El 28 de diciembre, el reagrupamiento de los gremios estatales que nuclea a la Intersindical de Trabajadores Estatales (ITE), el Frente de Gremios Estatales (FGE) y la Multisectorial, junto a otros sectores populares como la CCC y la CTEP, realizaron una imponente marcha.
El 28 de diciembre, el reagrupamiento de los gremios estatales que nuclea a la Intersindical de Trabajadores Estatales (ITE), el Frente de Gremios Estatales (FGE) y la Multisectorial, junto a otros sectores populares como la CCC y la CTEP, realizaron una imponente marcha.
Más de 4.000 personas salieron a la calle para decir basta al ajuste que implementa el gobernador Gerardo Morales en la provincia y que se materializa en el cierre de paritarias, descuento de días de huelga y la entrega de un bono miserable de $1.500, $1.000 y $500 según la escala salarial (reduciendo notablemente el bono del año pasado que fue de $4.000).
Los trabajadores y demás sectores populares volvieron a las puertas de la Casa de Gobierno en busca de respuestas y principalmente de soluciones a la crítica situación que les toca atravesar con magros salarios, por debajo de la línea de pobreza, con la exigencia de los siguientes puntos reivindicativos: $5.320 de compensación salarial (bono), devolución de días de huelga, paritarias ya y cumplimiento de las actas 2013 y 2014, desprecarización y pase a planta permanente.
El gobierno y los medios comprados, pauta mediante, lanzaron una fuerte campaña para desmovilizar a los trabajadores mediante transcendidos de incidentes y disturbios, pretendiendo distorsionar el sentido y los motivos de la movilización. A pesar de ello, los trabajadores y los movimientos sociales no entraron en la trampa del gobierno y salieron a la calle a defender sus derechos.
Morales y su política de ajuste pretende disciplinar a los trabajadores con el descuento de los días de huelga, a través de la aplicación del código contravencional, aprobado por el FPV y puesto en marcha por el gobierno actual. Reprime a los vendedores ambulantes, ha lanzado un plan para desarmar a las organizaciones sociales y sigue con su política de protección y beneficio a Ledesma. Los trabajadores y demás sectores populares, van haciendo su experiencia y trazando un camino, el de la lucha popular.
Este fin de año, nos encontró unidos en la calle, trazando el rumbo de lo que se avizora como un 2017 combativo contra las políticas de ajuste y represión de Morales y Macri.