Con el femicidio de Agustina, ya son 7 las mujeres asesinadas en Argentina en los primeros 15 días del 2019. Estamos hartas, llenas de bronca y de dolor. Porque detrás de los números, de las estadísticas, hay historias, están las vidas de esas mujeres que son nuestras vidas también, y están los responsables materiales y políticos de sus muertes.
No queremos contar más muertas, no podemos esperar: estamos en emergencia.
Y mientras que las coberturas mediáticas machistas ponen el foco en las pibas que salen a bailar y que caminan solas a la vera de la ruta, nosotras, las mujeres, las pibas, las que ganamos las calles, las que ya no nos callamos, ponemos el acento en la necesidad de políticas públicas efectivas y con presupuesto destinadas a erradicar la violencia que sufrimos a diario. Nosotras, que con nuestra lucha pusimos nuestros problemas en agenda, exigimos que nuestras banderas se traduzcan en derechos y que esos derechos se vuelvan nuestra realidad, porque nos merecemos otra vida, una sin violencia y en libertad.
Sabemos que la lucha por la erradicación de todo tipo de violencia es una lucha larga, porque las raíces culturales y sociales que la sostienen y reproducen son muy profundas, pero sabemos también que estamos dando pasos firmes y que avanzamos enormemente en ese sentido. Es por eso que exigimos a los gobiernos municipales y provinciales, al gobierno nacional que se pongan a la altura para dar las respuestas que necesitamos de manera urgente. Porque mientras que las mujeres desbordamos las calles exigiendo derechos y justicia a lo largo y ancho de nuestro país, el gobierno nacional recorta en un 38% el presupuso asignado para la aplicación del Plan Nacional de Acción para la prevención, sanción y erradicación de la violencia contra las mujeres. Es una vergüenza inaceptable que el presupuesto para este año otorgado al Instituto Nacional de las Mujeres solo represente $11 por mujer para dar batalla a este flagelo que se cobró la vida de más de 900 mujeres en el gobierno de Cambiemos, según datos del observatorio “Ahora que sí nos ven”.
Hermanadas, como nos construimos y aprendimos, supimos, sabemos transformar el profundo dolor que nos causa cada femicidio, en lucha. En lucha por una sociedad en la que las pibas como Agustina puedan salir a divertirse sin ser asesinadas, por una sociedad en la que las pibas como Daiana no tengan que caminar cuadras y cuadras en medio del barro, de la nada, de la desidia, para llegar a su casa porque los bondis no entran a los barrios. Por una sociedad donde la educación sea prioridad.
Es necesario, es justo, es urgente, por Agustina y por todas, que redoblemos nuestra lucha por la declaración de la emergencia en violencia contra las mujeres en los municipios, en las provincias y a nivel nacional. Porque estamos en emergencia, y los gobiernos deben destinar el presupuesto necesario para poner, de forma inmediata, en funcionamiento políticas públicas y dispositivos destinados a prevenir, acompañar y atender las diferentes situaciones de violencia que vivimos las mujeres, poniendo el centro en la prevención y en la educación.
- 1 de enero (Santiago del Estero) Celeste Castillo, 25 años, fue asesinada por su esposo, el policía Héctor Montenegro.
- 4 de enero (Sáenz Peña, Chaco) Valeria Juárez de 32 años fue asesinada por su padre Elías Juárez.
- 7 de enero (Córdoba, Barrio La Floresta Sur) Daiana Moyano, 24 años, fue abusada sexualmente, golpeada y estrangulada por Alejandro Coronel.
- 7 de enero (Pcia Bs As, Almirante Brown) Joselyn Nayla Mamaní, 10 años, fue asesinada de 32 puñaladas en su casa.
- 8 de enero (Pcia Bs As, Mar del Plata) Gisel Varela, 33 años, fue baleada en la calle por su ex pareja Sergio Alejandro Cejas. Gisel había denunciado a Cejas en varias oportunidades y tenía restricción de acercamiento.
- 9 de enero (San Juan) Liliana Loyola, 64 años, su hijo Juan Echegaray la prendió fuego en noviembre. No puedo resistir las heridas.
- 13 de enero (Santa Fe) Agustina Imvinkelried, 17 años, fue violentamente golpeada, asfixiada y finalmente semienterrada cuando todavía estaba con vida por Pablo Trionfini.
Por todas ellas, por nosotras:
¡Exigimos la inmediata declaración de la Emergencia en violencia contra las Mujeres en cada municipio, en cada provincia y a nivel nacional!
Vivas nos queremos
Corresponsal