Estuvimos conversando con una empleada despedida de Aerolíneas Argentinas y nos contaba que “en abril del 2016 despidieron a siete tripulantes de cabina de pasajeros en la empresa, y esto se suma a más despidos en el último año”. Nos relataba que “existe una política de vaciamiento de la empresa similar a la llevada adelante en el 2001. Ofrecieron jubilaciones anticipadas y a los que teníamos parte médico prolongado nos fueron estirando los tiempos hasta que se cumpliera el máximo de dos años para volver a nuestras tareas habituales, lo que se llama reserva del puesto de trabajo. Fuimos perdiendo los usos y costumbres: nos descuentan los días por parte médico por familiar enfermo, no tenemos reubicación por parte médico prolongado. También tercerizaron seguimiento médico. Se firmaron actas acuerdo para flexibilizar el tiempo de vuelo de los tripulantes.
“Algunos aun teniendo el alta de los médicos, e incluso del Instituto Nacional de Medicina Aeronáutica y Espacial (INMAE) y la Administración Nacional de Aviación Civil Argentina (ANAC) la empresa les negó su vuelta al puesto de trabajo”.
Y termina diciendo nuestra entrevistada que “con los cambios en el terreno judicial que se están impulsando para pasar del fuero del trabajo de la justicia nacional al fuero penal, los trabajadores seríamos muy perjudicados”.
