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18 de November de 2015

Luego de mucho tiempo de lucha, ATE La Pampa logró la incorporación de 1300 monotributistas a la planta permanente del Estado. Una parte de la dirección vota en blanco en el balotaje.

ATE La Pampa: más de 1.300 compañeros pasaron a planta

Entrevista a Ricardo Araujo, secretario general

 
—¿Cómo fue el recorrido de esta lucha por el pase a planta permanente?

 
—¿Cómo fue el recorrido de esta lucha por el pase a planta permanente?
—Hoy (13/11), la Mesa Interestatal y el gobierno, Acabamos de firmar un proyecto de ley para pase a planta de más de 1.350 compañeros precarizados en la provincia. Nosotros hace muchos años que venimos con esta lucha de pase a planta de los monotributistas, que según lo que tenemos contabilizado en toda la provincia, son unos tres mil. Lo que pudimos avanzar ahora es sobre el universo de unos 2.000 posibles. Estamos metiendo unos 1.350 con esta ley y otros 500 que pasan directamente a la carrera sanitaria, porque son contratados de esa carrera. Es un gran avance porque este gobierno se dedicó a precarizar. Tuvo una política de ajuste y precarización permanente pero, derrotado políticamente y en los últimos meses de su gestión, tuvo que pasar a planta porque la situación ya era de un conflicto permanente.
 
—Ustedes vienen haciendo paros y movilizaciones, alrededor de este reclamo…
—Nosotros hemos logrado unificar al conjunto de los gremios estatales, salvo los docentes que quedaron afuera por su postura a favor del gobierno, el resto de gremios nos nucleamos en la mesa de gremios estatales. Somos nueve gremios que hemos mantenido una base de unidad de acción, nos hemos podido sostener, y logramos la paritaria. A partir de esto último se empezó a avanzar en las cuestiones salariales y se pudo organizar la pelea de los precarizados peleando por el pase a planta. Ahora, ya sobre fin de año, se logró el pase a planta para estos trabajadores. Es una gran conquista porque los compañeros han dado la pelea y siguen estando, porque en el medio de la discusión con el gobierno acerca de los listados, el Ministerio de Salud no quiso colaborar. Entonces anteayer hubo una toma en el Ministerio de Salud de los propios compañeros precarizados. Todo eso terminó en este proyecto de ley con 1.350 compañeros adentro, pero la ley prevé que todos los que estén en esta condición de precarización,al igual que los que están pasando a planta, pueden tramitar el pase a planta después, queda abierta a que más compañeros puedan pasar. En nuestras listas quedan 250 trabajadores y creemos que la gran mayoría está en condiciones de pasar porque hay un sector que está precarizado pero que está cobrando con plata que viene de Nación, el resto puede pasar a planta. Creemos que esto se va a potenciar. 
 
—¿Estos compañeros son del sector Salud o de todas las reparticiones?
—De todas las reparticiones. Lo principal, porteros de escuelas que están diseminados en la provincia, donde fue  el principio de la precarización: el gobierno empezó a aplicar esa política de no ingresar trabajadores a la planta y poner en su reemplazo monotributistas, que les pagan de los municipios pero la municipalidad no se hace responsable, el Estado tampoco, cobraban un sueldo mínimo y les obligaban a trabajar la misma cantidad de horas que un trabajador de planta. Fuimos avanzando, logramos reducción horaria, algunas conquistas, provisión de ropa y ahora ya logramos el pase a planta, en una jornada reducida de cinco horas. Son 1.200 trabajadores de educación, el resto es de los otros ministerios. En salud también había una gran cantidad de trabajadores pero la gran mayoría, que son alrededor de 400,pasan directamente a la ley de carrera porque ya estaban contratados, de forma precaria pero en la ley de carrera. Los otros, una parte entró y otra, va a tener que entrar después, sobre la base de lo que dejamos previsto en la ley.
 
—¿Cuál es la diferencia salarial entre un trabajador precarizado y otro de planta?
—Un precarizado estaba en 5.580 pesos el mínimo, de ahí tenía que sacar el monotributo y los otros aportes, y el de planta está ganando un mínimo garantizado de 9.000 pesos. 
 
