Esta mesa digna que podemos tener en las Fiestas no es regalo de nadie. Es porque no bajamos los brazos frente a los gobiernos, y seguimos luchando unidos en la calle. Es porque no nos han podido comprar, ni lo van a poder hacer nunca. Es porque no nos quedamos solos, y tuvimos el apoyo de otros sectores del pueblo, como los almaceneros, que en el punto más difícil de las negociaciones hablaron por nosotros.
Esta mesa digna que podemos tener en las Fiestas no es regalo de nadie. Es porque no bajamos los brazos frente a los gobiernos, y seguimos luchando unidos en la calle. Es porque no nos han podido comprar, ni lo van a poder hacer nunca. Es porque no nos quedamos solos, y tuvimos el apoyo de otros sectores del pueblo, como los almaceneros, que en el punto más difícil de las negociaciones hablaron por nosotros.
Gracias al esfuerzo de todos, y guiados por una línea justa, los compañeros de CCC y de Pueblos Originarios en Lucha podemos cerrar dignamente este 2013, que ha sido muy difícil para nosotros.
En este 2013 la política del gobierno de Cristina Kirchner hizo aumentar el precio de los alimentos, y nos trajo de nuevo el hambre.
En este 2013, también, los gobiernos nacional, provincial y municipal, jugaron a fondo para romper la CCC, dejarnos aislados y darnos el golpe final en estas Fiestas, en las que nos provocaron negándonos la carne de todos los años. Quisieron empujarnos a una lucha desesperada o al saqueo, para después reprimirnos y encarcelarnos.
Pero no lo lograron. Con la consigna “Por una Navidad sin hambre y en paz”, y diciendo que nuestro camino es reclamar respuestas a los gobiernos, y no al saqueo, pudimos unirnos con otras organizaciones de desocupados, de derechos humanos, sindicatos, comerciantes, mujeres, campesinos, estudiantes, partidos políticos. Ellos salieron a apoyar nuestros reclamos por unas Fiestas sin hambre, y juntos salimos a decir que queríamos que entre el pueblo haya paz y no enfrentamientos, y que repudiábamos cualquier represión.
Esto cambió todo, porque nos llenó de apoyo y dividió a los gobiernos, y con la lucha pudimos triunfar.
En estas Fiestas, brindemos por una CCC fuerte y unida, que siga siendo la herramienta de lucha que tenemos los de abajo para enfrentar la injusticia. ¡Una CCC que siga ayudando a unir al pueblo para lograr con la lucha un verdadero gobierno popular, que termine con el saqueo que nos hacen los poderosos del mundo al pueblo argentino, y que resuelva el hambre y la falta de trabajo, para que haya salud, educación, vivienda digna, tierra, y futuro para nuestros jóvenes.
¡Felices fiestas para todos!