La protesta –que incluyó una movilización hacia Casa de Gobierno, la Cámara de Diputados y el Centro Municipal de Cultura– finalizó en las puertas de la Municipalidad al grito de “¡Que se vaya! ¡Que se vaya!”.
La marcha convocada por los vecinos, a través de mensajes radiales, blogs (www.elsoreteestierno.blogspot.com es el más importante), por la Asamblea de artistas, y la multisectorial, creció aun más cuando se supo que el jefe comunal santarroseño decretó, por resolución y a espaldas del Concejo Deliberante: el Presupuesto 2008, un tarifazo con un incremento de las tasas comunales de casi el 50 por ciento y un aumento de las multas que llega al 1.000 por ciento. También “el impuesto al perro” para todo aquel que tenga más de dos canes en su casa.
La gente comenzó a agolparse a las 20 en la plaza San Martín, frente al municipio. La marcha se destacó por su colorido y por la inventiva popular, por ejemplo dos perros (Gran Danés cruza con Dogo) vestían remeras que tenían la leyenda “yo como tiernito”; y los bustos y esculturas que adornan la avenida San Martín tenían carteles que burlaban de las clausuras ordenadas por Tierno: el busto a Mariano Moreno decía: “Clausurado por zurdito subversivo”.
La columna se dirigió por la avenida San Martín hacia la explanada de Casa de Gobierno. Luego cruzó hacia la Cámara de Diputados para retomar por la calle Corrientes, más tarde Irigoyen, y de allí hasta el Centro Municipal de Cultura, reuniéndose nuevamente frente al Municipio. Eran las 22 cuando cerca de tres mil personas fueron hasta la entrada del municipio.
Llovía, pero nada impidió que la manifestación, convocada para repudiar las políticas “autoritarias” del intendente, finalizara pidiendo la renuncia de Tierno cantando: “¡Y, llueve, y llueve… el pueblo no se mueve!”, “¡que se vaya, que se vaya!”.
No es casualidad
La lucha del pueblo santarroseño se enmarca en la política de ajustes que impulsa el gobierno provincial. El sistema intenta retomar su cauce luego de haber sentido el cimbronazo del 2001, sin embargo la lectura que hacen los políticos de los ánimos populares, es totalmente errónea y lo van a pagar. La impresionante marea de votos bronca en La Pampa les restó crédito a todos los candidatos (ya sean del sistema o testimoniales); a la mayoría los dejó afuera del asunto y a los que entraron el pueblo les puso una soga al cuello.
En el caso de la intendencia de Santa Rosa, Tierno, que se embanderó con el discurso de la “anti política y la mano dura”, actúa como si la gente lo hubiera llevado en andas hasta el municipio. Con la orden desde arriba de mantener calma a la ciudad “el sheriff” se ha dedicado a impulsar las medidas más antipopulares (ver hoy Nº 1199) con el fin de aumentar la recaudación y disciplinar a la sociedad, lo que “el sheriff” considera el “toque europeo” de su gestión.
La movilización popular está en pleno auge y se espera otra gran marcha para la semana próxima. El gobierno provincial intenta despegarse ante los pedidos de intervención, sin embargo los ánimos populares no dan para mirar a otro lado. La gente se anima cada vez más y lo que se presentaba como la lucha contra “el loco” Tierno va tomando la forma de un inmenso grito: “Que se vayan todos, para que decida y gobierne el pueblo”.
