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02 de October de 2010

El manejo hegemónico de los medios no sólo sirve para silenciar denuncias y críticas, también facilita mostrar una realidad trucha como el Indec.

¿Y la democracia?

Hoy 1253 / La censura a Nelson Castro y los medios K

La “gente K” se sintió inignada por el escrache que productores agrarios hicieron al diputado nacional kirchnerista Agustín Rossi. Se sucedieron declaraciones, actos de desagravio, largas notas en los diarios oficiales (Página 12, Buenos Aires Económico o BAE, El Argentino), televisión, etc., donde se hicieron comparaciones con la dictadura militar y fueron agitadas palabras como “fascistas”. Ninguna palabra, sin embargo, emitió –o por lo menos dio a conocer– esa misma “gente K” frente al levantamiento del programa radial de Nelson Castro. Y el gobierno, que silenció a Castro en la radio, mantuvo estricto silencio de radio ante las declaraciones que hizo el periodista denunciando censura por razones políticas.
En un extenso reportaje que le hizo Magdalena Ruiz Guiñazú la semana pasada (publicado por el diario Crítica, 3/2/09), ambos atribuyen el levantamiento a un programa que Castro dedicó a la denuncia de sobreprecios en el tendido eléctrico entre Río Negro y Santa Cruz (otro tema donde circula el nombre de De Vido). El trabajo fue realizado por la empresa Electroingeniería, que es, a su vez, propietaria de Radio del Plata, donde tenía su programa Castro. Transcribimos algunas de los párrafos de ese reportaje.

Concentración de medios
NC: Hay un hecho que a nosotros siempre nos llamó la atención y que por supuesto no tuvo respuesta: Electroingeniería es una empresa que no tiene antecedentes en medios. Tiene sede en Córdoba. Radio del Plata en Córdoba no se escucha porque no tiene repetidora, lo cual marca claramente la poca fundamentación de ir tras una radio como ésta. De hecho, la nota, cuando la quisieron escuchar los propietarios de la empresa –hecho que les generó furia–, tuvieron que pedirla por internet porque no la habían escuchado. Esto marca claramente cuál es el propósito de estas adquisiciones que la empresa ha dicho que van a continuar y que tienen que ver con, como vos decís, el silenciamiento de voces que al Gobierno no le gustan.

MRG: El tema es que Osvaldo Acosta y Gerardo Ferreira, los dueños de Electroingeniería, están estrechamente vinculados con (Carlos) Zanini, con (Julio) De Vido; eso pesa. ¿Hay dinero oficial?
NC: Yo no sé si hay dinero oficial en cuanto a quién la compró, pero sí que hay publicidad oficial; es muchísima y en forma creciente. Esto es indiscutible.
“(…)Aquí el problema que se está generando ahora es con estas empresas allegadas al gobierno que compran medios. Este es el problema ahora (…)porque obviamente estas empresas compran y después se sustentan con la publicidad oficial. El armado es terrible porque además esta empresa ha hecho conocer que pretende comprar otras emisoras. (…)Si las emisoras se escuchan más o menos, poco interesa, porque ahí está la publicidad oficial que cubre todos los gastos sin ningún tipo de inconveniente.”   
 
El manejo hegemónico de los medios de comunicación no sólo sirve para silenciar denuncias y críticas: también facilita mostrar una realidad tan trucha como el Indec y machacar con un discurso “popular” que encubre una política antipopular. Una muestra en estos días es la propaganda oficial de las “medidas para el campo”. Para hacerla, se convocó a un experto: Fernando Braga Menéndez, y se dice que la propia Cristina K supervisó el material, que vio una y otra vez. El aviso fue rehecho tres veces hasta dar con lo que la presidenta pretendía: un papel heroico del gobierno en la contienda con el agro, y una visión mentirosa del campo, sus problemas y sus reclamos al gobierno. Con eso se bombardea una y otra vez desde la pantalla del televisor ciudadano y se eleva la espuma de la indignación campesina. La “gente K” aplaude la hegemonía de este discurso. ¿Cómo, y la democracia?.