El jueves 24, el kirchnerismo y el macrismo fracasaron en hacer pasar en la Legislatura porteña la transferencia del predio de la ex Escuela de Mecánica de la Armada y de los campos de detención de la Ciudad de Buenos Aires que están en el ámbito del Instituto Espacio para la Memoria (IEM), a la Nación.
El jueves 24, el kirchnerismo y el macrismo fracasaron en hacer pasar en la Legislatura porteña la transferencia del predio de la ex Escuela de Mecánica de la Armada y de los campos de detención de la Ciudad de Buenos Aires que están en el ámbito del Instituto Espacio para la Memoria (IEM), a la Nación.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner había acordado con el jefe de Gobierno Mauricio Macri este traspaso, como hemos denunciado en estas páginas. El proyecto ya había tenido luz verde del Senado el pasado 9 de abril y necesitaba el aval de la Legislatura porteña.
Con ese acuerdo, los bloques kirchnerista y del PRO propusieron el tratamiento sobre tablas del proyecto, en la sesión del 24. Sumaban los 28 votos macristas y 12 de los 16 del interbloque que componen el Frente para la Victoria, Nuevo Encuentro, el ibarrismo y el legislador Pablo Ferreyra.
Pero el día de la sesión, trabajadores del IEM y el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel se hicieron presentes en el recinto, para repudiar el proyecto de traslado. Esto provocó que el interbloque se rompiera, que algunos se abstuvieran, otros se retiraran al momento de la votación, y no se llegó a los 40 votos requeridos para el tratamiento del proyecto.
Ante el festejo de los trabajadores del IEM, la jefa de los legisladores K, Gabriela Alegre, sin darse cuenta que su micrófono estaba abierto lanzó: “Mirá cómo aplauden estos pelotudos”, lo que generó insultos por parte de los compañeros, “¡Andá a hacer asados a la Esma!”, y una aberrante chicana de Alegre: “El asado lo hacemos la semana que viene”. Luego, el premio Nobel de la Paz repudió esas palabras.
