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03 de June de 2015

En “La Bici del Ángel”, centro cultural de la Asociación de Ex Presos Políticos de Córdoba, se lanzó el Ateneo con la charla “El Cordobazo, 
la vigencia de un camino”. Se explayaron durante un poco más de hora y media Roque Romero y Gerardo Luna, en un ameno y rico 
en anécdotas y análisis políticos donde el público salió enriquecido y entusiasmado. El audio de la charla en nuestro sitio web.

Córdoba: Se inauguró el Ateneo René Salamanca

Charla de Gerardo Luna y Roque Romero

En el inicio de la exposición, Gerardo Luna recordó a Gody Álvarez, Luis Márquez, Raúl Molina, Manuel “Quebracho” Guerra, María Eugenia Irazusta y nuestro querido René Salamanca, y en ellos a los miles de luchadores populares de secuestrados y asesinados por la dictadura. 

En el inicio de la exposición, Gerardo Luna recordó a Gody Álvarez, Luis Márquez, Raúl Molina, Manuel “Quebracho” Guerra, María Eugenia Irazusta y nuestro querido René Salamanca, y en ellos a los miles de luchadores populares de secuestrados y asesinados por la dictadura. 
“La idea de esta jornada es lograr una mayor vigencia de la memoria, de la historia, porque es mucho lo que se ha dicho y se ha escrito sobre aquellas jornadas del Cordobazo, nuestro aporte desde el punto de vista que participamos, sumándonos a la lucha popular como jóvenes que éramos desde lo que hoy llamamos el clasismo revolucionario” dijo el “Negro” Luna, integrante de la dirección del Smata Córdoba recuperado por los trabajadores en 1972 y ratificado en 1974. 
 
Necesidad de la verdadera historia
El Ateneo está siendo impulsado por la Comisión Permanente de Homenaje a René Salamanca y por la Corriente Hacer y Pensar para la Liberación, y surgió por la necesidad de un espacio para reivindicar y difundir la línea política sindical que protagonizaron René Salamanca, Gody Álvarez y los obreros del Smata Córdoba, en aquella gloriosa experiencia de recuperación de un sindicato para el clasismo. 
Esta experiencia ha sido sistemáticamente ninguneada y tergiversada por las clases dominantes de Córdoba, desde los claustros universitarios, los medios de comunicación, y su réplica en algunos dirigentes sindicales. Es por ello que se hace necesario un ámbito de discusión, amplio y democrático donde recuperar la historia de una manera activa y poder abordar los nuevos temas y problemas específicos de la clase obrera y del pueblo hoy. También está planteada la necesidad de tener un lugar de capacitación sindical.
 
