Esto lo afirmó el “comandante de la revolución ferroviaria” de un gobierno que reinauguró ¡cinco veces! los talleres ferroviarios de Tafí Viejo, en Tucumán.
Esto lo afirmó el “comandante de la revolución ferroviaria” de un gobierno que reinauguró ¡cinco veces! los talleres ferroviarios de Tafí Viejo, en Tucumán.
El diálogo con los empresarios de CSR Qingdao Sifang -empresa que el año pasado tuvo ingresos por 3.800 millones de dólares y emplea a más de 10 mil personas-, reproducido por Infobae.com, no tiene desperdicio. Tras el pedido presidencial, el director de la compañía, Zhang Zaizhong, le dijo a Randazzo: “Si nos hacen un nuevo pedido de coches mañana mismo instalo la fábrica”. A lo que el ministro argentino respondió: “No existe el amor sino las pruebas de amor, ya les compramos 709 coches”.
“Randazzo tentó a los chinos explicándoles que hay 42 mil kilómetros de vías, de las cuales solo 7.500 kilómetros están en estado óptimo. Además les prometió: ‘El gobierno está dispuesto a acompañarlos’”, prosigue la crónica.
Recordemos que estos trenes, previstos para las líneas Mitre y Sarmiento, estarían listos para abril de 2014. Para ello, el gobierno pagó 300 millones de dólares en efectivo, y financió otros 700 millones a una tasa anual del 7 por ciento. El contrato incluye además la puesta en funcionamiento, un stock de repuestos y los service correspondientes. Los chinos se aseguran el suministro exclusivo de repuestos por los siguientes 20 años.
El estado argentino deberá pagar 533 dólares por asiento de pasajero que reemplace, 133 por el vidrio de cada ventana, 10.875 por parabrisas y 1.875 dólares por cada asiento de conductor. El kirchnerismo reafirma así su alianza estratégica con el imperialismo chino, a costa de seguir hundiendo la industria ferroviaria nacional, y cercenando el trabajo de los obreros argentinos.
