Los judiciales del gremio AJB no aceptaron la oferta planteada por la administración de María Eugenia Vidal, del 20 por ciento anual, en tres tramos. Pablo Abramovich, secretario general de la AJB, planteó en el acto que en la reunión paritaria del día anterior: “El gobierno dijo que tenía una propuesta superadora y que en vez del 18%, nos ofrecían el 20. Fue un engaño porque cuando hicimos las cuentas nos dimos cuenta que era menos dinero en los bolsillos de los compañeros y las compañeras.
“El gobierno provincial no tiene intención de resolver el conflicto sino que tiene la decisión política de profundizarlo –remarcó Abramovich–. Por eso decimos que hay un cambio de estrategia en la patronal, que quiere disciplinar a las organizaciones gremiales para que aceptemos todas las imposiciones de Vidal para deteriorar nuestras condiciones de trabajo, destruir el salario y nuestras herramientas de seguridad social”.
“Por eso la discusión paritaria es la punta del iceberg, lo que se viene son reformas de fondo. Quieren atacar y destruir nuestra obra social y atomizar nuestra caja jubilatoria. Y todo eso es posible con organizaciones gremiales destruidas y deslegitimadas. Contra esta estrategia debemos organizarnos y luchar juntos todos los estatales”, afirmó Abramovich.
De la movilización, además de los principales dirigentes de los gremios convocantes, se encontraban los representantes de los Suteba nucleados en la Multicolor, y ATE provincia de Buenos Aires, representados por Oscar De Isasi.
Docentes
La secretaria general electa del Suteba Quilmes, Débora Procaccini, nos decía durante la movilización: “Estamos en la calle porque la reunión paritaria, con la última oferta, fue vergonzosa. Solamente nos aumentan 90 pesos por sobre la oferta anterior, con sumas en negro. Sin precisiones de adónde va la plata, con presentismo institucionalizado. Dejando de lado todo lo que tiene que ver con el salario básico que es tan importante en la carrera docente.
“Decidimos salir y marchar, y el Frente de Gremios Estatales lanzó un paro. Era necesario un paro rápido, pero tenemos que volver a las escuelas a hablar con los compañeros para ver qué cosas quieren hacer ellos, qué están dispuestos a hacer, y que el plan de lucha surja de las escuelas votado por los compañeros. No que salga de las cúpulas sindicales ni de las agrupaciones. Estamos volviendo a consultar a las escuelas, para ver cómo seguimos esta lucha y exigiendo un plan de lucha serio, responsable y que sea definido por los docentes en las escuelas, contra el feroz ajuste que está llevando adelante la gobernadora Vidal y Mauricio Macri. En particular, es muy importante que hayamos coincidido con el resto de los estatales de la provincia de Buenos Aires, que es algo que los docentes venimos pidiendo a nuestras dirigencias hace mucho tiempo. Esta es una gran oportunidad para estar todos juntos en la calle así que entendemos que éste es el camino, y que es la única manera de enfrentar el ajuste”.
Luego Débora refería que los descuentos aplicados por el gobierno bonaerense a los salarios docentes “Fueron terribles, entre cuatro mil y seis mil pesos. Es de imaginarse la bronca de las compañeras, que son la mayoría en el gremio, y que son sostén de familia. Los compañeros entienden esto como una nueva provocación. El paro en el distrito de Quilmes fue muy alto, estamos hablando de un 85%. Lo que significa que los compañeros en unidad con el resto de los trabajadores están dispuestos a pelear. Y eso es lo que tenemos que buscar. La mayor unidad posible para derrotar este ajuste terrible que nos está llevando al hambre a los docentes, a los pibes, y a toda la comunidad educativa”.
Finalmente, la nueva secretaria del Suteba Quilmes opinó, sobre el estado de las escuelas que están “en un estado deplorable. La semana pasada hubo una explosión de problemas de infraestructura, como problemas con el agua, con la luz, falta de mobiliario. La situación en los comedores escolares con la comida es cada vez peor, de menor calidad y más pequeña. Porque recortan los cupos de comedor. Y el hambre crece. Nosotros lo vemos en los barrios, que las copas de leche crecen, están llenas de pibes, están que rebalsan y cada vez le podemos dar de comer menos a los pibes en las escuelas”, afirmó Procaccini.
Trabajadores de la salud
Frente a la Casa de la Provincia, Pablo Maciel, médico del Hospital San Martín de La Plata y secretario de Salud Laboral de CICOP, decía a nuestro semanario: “Cicop viene en un plan de lucha desde el mes de enero, llevamos 22 días de paro en los hospitales y centros de salud de la provincia de Buenos Aires. Es un paso muy importante en la unidad con los demás sectores, para enfrentar el ajuste y este tope salarial del 18 por ciento que nos intenta imponer Vidal, junto con UPCN y otros gremios que han firmado ese acuerdo. Hoy nos hemos movilizado con ATE, Judiciales, y Suteba que también ayer rechazó la propuesta. Así que se abre una nueva etapa en la lucha salarial en la provincia de Buenos Aires. La situación en la salud es muy difícil. Tiene que ver con lo salarial y con las condiciones de trabajo, con los graves problemas que tenemos para llenar los planteles de las guardias en los hospitales. Tenemos una fuga de profesionales que se ha acelerado en el transcurso del año por las condiciones de trabajo, y con un nivel de precarización laboral alarmante. Con 1.500 profesionales, becados, sin obra social, sin aportes jubilatorios, es fundamental dentro del plan de lucha de Cicop el pase a planta de los 1.500 profesionales”.
Con respecto a la propaganda oficial de que este gobierno “está haciendo lo que hay que hacer”, nos decía Maciel que “es todo lo contrario. Justamente el gobierno no hace lo que hay que hacer, que es poder suministrar a los hospitales el presupuesto necesario para infraestructura, insumos y recursos humanos. Y poder garantizar el derecho a la salud, que es un derecho de todos los bonaerenses. Está haciendo todo lo contrario, profundizando el desfinanciamiento, el abandono de la salud pública, y avanzando con el plan de privatización de la salud pública con la Cobertura Universal de Salud, que básicamente es una transferencia de fondos monumental del sistema público al sector privado que da una especie de carné para pobres a la gente que no tiene obra social para que se pueda atender también en los sanatorios privados, con lo cual le van a transferir un montón de fondos del Estado al complejo médico empresario de la salud privada”.
Finalmente, Pablo afirmó que “La perspectiva es ir a una nueva jornada la semana que viene. Probablemente sea el miércoles 21, nosotros desde Cicop estamos planteando la necesidad de confluir todos los gremios estatales en un plan de lucha unificado, desde nuestra CTA autónoma, y con los demás sectores para volver a llenar la plaza San Martin como lo hicimos a principios de año con miles de estatales”.