En un primer análisis de los números podemos decir que una característica muy importante fue la gran abstención del electorado. Votó un 56 % del padrón, cuando habitualmente lo hace de un 75 a un 80%. Es decir que entre un 20 a 25 % se expresó no yendo a votar.
En un primer análisis de los números podemos decir que una característica muy importante fue la gran abstención del electorado. Votó un 56 % del padrón, cuando habitualmente lo hace de un 75 a un 80%. Es decir que entre un 20 a 25 % se expresó no yendo a votar.
Un 16 % votó a distintas variantes opositoras a los gobiernos nacional y provincial y el voto en Blanco superó el 3 %. Estas formas de disgusto, suman un 33 % del electorado que habitualmente se expresa en las urnas. Muchos buscan una explicación de la situación actual, no quieren volver al pasado, esto no les gusta y está en discusión cúal es la salida a la crisis para que no la pague el pueblo.
El Frente del PJ disminuyó 110 mil votos respecto de las elecciones a diputados provinciales del 2015, el Frente de la UCR disminuyó 103 mil y el PO disminuyó 600.
En Departamentos importantes del interior con gran cantidad de población rural como el de San Martín, sacamos el 4,77 %, en el Güemes, el 2,47 % y en localidades como Sauzalito, el 10 %. Fue menos que lo esperado en el Departamento Capital.
A pesar de que las fuerzas que integramos el Frente, tenemos largos años en la política, es nuevo como expresión provincial. Deberemos profundizar el trabajo y difusión del Programa que defiende las Economías Regionales, el Federalismo, las Pymes, el Trabajo y el Salario, una agricultura con agricultores, el Mercado Interno y una Patria Soberana, ante la política nacional que abre las importaciones, estimula los agro negocios sojeros, mineros y petroleros en beneficio de los intereses extranjeros y sus socios locales. La grave situación requiere de fuerzas capaces de convocar a un amplio frente multisectorial que defienda los intereses comunes, ante un gobierno provincial conciliador que no se planta ante la quita de obras, la postergación de otras y la extorsión con los fondos nacionales. Hacen falta diputados que defiendan estas banderas y sean la voz en las Cámaras de tanto sufrimiento y preocupación que crece.
Queda poco tiempo y un arduo trabajo para hacer hacia las elecciones del 23 de julio próximo.
