La joven palestina Ahed Tamimi, de 17 años, se ha convertido en un recordatorio de los cientos de menores palestinos que están en cárceles israelíes después de que un juez militar decidiera mantenerla en prisión durante todo el proceso judicial. Dicho juez dijo en el tribunal militar de Ofer, en territorio ocupado de Cisjordania: “Las pruebas contra ella son sólidas”, y sostuvo que la menor es “peligrosa” y autora de un “delito ideológico”.
La Oficina de Ramala del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (Acnudh) expresó “una profunda preocupación” al respecto. “La Convención de los Derechos del niño es clara (…) la privación de libertad de los niños solo se utilizará como último recurso y durante el período más breve que proceda”, declaró el director de la oficina, James Heenan.
Ahed fue detenida el 19 de diciembre en una redada a las tres de la madrugada en su casa de Nabi Saleh, en el territorio ocupado de Cisjordania, cuatro días después de que se difundiera un vídeo en el que empuja y golpea a dos soldados israelíes en el patio de su vivienda. Al día siguiente, tras una amplia repercusión del vídeo, también fue arrestada su prima Nour, que quedó en libertad bajo fianza, y su madre Basem, que será juzgada el 6 de febrero acusada de “terrorista”.
La organización Defensa de los Niños Internacional (DCI, por sus siglas en inglés) en Palestina considera que “el caso de Ahed no es una excepción”, pero ha servido para recordar el problema de los menores palestinos detenidos por Israel. Esta organización explicó que, el pasado año, más de 500 fueron arrestados y juzgados, y que el 45,3% de los arrestos se hizo durante la noche” y a un 77% de ellos se les vendó los ojos. “En el interrogatorio el maltrato continúa. Algunos son aterrados hasta que se consigue información”, explicó DCI y añadió que de acuerdo a la ley militar los niños pueden ser juzgados a partir de los 12 años, los 14 en Jerusalén, aunque pueden estar retenidos desde los 12 años en centros de rehabilitación y luego cumplir condena en prisión.
El padre de la menor aseguró que esperaba el resultado y que preveía que la mantendrían encerrada porque la están utilizando como ejemplo del “castigo para que otros niños palestinos no sigan sus pasos”. El Ejército afirmó que la adolescente está acusada de doce cargos, entre ellos, de atacar a las fuerzas de seguridad en cinco ocasiones, arrojar piedras, participar en manifestaciones violentas, amenazas e incitación. Su madre, que se enfrenta a cinco cargos, también está acusada de atacar a oficiales y soldados israelíes, de participar en manifestaciones con su hija e incitar a otros a cometer “ataques terroristas” a través de Facebook, sostuvo en un comunicado militar. El ministro de Defensa israelí, Avigdor Lieberman, apoyó la decisión del tribunal militar y calificó a Ahed de “terrorista”: “Nuestro mensaje es claro, Israel no permitirá daños a los soldados del Ejército”, dijo en su cuenta de Twitter.