“La gran batalla de Stalingrado fue la más grande de toda la historia de las guerras y decidió de modo fundamental todo el curso de la Segunda Guerra Mundial. Efectivamente, la sensacional victoria soviética significó el comienzo de la total debacle nazi-fascista. A partir de Stalingrado, la Alemania hitleriana pasó a la defensiva estratégica comenzando a retirarse en todos los frentes. La batalla de Stalingrado había comenzado el 19 de julio de 1942 y concluyó el 2 de febrero de 1943. Las bajas alemanas en el curso de la batalla subieron hasta los 800.000 hombres, se destruyeron cerca de 2.000 tanques, 10.000 cañones, 3.000 aviones y 70.000 automóviles, Los fascistas habían lanzado la batalla decisiva, el grueso de sus fuerzas de choque que resultaron cercadas y finalmente aniquiladas capitulando a la cabeza de Von Paulus, el Mariscal de Campo Alemán.” Jorge Echazú Alvarado: La Revolución y el Socialismo en el siglo XX. (Edit. “Liberación”). Pág. 125.
