1. Sigue la pandemia y crece la lucha popular
En el mundo y en Argentina la pandemia sigue castigando. En nuestro país, después de superar los cien mil casos diarios, en las últimas semanas vienen bajando los contagios, pero los números se mantienen altos. No hay barrio, familia, vecinos o amigos donde no haya contagios. Muchos muy leves no se testean y no son registrados. También están los que la están pasando mal y son internados. En estos casos, más del 60% son personas que no tienen el esquema de vacunación completo, y otros por enfermedades preexistentes.
El importante avance de la vacunación sigue siendo la principal medida para enfrentar la pandemia.
Pero es preocupante la situación en el sistema sanitario. En varias provincias, poco a poco se van ocupando camas y el personal sanitario sufre el agotamiento, los contagios y los varios trabajos para llegar a fin de mes.
Cuando decimos la “deuda con el pueblo” en este caso es con el personal de salud. No se ha invertido en sus condiciones laborales, en la toma del personal necesario y sus salarios pierden cada día más frente a la inflación.
El 7 de febrero hubo 259 muertos, y los fallecidos desde el inicio de la pandemia son 122.943. El mismo 7/2 hubo 25.406 contagios. Las muertes y los contagios siguen a un nivel alto. La ocupación de camas en todo el país es del 49%.
Las vacunas llegadas a la Argentina son 99.700.395. Se aplicaron 88.885.124. Con una dosis suman 39.818.988 (87 de cada 100 personas). Con dos dosis son 35.318.132 (77 de cada 100). Y con el refuerzo 13.748.004 (30 de cada 100).
Avanza la pandemia, y crecen los sufrimientos del pueblo, con muchos casos y muertos en familias que pasan hambre y viven hacinados en villas, asentamientos y barrios populares. Las medidas del gobierno han sido positivas con la vacunación, pero son insuficientes.
Reivindicamos y somos parte del papel que vienen jugando los movimientos populares como la CCC, la FNC, el Movimiento ni un Pibe Menos por la Droga, los movimientos de mujeres, las naciones y pueblos originarios, los movimientos culturales, los Cayetanos, los cuerpos de delegados en las fábricas y demás fuerzas sociales y sindicales.
Avanza la investigación para producir las vacunas nacionales y así no depender del chantaje de los países imperialistas y sus laboratorios.
2. Los viajes a Rusia y China
Esta semana el Presidente Alberto Fernández realizó una gira por Rusia y China.
En Moscú se entrevistó con Putin, en momentos que está en curso la posibilidad de invasión a Ucrania.
“Estoy empecinado en que Argentina tiene que dejar esa dependencia tan grande que tiene con el Fondo y con Estados Unidos. Y tiene que abrirse camino hacia otros lados”, dijo con razón el presidente Alberto Fernández. Pero agregó: “Tenemos que ver la manera de que Argentina se convierta en una puerta de entrada de Rusia en América Latina”.
Macri criticó las declaraciones de Fernández. No lo hizo defendiendo nuestra soberanía sino por “lamebotas” de yanquis e ingleses.
Luego el presidente siguió su viaje a China, pero el ministro de Economía Guzmán se quedó en Rusia donde mantuvo reuniones con su par ruso y empresarios, buscando apoyo para la negociación con el FMI, plata fresca para las raquíticas reservas de nuestro Banco Central y ofreciendo negocios a los monopolios imperialistas rusos.
El presidente argentino llegó a China, se reunió con el primer ministro chino Xi Jinping y se acordó el ingreso de la Argentina a la “Franja Económica de la Ruta de la Seda” y la “Ruta Marítima de la Seda”.
La “Ruta de la Seda” ya llegó a más de 140 países adheridos, entre los cuales hay 30 europeos, 37 asiáticos, 54 africanos y 20 de América Latina. Es definida por China como “una plataforma para promocionar el flujo de comercio e inversiones, la integración de los mercados y la cooperación económica regional”. En los hechos es una estrategia geopolítica de China para extender su garra imperialista a nivel global.
Se habrían acordado inversiones y obras de infraestructura por 23.700 millones de dólares.
Alberto Fernández habla de tener relaciones “equilibradas” con todos. Como si los países fueran todos iguales y no hubiera países imperialistas opresores, como Estados Unidos, Rusia y China, y países dependientes y oprimidos como el nuestro y toda América Latina.
Una cosa sería aprovechar la disputa de Estados Unidos e Inglaterra y otros, con China y Rusia para avanzar en una política independiente.
Pero en función de sacarnos de encima a los yanquis, no podemos cambiar de amo embelleciendo el abrazo del oso ruso “olvidándonos” que fue la punta de lanza del golpe de Estado de 1976, con sus 30.000 detenidos desaparecidos. O el abrazo del dragón chino, que nos ofrece ser furgón de cola de la Ruta de la Seda, se adueña de nuestras riquezas naturales y nos vende caro los productos elaborados.
No se trata de cambiar al águila yanqui y el león inglés por el oso ruso y el dragón chino.
Esa política es mucho más peligrosa en momentos como este, donde la disputa imperialista hace crecer los factores de guerra, poniendo a nuestro país como eventual campo de batalla.
