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31 de March de 2014

Luego de la exitosa jornada de lucha con dos días de paro y una movilización con mas de 5000 compañeros, la semana pasada se llevó adelante la segunda jornada de lucha de 72 hs. votada por las bases de los gremios del área de salud y administración central  (ATE, AMPROS, SITEA, Vialidad), acompañada por medidas similares de Judiciales con dos días de paro y Fadiunc con 48hs de paro en la Universidad, hicieron que la provincia crujiera por todos lados.

Exitosa y acalorada lucha de los estatales de Mendoza

Comenzó la semana de lucha, con la Conciliación Obligatoria dictada por el Gobierno para el sector de salud y desoída por los trabajadores y sindicatos, con rondas alrededor de la casa de gobierno. Cerca de mil compañeros de salud y Administración estuvimos marchando alrededor de la Casa de Gobierno durante toda la mañana, reclamando por aumento que recomponga el salario (se pide el 45% al básico), que sea en blanco, retroactivo a enero y reabrir paritarias en el mes de junio. Se realizó un acampe en casa de gobierno, donde los trabajadores de distintos sectores demostraron firmeza en la lucha y en la que se recibió mucha solidaridad de la gente y de distintos sindicatos y organizaciones sociales y políticas en las que desde la CCC de ATE estuvimos presente en cada momento. Al día siguiente se  realizó una asamblea en la que se convocó para seguir las rondas la mañana siguiente. El viernes al mediodía, con un emotivo acto y cantando el Himno Nacional de espaldas a la Casa de Gobierno como ya es tradición, se cerró el acampe con gran euforia y combatividad de los compañeros y se acordó 24 hs de asamblea para el 1 de abril y  nueva huelga para jueves y viernes.

 La firmeza mostrada por los trabajadores de la Educación y el crecimiento de la lucha de los estatales, va cercando al Gobierno de Pérez, que además se ha visto acosado por reclamos de trabajadores de viña y bodega y trabajadores de Prensa que enfrentan los despidos en medios del grupo UNO y otros. 

Los estatales mendocinos ya no queremos retroceder y el mensaje es claro al gobernador y a Cristina: Los trabajadores no estamos dispuestos a pagar la crisis, la devaluación y la inflación.