El compañero Daniel Murphy, secretario de la Regional Sur de Atech, decía al hoy: “El viernes 16 al inicio del corte en la rotonda de las rutas 3 y 26, a las 5:15 de la mañana, cuando iban llegando compañeras y compañeros de distintas organizaciones (fue una jornada de cortes provincial) se produjo la represión y la detención mía, y de Magalí Stoyanoff, también del gremio docente. Había un gran despliegue policial, muy superior a los que éramos nosotros en ese momento, y apenas nos estábamos organizando se nos vinieron encima para evitar el corte. Sin ninguna explicación ni orden de desalojo, nos empujaron, me tiraron al piso, me subieron a un patrullero y me llevaron a una comisaría.
“Una media hora después, y cuando estaban llegando compañeros a las puertas de la comisaría me trasladaron a otra, distante unos 30 km. Recién allí pude recibir visitas. En ningún momento se me explicó la causa de mi detención, ni quién había dado la orden. Más tarde se me informó que estaba a disposición de la Justicia Federal y se nos imputa ‘atentado contra la autoridad’. Tras casi 9 horas de detención fui liberado gracias a la continuidad de los cortes en la ruta, la amplísima solidaridad y las gestiones que realizaron conducciones sindicales, diputados provinciales y otros. Fue muy amplio el arco de muy diversos sectores que repudiaron la represión y las detenciones. Considero que el gobierno recibió un golpe muy duro en su intento de hacer los deberes a las empresas y garantizar esa ‘paz social’. Salimos muy fortalecidos”.
Por su parte, Magalí Stoyanoff nos decía: “Mi detención se produce a los pocos minutos, cuando intentábamos averiguar quién estaba a cargo del operativo, dónde habían llevado a Daniel y si es que existía orden de juez para el accionar. En ese momento se identifica el jefe de la policía provincial, Miguel Gómez, me dice que nos tenemos que retirar de ahí, que nos quedemos tranquilos, que Murphy estaba en buenas manos y que ya iba a haber tiempo de ver dónde estaba. Al exigirle respuestas, ordena mi detención, soy rodeada y apresada por un grupo de policías y arrastrada a un patrullero. Quedo detenida alrededor de 8 horas en la comisaría 7°. Allí en el transcurso de las horas se fueron reuniendo compañeras y compañeros de diferentes organizaciones, vecinas y vecinos del barrio, y se armó olla popular. Después pudimos conocer lo que sucedió afuera. Se mantuvieron y profundizaron los cortes, se desplegó la más amplia solidaridad y repudio de la comunidad y diferentes sectores”.
Hoy N° 1779 21/08/2019
