“Luego de la campaña 2003-2004, y con los altos precios internacionales vigentes, en toda la Pampa Húmeda fue creciendo la ilusión de la reactivación, incluso de aquellas unidades productivas explotadas por los pequeños chacareros y los arrendatarios más pobres. Sin embargo convendría relativizar los resultados ya que como se ha explicado, según datos del último Censo Agropecuario, entre 2002 y 2008 desaparecieron 59.856 explotaciones agropecuarias”.
“Luego de la campaña 2003-2004, y con los altos precios internacionales vigentes, en toda la Pampa Húmeda fue creciendo la ilusión de la reactivación, incluso de aquellas unidades productivas explotadas por los pequeños chacareros y los arrendatarios más pobres. Sin embargo convendría relativizar los resultados ya que como se ha explicado, según datos del último Censo Agropecuario, entre 2002 y 2008 desaparecieron 59.856 explotaciones agropecuarias”.
Oscar Ainsuain y Mariana Echaguibel: A cien años del grito de Alcorta. Soja, agronegocios y explotación.
