A los pocos días de haberse realizado el exitoso 7º Encuentro de Naciones y Pueblos Originarios en esta localidad del norte santafesino, llegó en una imprevista visita el líder y referente de la Comunidad Qom Potae Napocna Navogoh (La Primavera) de la provincia de Formosa, Félix Díaz.
A los pocos días de haberse realizado el exitoso 7º Encuentro de Naciones y Pueblos Originarios en esta localidad del norte santafesino, llegó en una imprevista visita el líder y referente de la Comunidad Qom Potae Napocna Navogoh (La Primavera) de la provincia de Formosa, Félix Díaz.
El mismo había sido invitado a participar en el 7º Encuentro pero no pudo concurrir por razones de fuerza mayor que hacen a su comunidad. Fue recibido por los miembros de la Comisión Organizadora del 7º Encuentro en la casa de su amigo y compañero de las ex Redes de Comunicación Indígena Néstor Lanche, presidente de la Comunidad Mocoví 21 de abril.
Algunos medios locales de comunicación estuvieron presentes, donde agradeció a todos los amigos que apoyan la lucha indígena. Entre otras cosas dijo “esto nos da más visibilidad y más fuerza en el Continente. Tuvimos muchos años vendados los ojos y la boca, pero ahora aprendimos después de mucho tiempo a hablar y relacionarnos socialmente, reconstruir nuestro mundo, y la importancia del pueblo indígena. Lo importante es la par- ticipación del mismo en la sociedad para tener una vida más digna y del valor humano que debe ser la prioridad en nosotros.
“Nuestra situación no ha cambiado nada, la carencia del agua, de DNI, salud, muerte de hermanos producto de esta lucha, por supuestos accidentes o “suicidios”.
Se naturalizó el silencio. Ver al Papa Francisco es un bien para el pueblo indígena, pero un mal también porque a los gobernantes no les gusta que concurramos a la iglesia católica porque no pertenecemos y es una crítica porque un gran sector cree que el Papa es solo para los gobernantes y los que tienen plata.
“Venimos reclamando la aceptación de los pueblos indígenas, la iglesia tiene mucho que ver, y por eso le reclamamos al Papa que entienda que hay junto con el Estado una gran deuda social que tienen que resarcir, queremos ser libres y queremos garantías del Estado. Juan Pablo II pidió perdón a los pueblos indígenas y ahora que tenemos un Papa argentino, es el momento de hacer efectivo ese perdón devolviendo las tierras que eran reducciones de indios y llegar a un acuerdo con el Estado. Tema central es el territorial, como los hermanos wichis que están en el centro de las perforaciones petroleras, empresas petroleras y mineras. Viven sin agua, vivienda, agua, nada, en una miseria total.
“Queremos que se garantice la existencia en una política participativa donde nosotros seamos responsables de administrar y tener nuestra política articulada con el Estado. Para nosotros no llegan los derechos humanos, tenemos que estar juntos a las organizaciones que los defienden.”
Después de una larga charla y de compartir unos mates, Félix Díaz se despidió de todos los presentes miembros de la Comisión Organizadora, donde todos se comprometieron a seguir luchando por los derechos de los pueblos y naciones originarias, para estar presentes el 11 de octubre en la Plaza de Mayo el “último día de libertad de los pueblos originarios”.
