El lunes 29 de julio fue publicado en el Boletín Oficial el orden de mérito de las ofertas en la licitación por la construcción de las centrales hidroeléctricas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic, en el río Santa Cruz, con un presupuesto de 4.400 millones de dólares.
El lunes 29 de julio fue publicado en el Boletín Oficial el orden de mérito de las ofertas en la licitación por la construcción de las centrales hidroeléctricas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic, en el río Santa Cruz, con un presupuesto de 4.400 millones de dólares.
En el primer lugar quedó el grupo integrado por Electroingeniería -de los empresarios Osvaldo Acosta y Gerardo Ferreyra, amigo del secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini–, la empresa imperialista China Gezhouba Group y la local Hidrocuyo. El otro monopolio chino Sinohydro, que venía de la mano de Lázaro Báez, a través de Austral Construcciones, junto a Chediack y la constructora Iecsa, de Angelo Calcaterra, sobrino de Franco Macri, quedó afuera; aunque no presentó una impugnación que empañara el triunfo de la cordobesa, dicen que no tanto porque Lázaro Báez no quisiera hacerlo, sino principalmente por oposición de Iecsa, una pata sustancial del consorcio, tal vez para no afectar su relación con el imperialismo chino (ya que su ingreso quedaba asegurado con la participación del otro monopolio de ese origen a través de Electroingeniería).
La china Sinohydro tiene 63 proyectos en ejecución en el mundo, de los que 11 están en América latina; por su parte, China Gezhouba es responsable del 70% de la construcción de Tres Gargantas (en la propia China), la mayor represa del mundo.
También habrían incidido en ese desistimiento de impugnar el orden de mérito por parte de Lázaro Baéz, como de otros consorcios que se habían presentado, las gestiones “bajo cuerda” de José López, el secretario de Obras Públicas, y de su directo patrón, el ministro de Planificación, de Julio De Vido. Tal sería el caso también de Techint y Panedile, cuyos representantes habían acompañado al ministro a Moscú, con la posibilidad de que ambas compañías participaran del concurso en sociedad con la rusa Power Machine, con la cual compartieron la construcción de las represas Caracoles y Agua Negra, en la provincia de San Juan.
El único que objetó, sin demasiado convencimiento de obtener algo por los “manejos” de López y De Vido, fue el mendocino Enrique Pescarmona, que se había presentado en la licitación por medio de Impsa, en grupo con la filial brasileña de francesa Alstom y Odebrecht, una de las principales empresas del rubro en Brasil, vinculada al imperialismo ruso. Pero lo dejaron afuera por su propuesta de financiación.
Su objeción se basa en que el grupo beneficiado, encabezado por Electroingeniería, presentó una carta de descuento, algo que no estaba previsto en el llamado original, y que también pide el pago de una parte sustancial del proyecto en dólares, por el cual el Estado deberá depositar 1.105,20 millones de dólares fuera del país en 66 cuotas.
Según Electroingeniería, esos fondos se destinarán a una cuenta en Pekín para pagar las seis unidades del tipo Francis que fabricará Harbin Electrice Machinary para la central Kirchner, y cinco Kaplan marca Zhejiang Fuchnjiang Hydropower Equip para la Cepernic.