Como dijeron los patriotas de la Revolución de Mayo de 1810: Ni amo viejo ni amo nuevo, ningún amo.
3. Se agudiza la disputa imperialista
Los viajes del gobierno argentino coinciden con el agravamiento de la disputa imperialista en Ucrania.
Estados Unidos comenzó el envío de tropas al Este europeo. Son 2.000 paracaidistas. Polonia entregó armas a Ucrania, país con el que tiene una amplia frontera, y recibió un contingente de soldados yanquis. Ucrania viene recibiendo decenas de miles de proyectiles de artillería, morteros y lanzagranadas.
Al mismo tiempo, Rusia envió un escuadrón de aviones de combate a Bielorrusia, país con un gobierno pro ruso. Y sigue desplegando sus tropas a lo largo de la frontera.
Esta semana los líderes del Reino Unido, Turquía, Polonia, Holanda y Francia visitaron Kiev, la capital ucraniana. Se habla de una propuesta para un acuerdo, que habrían presentado Estados Unidos y los países europeos, que ya estaría en manos del jerarca ruso Putin. El acuerdo o el desacuerdo con esa propuesta podría frenar el conflicto, o desatar la guerra.
Este lunes 7/2 el presidente francés, Macron, se entrevistó con Putin buscando una salida. Mostrando un matiz con la estrategia yanqui se coloca desde la Unión Europea, jerarquizando la necesidad de garantizar la paz en Europa.
Este es el punto de más tensión en una disputa que recorre todo el planeta. En el Atlántico Sur el imperialismo inglés sigue reforzando su base en Malvinas.
La Cancillería argentina expresó su rechazo a la realización, durante enero, de siete vuelos de la Fuerza Aérea del Reino Unido desde territorio brasileño a Malvinas.
A cumplirse dos años de la última y masiva movilización al camino de Tacuifí, centrales obreras junto a sectores del campo popular volvieron a plantarse este 7 de febrero por la soberanía con una nueva marcha por la recuperación del Lago Escondido, usurpado por el magnate inglés Joe Lewis: Ayer Malvinas, hoy el Lago Escondido…. ¡Fuera Lewis de Argentina! Fuera todos los imperialismos de América Latina! ¡Ni amo nuevo ni amo viejo, ningún amo!
4. No al acuerdo con el FMI
En su reunión del 20 y 21 de noviembre de 2021, el Comité Central del PCR acordó impulsar una gran campaña de masas por la suspensión, investigación y castigo a los responsables de esta deuda ilegítima y fraudulenta. Poniendo el centro en llegar con nuestra posición a las grandes masas, participar de la discusión e impulsar pronunciamientos de los organismos de masas obreros, campesinos y populares.
El macrismo, mientras fue gobierno, con su política profundizó los sufrimientos del pueblo argentino, y nos dejó una deuda impagable.
El gobierno de Alberto Fernández, si bien denunció la estafa de esa deuda, terminó negociando un acuerdo con el FMI. Este principio de acuerdo reconoce esa deuda ilegítima y fraudulenta que inevitablemente se descarga sobre las espaldas del pueblo y la nación a través de un ajuste y pone en manos del FMI, organismo de la usura internacional, nuestra soberanía financiera.
El conjunto de las clases dominantes han realizado una gran campaña argumentando que si no arreglábamos con el FMI “nos caíamos del mundo”.
Ahora Juntos por el Cambio festeja hipócritamente el principio de acuerdo, escondiendo su responsabilidad en esta estafa y argumentando que “es un primer paso para no seguir sembrando incertidumbre en la sociedad”.
En la historia, en 20 de las 21 veces que vivimos crisis semejantes, las recetas para salir fueron con más “endeudamiento”, con más ajuste y con más pérdida de la soberanía de la mano de las potencias imperialistas.
La única vez que logramos una salida con recuperación económica fue en el 2001, cuando el pueblo en las calles produjo el Argentinazo que obligó a la renuncia del ex presidente De la Rúa, que se escapó en helicóptero, y el Congreso Nacional aprobó la suspensión del pago de la deuda.
En este momento político, que no es el mismo que en el 2001; en la situación nacional e internacional el presidente Fernández afirmó que tenemos con el Fondo “el mejor acuerdo posible”. Por otro lado según el comunicado del FMI, tenemos un “entendimiento” con algunos puntos acordados, y se están negociando otros temas centrales. Los acuerdos deben ser aprobados por el equipo técnico del FMI y finalmente por su Directorio. En la Argentina debe aprobarlo el Congreso Nacional.
El presidente Fernández dijo en C5N el 31 de enero que había que arreglar con el Fondo antes de viajar a Rusia y China.
Al día siguiente, sin esperar el viaje, se realizó una teleconferencia del gobernador de Buenos Aires, Kicillof, con empresarios y funcionarios de China, donde se firmó la construcción de una central atómica, Atucha 3, por 8.300 millones de dólares.
