El 21 se fue a la Embajada de Turquía en nuestro país, llevando una nota firmada por numerosas organizaciones de derechos humanos, sindicales, políticas y culturales, encabezadas por Nora Cortiñas, Mirta Baraballe y Adolfo Pérez Esquivel. Se eligió el horario de las 14 para poder entregar la nota dentro del horario de atención de la Embajada. A diferencia de otras oportunidades, estaba cerrada y rodeada de un operativo policial que, además, filmaba a los participantes. Esto demuestra, en pequeña escala, la fascistización del gobierno de Erdogain.
Öcalan está alojado en la prisión de la isla de Imrali, en el Mar de Mármara. Desde el 27 de julio de 2011 a Öcalan se le negaron visitas y pasó a una situación de aislamiento, interrumpido durante un período en que se abrieron negociaciones de paz, y ahora vuelto a imponérselo. El Comité para la Prevención de la Tortura del Consejo de Europa expresó su preocupación en su Informe de marzo de 2018 .
Erdogain encabeza una represión fascista
Por otra parte, después del nunca aclarado intento de golpe de estado de julio del 2016 en Turquía, que fuera repudiado por todas las fuerzas políticas del país, el fascista Erdogain desató una oleada represiva contra miles de supuestos adherentes al golpe, y muy especialmente contra las fuerzas de izquierda, incluyendo a diputados por el HDP (Partido Democrático de los Pueblos), frente que agrupa numerosos partidos, organizaciones de derechos humanos, sociales, etc., y otras fuerzas de izquierda, como el Partido Comunista M-L de Turquía y Kurdistán.
Desde el 2018, sobre la base del “estado de excepción”, miles de miembros del HDP, incluyendo muchos parlamentarios electos, fueron encarcelados. Según un informe publicado por el HDP en diciembre de 2018, catorce de sus exdiputados (a quién se retiró la inmunidad parlamentaria en 2016), se encuentran detenidos, y otros doce han sido condenados a prisión sin ninguna orden de arresto. También cincuenta exalcaldes. En noviembre de 2018, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos condenó a Turquía en un fallo relativo a la prisión preventiva del expresidente del HDP, Selahattin Demirtas.
También están siendo detenidos investigadores, periodistas (más de 165 según Reporteros sin Fronteras), estudiantes, artistas, opositores políticos y miembros de la sociedad civil, arrestados durante las redadas que tuvieron lugar tras el intento de golpe de Estado del 15 de julio de 2016. Fueron prohibidas las Marchas de las Madres de los sábados (equivalentes a nuestras Madres de Plaza de Mayo).
Presos políticos en huelga de hambre
Leyla Güven, política kurda y diputada del Partido Democrático de los Pueblos (HDP), inició una huelga de hambre el 8 de noviembre de 2018. Había sido encarcelada en Diyarbakir desde el 22 de enero de 2018 por sus afirmaciones contra la intervención militar turca en Afrin, en las regiones turcas del norte de Siria. En libertad condicional desde el 25 de enero de 2019, Leyla Güven continuó la huelga de hambre, y lleva más de 100 días. Centenares de presos políticos, no sólo del PKK, sino también de otras fuerzas como el Partido M-L de Turquía y Kurdistán, se unieron a la huelga, algunos de ellos desde hace más de sesenta días. También políticos, hombres y mujeres en libertad se han unido a la protesta, como un grupo en Estrasburgo, sede del parlamento europeo. Leyla simboliza, además, el proceso y la participación de la mujer tanto en la actividad política como militar.
Sostienen que esta huelga no es un sacrificio ni una acción individual, sino una forma de protesta política colectiva. Esta es una huelga de hambre ilimitada e ininterrumpida. Sin embargo, no se trata de una huelga de hambre en la que los manifestantes solo beben agua. Toman agua con azúcar y limón, si es posible toman vitaminas. Ya se ha producido la muerte de uno de los huelguistas, Zulkuf Gezen, cuyo cuerpo fue despedido por una multitud en el aeropuerto de Ankara, cuando era trasladado a su pueblo para ser enterrado.
Otras acciones se están desarrollando, como la Segunda Conferencia Juvenil de Medio Oriente que se realizó en Kobane, con el lema: “hacia un Medio Oriente multicolor y democrático, con la avanzada de la juventud”.
La situación en Afrin y Kobane
En marzo del 2018 el ejército turco logró tomar la ciudad siria de Afrin, que había sido liberada por las milicias kurdo árabes sirias de las YPG (Unidades de Protección Popular). En las YPG combaten batallones de mujeres. Después de duros combates, más de doscientas mil personas abandonaron la ciudad, y las milicias dieron orden de retirarse, prometiendo seguir la lucha. Las YPG protegen la ciudad de Kobane, la primera en ser liberada, y han sumado voluntarios de distintos países, que siguen el ejemplo de la guerra civil española.
Hoy N° 1760 27/03/2019