“El Cordobazo nos marcó”
Entrando en el tema del Cordobazo, Gerardo Luna hizo un racconto histórico y político, ilustró la situación internacional de ese momento, el Mayo Francés, la Revolución Cubana “hablada en criollo” y el comandante Che Guevara, “nos llegaba por él cómo debía ser la revolución, la lucha antiimperialista, el hombre nuevo”. Sobre la Argentina, Luna desarrolló la caída de Illía, el comienzo de la dictadura de Onganía, las medidas reaccionarias de esa dictadura militar y los sectores civiles que acompañaron ese golpe de Estado. Sin dejar de nombrar las luchas obreras y populares de esa época fue haciendo una descripción del momento en que se crearon las condiciones para que se dé esa gran rebelión popular que pasó a la historia con el nombre de Cordobazo.
Roque Romero, quien fuera secretario adjunto de aquel Smata Córdoba y preso político de la dictadura, definió con detalle la situación política de ese momento, las diversas corrientes dentro del ejército y sus posiciones, la dictadura de Onganía, y cómo ese contexto fue escenario para que el Cordobazo se dé. Contó con detalles los días previos, fue muy interesante cómo relató el proceso de la asamblea de Córdoba Sport, la preparación en las fábricas, las discusiones previas.
“Desde el 66, el golpe de Onganía, hasta el 76 el golpe de las otras corrientes prorrusas de Videla-Viola, pasaron 10 años, diez años de una gran lucha del movimiento obrero, porque en todas las provincias hubo puebladas, hasta en Catamarca que siempre se olvidan de nombrarla, hubo un Catamarqueñazo, donde estos señores vinieron con esa prepotencia a imponer el miedo y decir “vamos a hacer la revolución” ¿viste que todas las dictaduras dicen revolución? Es decir revolución para atacar a los intereses de los pueblos, no hay ninguna dictadura que pueda ser más buena que la otra. Las dictaduras son cuando las clases dominantes no pueden seguir haciendo negocios con el gobierno de turno, entonces van a golpear los cuarteles para decir: hay que cambiar este orden político.
“La dictadura de Onganía se olvidó que en Córdoba, desde hacía 10 años venía en pleno auge de la industria, en cada fábrica había no menos de 10.000 obreros y, si a eso le sumamos el Área Material Córdoba, que era un centro industrial, había doce empresas juntas. Ahí representaba una gran cantidad de obreros, si a eso le sumamos, la IKARenault, la Fiat y la enorme cantidad de talleres que eran autopartes para esas grandes empresas…
“En el Smata, y sobre todo dentro de las fábricas querían aumentar la producción, y no había otro método para aumentar la producción que no sea poner más gente, tenían que ocupar más operarios, es decir cuanto más producción a su vez tenía que haber más puestos de trabajo, en contraposición de lo que fue todo el desarrollo tecnológico que eliminaba fuente de trabajo. Por eso algunos escribieron y dijeron “el movimiento obrero espontáneo del Cordobazo”: no fue tan espontáneo, si vos estás insultándolo al vecino todos los días, un día va a venir y te va a pegar una trompada. Es una acumulación de las ofensas, de los atropellos que iban haciendo las grandes empresas contra el movimiento obrero que después se expresa. Se expresa de una manera que ni los mismos compañeros que estaban en la calle decían “de dónde salió tanta gente”, porque éramos tantos, y eso era lo que sorprendió a los que escriben que eso fue espontáneo, en realidad parte del movimiento obrero estaba organizado. Y eso fue una gran enseñanza para los que veníamos mirando las luchas, veíamos lo que significaba esa explotación dentro de las fábricas, de compañeros que sufrían calor, ruidos, que a los 40 años eran enfermos, sufrían de sordera y de otras enfermedades. 
“Es decir que el que subía a un auto cero kilómetro estaba también impregnado de una gran cantidad de sacrificio, de vida de compañeros, los que trabajaban en prensa -cuando vos metés la chapa que es plana baja la prensa- y tenés que meter la mitad del cuerpo para sacarla, dos de acá, dos del otro lado y hubo accidentes, había que luchar para que te pongan un soporte como seguridad, accidentes que han ocurrido que han quedado compañeros aplastados por esas prensas. 
 “Eso para significarles que no todo era que los obreros eran “malos” que se resistían, porque siempre había subversión, que eran los zurdos, qué se yo… sin embargo los compañeros lucharon frente a empresas prepotentes, luchamos en la calle, sufrimos los cascotazos de la policía, pero lo que tenemos que valorar es que todas esas luchas tuvieron su resultante, nosotros decimos que el Cordobazo nos marcó y nos señaló como la expresión más alta de la lucha del movimiento obrero. En lo personal me abrió los ojos, me abrió realmente la perspectiva, es decir me inclinó para saber en qué lado debía estar; a eso había que sumarle todas las revoluciones, todas las luchas que se hacían a nivel internacional, ese era un gran empuje, una gran luz que nos iluminaba desde afuera. 
 “Con la contra que teníamos que toda la izquierda del país estaba bajo el ala de una Unión Soviética que todavía podía engañar y decirse socialista cuando en realidad era un imperialismo, nosotros lo definimos como el socialimperialismo. Fíjense que en ese tiempo la gran luz que nos iluminaba era la China, La China revolucionaria, la China comunista de Mao. Y Mao tuvo que hacer una gran lucha, la Revolución Cultural, que es la prueba que después de la revolución hay que seguir luchando por la revolución. Y bueno, ahora tenemos la China imperialista, que los amigos del gobierno de ahora hacen su negocio, como todo imperio, los negocios que hacen con los países que estamos en la perspectiva del desarrollo hacemos negocios con esos grandes porque dicen es un mercado grande, pero los negocios se hacen a beneficio de esos imperios, por eso cae tan bien el dicho que dice “ni amo nuevo ni amo viejo”, son amos, siempre son imperialismo…”
 
Las luchas y las elecciones
Estuvieron presentes los compañeros del Frente Progresista y Popular. Roberto Birri, candidato a gobernador, saludó brevemente felicitando por la puesta en marcha del Ateneo: “a seguir trabajando por las causas justas, nosotros también estamos en una pelea dura, que es sembrar mojón en este proceso electoral que si bien en desigualdad de condiciones económicas y de estructura; esto ayuda a construir con la militancia, desde distintas vertientes y distintas trincheras pero como decía en su momento René Salamanca la unidad en la acción es clave, la diversidad tiene que ser un desafío para nosotros tanto en la lucha sindical, la lucha clasista y las elecciones…” 
Carlos Altamirano, candidato a vicegobernador del Frente, agradeció por la posibilidad de escuchar a “dos historias vivientes” del Cordobazo. También estuvieron presentes Bitín Baronetto, compañeros de CTA, de UP, y del gremio Luz y Fuerza, que trajeron una adhesión que destaca la importancia para el campo popular de mantener viva la memoria y la trayectoria de René Salamanca y de la construcción del Ateneo. Nos hicieron llegar su adhesión también Casa de los trabajadores de Córdoba, la CCC de Mendoza. Llegaron saludos de la mesa nacional de la CCC, y Arnoldo Gómez trajo el saludo de Otto Vargas, secretario general del PCR.