Fueron 132 cuadras en las que quedó evidente la mentira del gobierno, cuando dice que la pobreza bajó en nuestro país. En Tribunales, dirigentes de la CCC y Barrios de Pie fueron recibidos por funcionarios de la Corte Suprema, ante quienes explicaron los fundamentos del recurso de amparo presentado.
Fueron 132 cuadras en las que quedó evidente la mentira del gobierno, cuando dice que la pobreza bajó en nuestro país. En Tribunales, dirigentes de la CCC y Barrios de Pie fueron recibidos por funcionarios de la Corte Suprema, ante quienes explicaron los fundamentos del recurso de amparo presentado.
Como explicaba Juan Carlos Alderete en el arranque de la marcha, “el gobierno no solo niega la pobreza, sino que se burla de nosotros. Hacia nuestras organizaciones, el gobierno aplica el castigo infinito, y nos amenaza que si seguimos en las calles reclamando nos van a sacar los programas sociales y las cooperativas. Cooperativas como Argentina Trabaja, en las que los compañeros ganan solamente 2.000 pesos, siendo trabajadores precarizados del Estado que hacen refacciones de escuelas, obras de cloacas, viviendas, etc. Reclamamos un aumento de emergencia para todos los planes sociales y jubilaciones, porque así no se puede vivir y el gobierno, encima, niega la inflación”.
Consultamos a Alderete acerca de los dichos de Víctor Hugo Morales del día anterior, sobre “lo lindo” de vivir en una villa. Juan Carlos dijo “es una barbaridad del operador número uno del gobierno. Lo que hay que exigir, tanto al gobierno nacional como al de la ciudad, es que urbanicen las villas y que pongan las redes de agua, gas y luz, como corresponde”.
Por su lado, el compañero Daniel Menéndez, de Barrios de Pie, nos decía: “El reclamo ante la Corte Suprema es que tome las medidas que estén a su alcance para instar al gobierno que aumente los presupuestos para los programas sociales atento al aumento de la pobreza, el deterioro en nuestros barrios, y el congelamiento de los planes. Hay una situación social muy grave y un gobierno que no da respuestas”.
A los compañeros que arrancaron desde Liniers se le fueron sumando miles más de toda la ciudad de Buenos Aires y el Conurbano, en Plaza Flores y en Once, desde donde la gran columna atravesó el centro porteño.
Entre los múltiples testimonios de una realidad dolorosa que desmiente permanentemente el relato oficial, la compañera Pelusa, de La Matanza, nos decía que “En los barrios lo que nos afecta más es la inseguridad, la desocupación, la salud, todo con lo que el gobierno hace la vista gorda. La pobreza habrá bajado en el barrio de Kicillof, porque lo que es en el nuestro cada día hay más pobres y chicos desnutridos. Tuvimos que abrir un comedor en nuestro barrio, porque los chicos no tienen para comer en su casa. Lo de la inseguridad está bravo. Nos llamaron a una reunión con el comisario, y quieren que nosotros le digamos quiénes son los transas. Si ellos saben bien quién vende droga, y dónde”.
Luego de que fueran atendidos por una secretaria de Cámara, Juan Carlos Alderete afirmó: “estamos finalizando una extraordinaria marcha para mostrar la realidad que padecemos como pueblo argentino hace mucho tiempo y por más que el gobierno intente taparla diciendo que la pobreza bajó, le decimos que la pobreza en nuestros barrios ha crecido en el último año”, en lo que coincidió Daniel Menéndez. Ambos dirigentes agradecieron el gran esfuerzo realizado por los miles de compañeras y compañeros y se comprometieron, “si no hay respuesta a los reclamos”, a discutir los próximos pasos del plan de lucha.