacional, en la reunión de la mesa de negociación salarial del pasado 10 de abril, ofreció un incremento salarial de un 20,5% a pagar en tres cuotas. La primera de un 12% en marzo, la segunda un 6% en junio y la tercera un 2,5% en setiembre. En el mismo mes de setiembre también se aplicaría una corrección del nomenclador universitario (establece la relación salarial entre categorías) que implicaría un 1% más.
Esta propuesta fue considerada claramente insuficiente por parte del plenario de secretarios generales. Insuficiente porque el porcentaje ofrecido está por debajo de la inflación proyectada, de un mínimo de un 25%, y por lo tanto estaríamos ante una reducción salarial en términos del poder adquisitivo de los salarios. También insuficiente por la modalidad perversa del pago en cuotas en la cual la última está en el mes de setiembre.
Un cambio de situación
El dato más significativo en el plenario fue que la moción de rechazar la oferta salarial fue tomada por unanimidad. Estuvieron presentes 19 sindicatos de universidades nacionales y en todos los mandatos las mociones eran de rechazar. Los sindicatos docentes de las universidades de Buenos Aires, Mendoza, San Juan, Jujuy, Salta, Tucumán, Litoral, Nordeste, Comahue, La Pampa, Patagonia Austral, Patagonia San Juan Bosco, IUNA, Misiones, Bahía Blanca, Centro, Tecnológica, Lujan pertenecientes a la Conadu Histórica. Estuvo presente también el sindicato de la Facultad de Ciencias Exactas de la UN de Córdoba que solicitó su incorporación a la Federación.
Los mandatos de asambleas y en varios casos los relevamientos a través de encuestas con resultados contundentes en contra de la propuesta del gobierno sorprendieron a las propias conducciones de algunas de esas asociaciones. Conducciones éstas que en el anterior Plenario de secretarios generales del 29 de abril votaron por no hacer medidas de fuerza “por no tener mandatos”.
El paro nacional de 48 horas del 11 y 12 de abril resuelto en ese plenario tuvo un muy alto acatamiento. Además realizaron el paro las asociaciones de las universidades de Rosario, Río Cuarto, San Luis, Villa María y los colegios preuniversitarios de Córdoba, que no pertenecen a la Conadu Histórica.
El gobierno nacional puso en marcha el operativo para imponer su propuesta apelando al colaboracionismo de la conducción de la Conadu (la otra federación surgida a partir de la intervención del ministro de Trabajo Flamarique del gobierno de De la Rúa y ahora colaboracionista del gobierno kirchnerista). Impuso en el plenario de dicha federación por siete votos a tres y una abstención la aprobación de la propuesta salarial del gobierno.
Ante la ofensiva del gobierno por imponer la aceptación del techo salarial la Conadu Histórica debe constituirse en el eje vertebrador de un plan de lucha del conjunto de la docencia universitaria. Para esto es necesario luego del paro del 24 y 25 de abril la urgente convocatoria a un Congreso Nacional de la Conadu Histórica al que se invite a todas las asociaciones que aún no perteneciendo a la federación estén dispuestas a luchar.
Es un camino de derrota el planteo realizado por parte de la conducción de nuestra federación de que “una vez que firma la Conadu no tiene sentido hacer paros”. Esta posición es una de las diferencias que desde la CNPL tenemos con la actual mayoría de la conducción de la federación. Este planteo nos subordina al colaboracionismo de la Conadu que fue creada para justamente siempre aceptar y firmar las propuestas del gobierno nacional.
El Plenario de secretarios generales resolvió continuar la lucha con un paro nacional de 48 horas para los días 24 y 25 de abril. Es clave convocar desde la Conadu Histórica a las asociaciones de base de la otra federación que votaron también por rechazar la propuesta del gobierno (San Luis, Rosario, Río Cuarto, etc.) y garantizar un masivo paro en las universidades nacionales.
Es un hecho muy relevante la presencia en el Plenario de las representaciones de las federaciones estudiantiles de las universidades de La Plata, Buenos Aires, Rosario, Comahue y Mar del Plata, que propusieron la realización conjunta de una jornada nacional de movilización de estudiantes y docentes para el mes de mayo. La propuesta fue recibida con alegría pues empalmó incluso con varios de los mandatos que planteaban la necesidad de movilizar en las calles y en conjunto con los estudiantes por los reclamos comunes.
*Coordinación nacional. CNPL (Corriente Nacional de docentes universitarios Protagonismo y Lucha)
