Frente a la pregunta sobre el impacto de un dólar a 38 pesos en la provincia, el compañero Aramayo respondía: “Como en todo el país el impacto principal cae sobre los precios en los supermercados, almacenes, panaderías, carnicerías y en general en todos los rubros de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y en la Canasta Total, donde un rubro como los artículos de sanidad para el hogar, como los jabones de tocador y para lavar ropa, dentífricos, papel higiénico, etc. Ya se verifican alzas de precios importantes, esto disminuye la capacidad adquisitiva de los salarios, jubilaciones o asignaciones por hijo y para todos los sectores que tienen ingresos fijos.
“Pero desde el punto de vista de los intereses de quienes toman desde el gobierno nacional la decisión de permitir devaluaciones importantes el objetivo principal es bajar abruptamente el nivel de los salarios medidos en dólares. Según datos oficiales del Ministerio de Trabajo de la Nación el salario promedio de los asalariados en el país era de $18.000; con un dólar a $28, como estaba a inicios del mes de agosto, equivalía a 643 dólares, tanto del sector privado como del sector público, hoy con el dólar a $38 el salario promedio estaría en 474 dólares, esto significa una caída del 36%.
“En esto consiste la esencia de la política económica del gobierno de Macri, que ha sido un objetivo permanente de las clases dominantes de la Argentina, con lo que pretenden demostrar al capital monopólico e imperialista del mundo que van camino de llevar a los salarios en la Argentina medidos en dólares al nivel mínimo posible, de manera tal que garantice con ello una elevada tasa de plusvalía o de ganancias. Hay que tener en cuenta que con el nivel actual, de 474 dólares, estamos a la par de Perú, Ecuador, Colombia, por detrás de Brasil y muy poco por arriba de Bolivia. Otro dato es que en Estados Unidos de Norteamérica en el sector industrial un obrero que está en blanco gana en promedio 40 dólares la hora y si trabaja 8 horas por día y 20 días al mes su salario promedio mensual es de 6.400 dólares.
Una inflación desbocada
En otra parte de la entrevista, Aramayo afirma que “El proceso inflacionario se desbocó a partir de mayo, a la par de la devaluación del peso; en julio se llegó al 4,1%, en agosto llegamos al 4,5% y en septiembre puede ser del 5%, una barbaridad, se trata de lo que denominamos técnicamente una inflación galopante en la economía política científica”.
Y sobre el impacto del recorte del presupuesto 2019 en Jujuy, el licenciado en Economía aseguró que “Impactará en los ingresos por la eliminación del Fondo Solidario de la Soja… Al mismo tiempo trascendió que el ajuste de Presupuesto previsto para el 2019, en varias partidas de distribución de coparticipación federal de impuestos, el ajuste puede ser de aproximadamente $3.500 millones; sumados es casi un 10% del presupuesto correspondiente al año 2018 y tal vez aún mayor”.
Finalmente, El Tribuno le preguntó “¿Hasta cuándo cree que durará la crisis?”, a lo que Aramayo contestó: “La crisis y el ajuste continuará hasta que el gobierno nacional pueda mostrar al Fondo Monetario Internacional (FMI) que está cumpliendo con los deberes que firmó para llegar al equilibrio fiscal y seguir bajando los salarios reales, o sea que la Argentina no tenga déficit fiscal, a costa de la baja en los salarios, las jubilaciones y pensiones de los empleados públicos y de los gastos provinciales, también a costa del estancamiento y caída de la producción nacional, tanto del centro como particularmente en las economías regionales. En política hasta que el pueblo diga basta y logremos una salida democrática que imponga otra política y otro gobierno”.
Hoy N° 1735 19/09/2018