—¿Cómo ha sido el recorrido del gremio en la lucha de los estatales?
—Nosotros hemos dado una batalla contra un gobierno que se caracterizó por el desprecio a los trabajadores, por llevar adelante una política de ajuste y  eliminar los derechos laborales del empleado público. Lo pudimos derrotar primero con la conquista de la paritaria y luego tuvimos la gran batalla salarial que hemos venido dando en los últimos dos años con grandes movilizaciones. Este año habíamos logrado un incremento del 28%, en marzo, que lo consideramos insuficiente, no cerramos la paritaria y seguimos combatiendo hasta que logramos sobre ese porcentaje una serie de medidas más: el pase al básico de unas sumas que estaban en negro, el pase a básico de otra suma que estaba en gris, aumento en las asignaciones familiares y la discusión de un bono de fin de año. Con todo eso, logramos recomponer mediante el 28% pero insuficiente… pero nos llevó todo el año la pelea. 
 
—¿Cómo fueron las  elecciones de ATE?
—A principios del año pasado, desde la CTA Yasky se había anunciado que iban a preparar una lista para venir “por la recuperación de ATE”, lo anunciaron, con candidatos y todo. Pusieron como objetivo de esa lista “recuperar ATE para defender al gobierno”. Nosotros dijimos que íbamos a sostener ATE para defender a los trabajadores, a partir de entonces trabajamos en la confección de nuestra lista, un proyecto de unidad con la lista Verde-Anusate; nosotros pertenecemos a la Celeste y Blanca, una lista pampeana que a nivel nacional, está inserta en la Corriente Salamanquista dentro de ATE. Llegadas las elecciones la lista de Yasky no se pudo armar, no se pudo presentar, no alcanzó a completar los nombres, no pudieron concretar su aspiración. Nosotros hicimos unidad en dos seccionales con la lista Verde Anusate, que estaba conduciendo esas dos seccionales. Sacamos 1.450 votos. A nivel nacional, una cantidad similar. La lista de Yasky que enfrentó a la lista verde a nivel nacional, la verde y blanca, sacó 15 votos. Con lo cual demostró que no tenía la cantidad de gente necesaria para armar una lista de 45. Esa es la realidad que tienen esos muchachos. 
Nuestro mandato finalizaba el 6 de noviembre, a partir de esa fecha asumía la nueva conducción, que se renueva una parte de la comisión directiva. El tema es que como estábamos metidos en este otro conflicto del pase a planta de los trabajadores, no hemos tenido tiempo de hacer la asunción. La semana que viene estaremos haciendo la asunción formal. En los hechos, la comisión directiva nueva ya está trabajando. 
 
—¿Cómo ven desde el gremio el balotaje y qué perspectivas hay para la lucha?
—Nosotros hemos estado con ese debate, incluso íbamos a reunirnos en CTA para discutir una postura electoral, pero por los avatares de la lucha gremial no nos dieron los tiempos para hacer la reunión, está pendiente. Pero en el gremio parte de la conducción actual y de la anterior, ya definimos que no vamos a apoyar a ningún candidato en el balotaje, que íbamos a votar en blanco o no íbamos a votar. En principio esa era la postura que se impulsó, incluso el periodismo cuando nos pregunta por consultas gremiales también nos pregunta qué postura electoral tenemos. Yo ya fijé mi postura por el voto en blanco, diciendo que cualquiera que venga es la continuidad del ajuste que ya estaba en la Argentina.
Nosotros entendemos que lo que viene es un gobierno complejo y difícil, que va a continuar con el ajuste, que va a descargar sobre los trabajadores estatales, que va a ser uno de los problemas principales que va a recaer sobre los estatales la parte más difícil del ajuste. Porque siempre somos los primeros adonde se achica la cuestión salarial. Si bien no puede haber despidos, corríamos el riesgo de que todos estos compañeros, que estaban contratados y precarizados, se iban a quedar afuera, por eso la pelea de que pasen ahora a planta y no después del próximo gobierno. Porque si no, todos esos compañeros eran los candidatos a ser despedidos, todos sus contratos se vencían en diciembre y no había ninguna posibilidad de renovación con el próximo gobierno. Nos preparamos para una situación difícil, estamos viendo cómo dejamos posicionado al gremio para enfrentar lo que viene. Porque entendemos que va a haber a nivel nacional una política de juste y el gobierno provincial, por lógica y por política, también van a acompañar. Hemos estado dando batalla también por los compañeros jubilados. Nosotros tenemos el 82% móvil, es una conquista que no queremos ceder. El gobernador electo, cuando era candidato, había sugerido la posibilidad de armonizar la caja de la provincia y nosotros sabíamos que esa palabra armonizar era… con el 82%, donde la movilidad está atada a la decisión del Ejecutivo y no por la lucha de los trabajadores. Porque la movilidad nuestra es que el activo logra un 28% y el mismo monto pasa para los compañeros jubilados.