Estos acuerdos suceden cuando hemos desarrollado, y se está construyendo el Carem, que es el primer reactor nuclear de potencia íntegramente diseñado y construido en la Argentina. Tenemos tecnología para avanzar en este terreno, con estas pequeñas usinas, mucho más seguras, muy útiles, prácticas y baratas. No solo para la Argentina sino para muchos países del mundo.
El acuerdo con el FMI era una condición no solo del imperialismo yanqui sino del conjunto de las potencias imperialistas.
Nosotros seguiremos encabezando la lucha por resolver las emergencias populares y la pelea por suspender el pago de esta deuda odiosa, que se investigue y se castigue a los responsables, como lo hemos hecho en las jornadas del 4 de noviembre y del 20 de diciembre.
La renuncia de Máximo Kirchner a la presidencia del bloque de diputados, el 31 de enero, ha producido debates al interior del Frente de Todos, que habrá que ver cómo se desarrollan.
Nosotros seguimos peleando por unirnos en iniciativas de lucha por las emergencias y llevando esta discusión para que se pronuncien los organismos de masas contra el acuerdo con el FMI.
Los pronunciamientos de la Mesa Nacional de la Federación Nacional Campesina, del Movimiento de Unidad Secundaria, de la Cicop (médicos de la provincia de Buenos Aires), de la Conadu Histórica, de “Ni un pibe menos por la droga”, del bloque de concejales del Frente de Todos de Quilmes, la Corriente de Trabajadores Estatales Rene Salamanca – CCC, y las jornadas de lucha que se discutieron en la Mesa nacional de la CCC, avanzan en esa dirección.
5. Arrancan las paritarias
Arrancan las paritarias de estatales, docentes y algunas ramas industriales. Los salarios vienen con un recorte por la inflación de 2021, que fue del 50,9%. La pelea será recuperar lo perdido. También, vienen el tarifazo del gas y la electricidad por la reducción de los subsidios. La inflación real para el 2022 se estima por arriba del 50%.
Un 42% de los salarios está por debajo de la línea de pobreza. Los trabajadores en negro o contratados suman el 32%. El salario mínimo, vital y móvil, las jubilaciones y las pensiones mínimas, no llegan a $33.000, que es el valor de la línea de indigencia. En la misma situación están las asignaciones sociales. También el salario medio en el sector privado está al borde de la línea de pobreza para una familia.
La aparición de la cocaína envenenada puso en evidencia la gravedad del avance del narcotráfico en Argentina y que siempre las víctimas las pone el pueblo. La mayoría de los jóvenes son pobres y tienen dificultades para estudiar y trabajar. “No somos descartables, la droga mata”, denunció este lunes en su jornada nacional de lucha el movimiento “Ni un pibe menos por la droga”.
Sigue la lucha de los trabajadores de Mondelez Pacheco por los cuidados sanitarios, con su Comisión Interna a la cabeza y la participación del sindicato.
Los petroleros de Chubut y el norte de Santa Cruz marchaban al paro y asambleas por la defensa de su trabajo y aumento salarial.
Los desocupados y precarizados de la CCC y la Federación Nacional Campesina realizaron sus mesas nacionales discutiendo su programa de reivindicaciones, que incluye seguir impulsando en todo el país pronunciamientos por la suspensión e investigación de la deuda con el FMI, y la realización de un plan de lucha buscando la confluencia con otras fuerzas.
6. Pelear la confluencia de las luchas
La gravedad de la situación que vive el pueblo nos exige estar a la cabeza de los reclamos y pelear la confluencia de las luchas obreras y populares.
Para seguir avanzando tenemos que seguir ampliando los movimientos, crecer y tenemos que prepararnos.
Hay sectores sindicales, políticos y sociales del Frente de Todos que están convencidos que el acuerdo con el Fondo, y la “ayuda” de rusos y chinos nos sacará adelante y creen que no conviene salir ahora para no hacerle el juego al macrismo.
Esto es como creer que si le das la soga a tu verdugo la usará para sacarte del pozo y no para ahorcarte. Su naturaleza no se lo permite.
Sobre la base de seguir a la cabeza de las luchas por las emergencias e impulsar el rechazo al acuerdo con el Fondo, buscamos unir esas luchas, partiendo de los puntos de acuerdo, para que estas puedan confluir y conquistar las urgentes necesidades de cada sector. Avanzando en la organización de las masas peleando por recuperar, democratizar y crear donde no existan, cuerpos de delegados que garanticen la democracia grande.
Nosotros desde el Partido Comunista Revolucionario apostamos a ese camino. Estamos de pie para enfrentar los nuevos desafíos y tenemos que avanzar en la acumulación de fuerzas para que la clase obrera y el pueblo tome en sus manos la lucha por la revolución que acabe con este Estado oligárquico imperialista y así resolver el pan, el techo, la tierra, la salud y la educación de todos los habitantes de este suelo.
El mejor homenaje a nuestro querido camarada Otto Vargas, de cuyo fallecimiento se cumplen tres años este 14 de febrero, es que seguimos siendo comunistas revolucionarios, no nos paralizamos, estamos a la cabeza de la lucha y seguimos la lucha por la Revolución.
Escriben Jacinto Roldán y Ricardo Fierro