—¿Cómo es la participación de ustedes en el ENM?
—¿Cómo es la participación de ustedes en el ENM?
—Nosotras, como uruguayas y pertenecientes a la agrupación Célica Gómez y del Taller de Liberación de la Mujer vinimos a ver la experiencia argentina. Algunas compañeras ya habíamos venido en otras ocasiones, otras es la primera vez. A través de la coordinadora feminista vinieron dos ómnibus, cien mujeres que venimos a aprender de las compañeras argentinas que hace tantos años tienen el Encuentro para poder hacer en el Uruguay un Encuentro similar, a la medida de Uruguay donde somos 3 millones de habitantes. Veremos si para el año que viene empezamos con talleres, deliberaciones entre mujeres, y ver si podemos hacer un Encuentro Nacional de Mujeres en el Uruguay.
—Ustedes en Uruguay tienen una ley que despenaliza el aborto
—En Uruguay tenemos una ley que supuestamente despenaliza el aborto pero en los hechos es todo una farsa, una mentira. Como nos ha pasado en muchos otros temas con el gobierno progresista, no hay una despenalización real, no están garantizadas las series de cuestiones para que se haga un aborto. Justamente ahora, hay tres mujeres procesadas por hacerse un aborto, por fuera de esa ley.
—El primer proyecto fue impulsado por el movimiento de mujeres, ley que el presidente Tabaré Vazquez vetó y sacó, años después, como decía la compañera, esa ley mentirosa que restringe a la mujer e influye en su decisión. Por un lado, la mujer está sometida a un tribunal donde juzgan y le ofrecen determinadas cosas que después en los hechos, cuando tiene a sus hijos, no las tiene. Después, la cosa más grave es la objeción de conciencia de los médicos. La ley dice que en cualquier parte del procedimiento el médico puede objetar no hacer el aborto entonces la mujer tiene que ir corriendo a buscar en otro hospital para poder hacérselo. Entonces, con esta ley, el aborto no estaría despenalizado porque sigue vigente en el código penal.
El primer proyecto impulsado por mujeres sí hablaba de la despenalización. Pero con esta ley que hizo el gobierno, sin consulta previa al movimiento femenino, no está despenalizado.
—Sólo se autoriza el aborto en determinado plazo. Si vos estás fuera de ese plazo sos criminalizada, procesada. Que es lo que les pasó a estas tres mujeres en Maldonado. El tema es, como decía la compañera, si vos estás sometida a una suerte de tribunal, donde la mujer tiene que pasar por un psicólogo, una asistente social, eso va haciendo que se demoren los plazos. Además, la salud es ineficiente. Entonces, una mujer que capaz estaba en el plazo para abortar termina estando fuera de plazo y por eso puede ser procesada y penalizada. Por eso, nuestra consigna es: anticoncepción para no abortar y aborto legal para no morir.
—¿Cómo es la organización de las mujeres en Uruguay?
—Nosotras somos de la agrupación Célica Gómez denunciamos que en materia de violencia, el responsable es el gobierno. En Uruguay somos parte de una coordinadora feminista, que fue la encargada de las últimas alertas que hubo por el asesinato de 16 mujeres en lo que va de este año. Para el Uruguay eso es mucho. Esto es bajo lo que ha sido el gobierno progresista. Entonces, vemos que no hay soluciones reales. Todo lo que se dice de que hay soluciones y de que implican plata son para algunas cosas pero no para los casos de femicidios. Entonces, las denuncias quedan en la nada. En estos 16 casos, las mujeres habían denunciado.