En CABA a partir del lunes nos cierran la puerta desde afuera a los mayores de 70 años, y sólo con algunas excepciones, o si en el 147 nos dan permiso, podemos salir a la calle.
Larreta dice que es para cuidarnos. Y es cierto, como la situación de la salud, también en CABA, no tienen suficientes enfermeras, médicos, ni insumos para cuidarnos, ni camas, ni respiradores, etc., la salud en CABA está gravemente desfinanciada, sólo basta recordar la lucha que el pueblo de la ciudad llevó adelante contra el cierre de 5 hospitales, aquel 5×1 que supimos parar.
No quieren que ocupemos las pocas camas los que tenemos más posibilidades de enfermarnos y tener un desenlace trágico, como indican las estadísticas, y no encontró mejor solución que cerrar las puertas de salida de nuestras casas.
Suponiendo que está preocupado, sería menos avasallante poner como prioridad destinar fondos, por ejemplo de los que ganaron millones de pesos con la compra de tierras en lugares claves de la ciudad en los últimos años, o exigir la fabricación de insumos para los trabajadores de la salud de fábricas textiles y otros rubros necesarios. O de ser necesario, garantizar que los sanatorios privados, que hay muchos en CABA, sumen camas y elementos para atender a los infectados.
Agradecemos su preocupación, nosotros también estamos preocupados, somos conscientes y por eso nos cuidamos, y mucho. Tenemos muchos años y conocemos de otras epidemias, aunque más leves que ésta, sabemos de qué se trata, no nos traten como tontos o infantiles. ¿No sería mejor poner la prioridad y los recursos humanos y materiales para garantizar la comida, elementos de limpieza, remedios y ayuda en aquellos adultos mayores que viven en los barrios carenciados, que a veces no pueden ni ir a buscar un “taper” de alimento a la olla del barrio?
Agradecemos su preocupación, una gran parte de los 490 mil mayores de 70 años que vivimos en CABA logramos arreglarnos hasta el día de hoy con nuestros hijos, vecinos, e incluso saliendo con alcohol en gel, barbijo, lavandina en mano, horarios temprano, 1 metro y medio de distancia, etc. al comercio de cercanía, no ha sido allí donde hubo contagios, sabemos cómo movernos.
Los adultos mayores hemos venido dando muestras de cómo hemos seguido avanzando en nuestro conocimiento como se ha visto en un sinfín de actividades educativas y el interés por ser parte de cambios y mejoras en la vida de todos. Lejos de aislarnos nos hemos nucleado por ejemplo, en centros de jubilados donde expresamos nuestra solidaridad y el activismo social y político.
El 147 puede ser de gran ayuda para todos los que no tenemos alguna solidaridad y somos muy mayores, y voluntariamente querramos acceder a que nos puedan resolver las necesidades cotidianas. Lo aceptamos en esas condiciones, asegurando que quien venga no esté contagiado y sea realmente un voluntario.
Agradecemos su preocupación pero creemos que es necesario poner la prioridad en nuestro personal de salud, en que haya camas, que haya respiradores, comida y remedios para quienes no tienen. No es momento de sobreactuaciones, es momento de poner las prioridades donde es imprescindible.
Corresponsal
