El viernes 28 se realizó una nueva marcha en San Lorenzo, en la que Alicia y Alberto, padres de Paula, estuvieron acompañados por centenares de vecinos e integrantes de organizaciones populares. En estos años, como recuerda Germán Mangione en una nota para brújulacomunicacion.com, la investigación estuvo “viciada de destrucción de pruebas, ocultamiento y desidia por parte del juez y la fiscalía… En una causa tan polémica, con agentes de seguridad, políticos y empresarios involucrados”.
Esta última marcha repudió, en particular la resolución del juez de la causa de liberar a los ocho detenidos hasta el juicio, con fianzas que van de los 30 a los 100.000 pesos, que fueron abonadas a la mañana siguiente. De los 8 procesados, 5 son policías y dos de ellos jefes.
Acusan a la víctima
Ante la reacción del padre de Paula, de denunciar que “una vez más funcionó el teléfono político y la billetera”, el juez Prunoto Laborde le dijo al abogado de Alberto Perassi que lo querellará. Así la víctima es puesta en el papel de acusado. La bronca expresada el viernes en la marcha era mucha. La compañera Gabriela Echenique, amiga de la familia e integrante del PCR, nos decía: “Los ocho procesados fueron dejados en libertad aduciendo que no hay pruebas. Este es un momento procesal que no necesita pruebas. El fallo de la resolución habla solo de la postura de los defensores de los procesados y no toma en cuenta ni a la querella ni a los abogados de los familares. Lo que hacía falta tener ahí es una cuestión de garantías, que tiene que ver con la investigación, con que no se entorpezca como se hizo todos estos años, que tiene que ver con la seguridad de Alberto y la familia, que han sufrido atentados, que han sido perseguidos, y con la búsqueda del cuerpo de Paula, de lo que se está encargando el Equipo de Antropología Forense. La justicia ahora apunta contra la familia y contra Alberto, cuando tendría que estar enfocada en resolver el caso y encontrar el cuerpo. Luego de esta resolución de la semana pasada nació esta reacción para repudiarla. Alberto tiene que estar con chaleco antibala, con custodia policial y agentes federales en su casa, todo el tiempo con él y con los hijos de Paula. Como dice Alberto “los presos parecemos nosotros”. El lunes siguiente a la resolución de liberar a los procesados, hicimos una reunión con más de 50 organizaciones en la que hubo consenso para repudiar esto y llamar a esta marcha. Nosotros exigimos que se abra la causa en el fuero federal, porque la misma justicia provincial investiga a la policía provincial, con la que está vinculada. Además reclamamos un jury al primer fiscal y al primer juez de la causa que no hicieron nada, perdieron pruebas y entorpecieron la investigación. Reclamamos que se cree una causa en el fuero federal por desaparición forzada de personas con participación de fuerzas de seguridad, porque esta causa, además de cruzar toda la problemática de género tiene que ver con una flagrante violación a los derechos humanos. Que se tome como una causa de lesa humanidad, para que no prescriba y que nos garantice que se siga investigando hasta que aparezca Paula y hasta que los responsables los enjuicien y vayan presos”. Se encontraban presentes numerosas organizaciones de San Lorenzo y Rosario, como el ALDE, el PTP y la JCR, y los diputados electos Mercedes Meier y Carlos del Frade, del Frente Popular.
Convocan a marchar el 18 de septiembre
La marcha recorrió las calles de la ciudad, al grito de justicia. Frente a los Tribunales, Alberto Perassi dijo desde las escalinatas “justicia es lo que no encontré acá adentro, nos tuvieron más de tres años vendiéndonos espejitos de colores”, y tildó de “cagones” a los funcionarios. “¿Y mi hija dónde está?”, exclamó frente a los micrófonos y cámaras de los medios presentes.
Frente al edificio de la policía, la columna se detuvo, y el padre de Paula pasó la palabra a Carlos del Frade. Éste denunció, con papeles obtenidos en sectores judiciales, la trama de encubrimientos que hay en la causa. Acusó a los jueces de complicidad con los procesados, que tienen múltiples vínculos políticos, económicos, judiciales “y de esta cloaca podrida que es la Unidad Regional 17 de la policía de San Lorenzo”. Afirmó Del Frade que en estos papeles consta que un testigo dice que Paula muere por un aborto no consentido que le hacen quienes la secuestran (su amante), y que está probada la complicidad del intendente de Puerto General San Martín y los policías en la desaparición del cuerpo”.
Al finalizar la marcha, se leyó el documento acordado por las organizaciones convocantes, y Alberto Perassi agradeció la multitudinaria presencia, y convocó a una nueva marcha para el 18 de septiembre, día que se cumplen cuatro años de la desaparición de Paula.
