Con la participación masiva de trabajadores del Ingenio, familiares, organizaciones sociales y habitantes del pueblo de San Pedro y la Esperanza, el lunes 16 se realizó una multitudinaria marcha como continuación de los reclamos contra la empresa arrendataria Roggio SA (BRAI Agroindustrial).
Con la participación masiva de trabajadores del Ingenio, familiares, organizaciones sociales y habitantes del pueblo de San Pedro y la Esperanza, el lunes 16 se realizó una multitudinaria marcha como continuación de los reclamos contra la empresa arrendataria Roggio SA (BRAI Agroindustrial).
En los días previos, los medios locales y el propio gobernador no han dejado de afirmar que el reclamo se trataba de “una interna gremial” del Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar (SOEA), intentando, inútilmente, evitar que el pueblo acompañe esta lucha y evitar el éxito de la convocatoria: “la respuesta fue contundente, la marcha es espectacular, es una forma de mostrarle al pueblo, al gobierno y a la empresa que ya nos cansamos. Hablan de inversión, pero aquí nunca vimos la inversión, que vengan los del gobierno a caminar por el campo y busquen dónde está la inversión”, comenta un delegado. “La prensa juega a dividir, diciendo que es una interna gremial, niegan el conflicto. Lo más triste es que nos quieren hacer pelear pobres contra pobres”, agrega un familiar.
“¿Dónde están los medios? La prensa dice lo que el gobierno quiere, no dicen la verdad. Les meten los billetes en el bolsillo a los periodistas y no salen a la calle”, afirma una voz por el altoparlante, manifestando la bronca contenida de todos los obreros debido a la manipulación de la información que realizan los medios de comunicación.
Por decisión general de asamblea extraordinaria, los trabajadores del Ingenio La Esperanza resolvieron no renovar el arriendo vencido a la empresa. “En el campo nos discriminan, incluso hicimos denuncias al Inadi: nos dicen negros y collas como un insulto. Nos maltratan, hubo despidos y la paga es miserable: nos dan $38 por la tonelada de caña”, afirma un joven trabajador. Otros cuentan: “trabajamos bajo la lluvia, no nos dan capa, ni botas, ni nada. Ahí regamos, cosechamos, preparamos la tierra, todo. Nos pagan $90 por día, y trabajamos hasta 12 horas. Quiero que se vaya esta empresa, hace cinco meses que no trabajamos. Hay muchos trabajadores que sufren, tienen familia, por eso necesitamos que nos apoyen”. “Yo soy estudiante, hoy falté a la facultad para venir acá. No estoy de acuerdo con la empresa ni con todos los reclamos del gremio, pero estoy aquí porque defiendo al pueblo. Muchos familiares míos trabajan en la empresa, y sabemos que sin ese trabajo el 90% del pueblo no vive”, declara una joven ante nuestros corresponsales.
La marcha llegó hasta la plaza central de San Pedro de Jujuy, donde una comisión de trabajadores ingresó a dialogar con el juez que entiende en la causa. “Nos dijeron que nos van a responder en 48 horas, por lo que nos vamos a retirar marchando hasta el Ingenio”, afirmó Santiago Bonilla, secretario general del gremio, quien aclara que “los reclamos vienen desde hace mucho, por los incumplimientos de la empresa: atropellos, recargos en las tareas del trabajo, discriminación, hay compañeros que no trabajaron ni un día desde noviembre. La empresa frenó la posibilidad de trabajar por lo menos dos meses, con eso la gente ya se quedaba tranquila. Pero la anterior dirección acomodaba su gente, que trabajaban hasta seis meses, dejando desocupados a los demás trabajadores. Es un gran negocio entre la empresa, el gobierno y los dirigentes traidores, pero hoy dijimos basta a todo esto, así que agradezco a todos mis compañeros por el apoyo masivo”.
Acto frente a la fábrica
Frente a la fábrica, los obreros acompañados por el pueblo, realizaron un acto donde se agradeció profundamente el apoyo ofrecido por la CCC, la CTA y el Partido Obrero.
Elsa Colqui, dirigente de la CCC de San Pedro, aseguró que “los pueblos tienen memoria: no nos olvidamos que acá, en La Esperanza, fue donde se vivió uno de los procesos más avanzados de la lucha obrera de los ’90. Aprendemos día a día, y ustedes tienen guardada en la retina esa experiencia que logró el control obrero. En aquel momento era que se vayan los Jorge, hoy es que se vaya Roggio. El saqueo y la explotación son parte del capitalismo, de la explotación del hombre por el hombre, pero la discriminación racial tiene que ver con cuestiones fascistas. Somos como somos: somos negros, somos pobres, somos coyas ¡y somos orgullosos de lo que somos! No permitamos más que nos traten como si fuéramos basura, porque somos seres humanos, porque producimos y hacemos grande esta patria. Sigan adelante, que van a tener el apoyo de todo el pueblo y hoy fue una muestra de eso”.
Terminado el acto, los obreros resolvieron realizar una asamblea a la tarde y mantenerse en estado de alerta. En estos días, las calles de San Pedro y La Esperanza recuerdan una experiencia más que conocida por este pueblo: la lucha puede lograr que las empresas vuelvan a las manos de sus verdaderos dueños, los trabajadores.
