Pergamino
Pergamino
Pergamino fue el distrito más afectado, con miles de hectáreas y cerca del 40% de la ciudad anegada y centenares de evacuados. La Mesa Social de Pergamino reclamó que se declare la emergencia social, hídrica y de salud. Que se tomen las medidas de emergencia para la atención inmediata de los evacuados “para subsidiar las pérdidas ocasionadas por la inundación y disponer los recursos necesarios para llevar adelante las obras largamente estudiadas para no padecer estos perjuicios en nuestra comunidad y la zona generando pérdidas económicas, productivas, laborales, sanitarias educativas y de todo orden”. Además, repudiaron la represión a los vecinos que reclamaban atención.
El documento fue entregado a la Municipalidad el 28 de diciembre, y está firmado por los dirigentes de la CTA Autónoma, el Frente Popular, Libres del Sur, CTEP y Movimiento Evita.
Cuando el documento se refiere a “obras largamente esperadas” está hablando de las promesas incumplidas tras la inundación de 1995, cuando se anunció una serie de obras para evitar las inundaciones, de las que en veinte años sólo se ejecutó el 15 por ciento.
Un compañero de Pergamino así describía la situación en el momento que las aguas arrasaban con las casas de familias trabajadoras: “El municipio de Pergamino estuvo no sólo ausente sino también negligente a la hora de comunicarse con la población; en mi caso por el trauma de 1995 del que fui víctima cuando mi viejo aún vivía, pude levantar casi un 80 por ciento de lo tangible. Muchos vecinos de diversos barrios –con los que pude conversar– no levantaron ni pudieron salvar nada y no fue el clima, el municipio no aprovechó los recursos comunicacionales para alertar a la población y eso aniquiló las posibilidades de rescatar los bienes.
“Hace un rato volví de llevar un catre a un amigo que todavía no pudo limpiar y teme los saqueos. Es tristísimo ver todas las veredas llenas de muebles y electrodomésticos como así también a gente más pobre buscando algo que todavía sirva entre ellos. Una sola obra hace falta en Pergamino, se llama presa reguladora seca; dicha obra abarca y soluciona el sector comprendido en la cuenta del río Arrecifes. No podemos exigir menos que eso, basta de versos” decía este vecino, quien además resaltaba la solidaridad de organizaciones populares, y culminaba “todos vivitos, coleando y luchando”.
San Nicolás bajo el agua
El 3 de enero volvió a desatarse una lluvia torrencial y San Nicolás quedó inundada. Los lugares de siempre, como la noche del 25 de diciembre: Colombini, Las Mellizas, La Emilia, San Francisco; y ahora muchos más. Todos sabemos cuáles son. Incluidos los millonarios viaductos recién inaugurados.
¿Dónde está el doctor Ismael Passaglia? ¿De vacaciones en Punta del Este, Nueva York, Miami donde tiene casas? ¿En un casco de estancia de algún campo de su propiedad? Lo que es seguro es que no está en San Nicolás. Ni él ni su hijo. Dejó a un subordinado ocupando el sillón.
Gendarmería Nacional, Defensa Civil, la gobernadora Vidal y el presidente Macri, todos ausentes sin aviso. Nunca estuvimos tan desprotegidos como ahora.
Los vecinos de Las Mellizas y los de Villa Riccio, se plantaron: cortaron la ruta y lograron algunos compromisos para salir del paso. Son un ejemplo. Lo único que conmueve a estos gobernantes es la movilización popular.
Barrios, organizaciones sociales, gremiales, vecinos en general, con banderas argentinas y de los barrios, deberíamos fijar fecha para marchar en repudio a la actitud del gobierno municipal, provincial y nacional; exigiendo soluciones de fondo para el abandonado San Nicolás. Urgente respuesta al drama social de las inundaciones, la salud, el trabajo, la vivienda y el hambre que castiga a gran parte de nuestro pueblo.