Lo que debía ser el inicio de las clases luego del receso invernal fue lo contrario, un gran paro y movilización marcan lo que será esta segunda parte del año.
En el marco de las discusiones paritarias, el gobierno de Cambia Mendoza se presenta con una propuesta miserable, lo que desencadenó una bronca masiva e inmediatamente se generó por las redes, por los grupos de WhatsApp escolares, en los muros de Facebook, etc., una amplia convocatoria al paro y para marchar. Con el sindicato a la cabeza, la jornada de paro y movilización comenzó a tener más relevancia y el 26 de julio más de 25 mil trabajadores y trabajadoras de la educación marcharon por el centro mendocino hasta Casa de Gobierno, para exigir un salario digno y que no quede por debajo de la inflación.
El paro tuvo un alto acatamiento, realmente hace años que una medida como esta no tenía el impacto que tuvo y que además manifestó el apoyo de las familias de la comunidad educativa. Pero como era sabido, el gobernador no iba a reconocer esta gran jornada y salió a decir que solo fue del 32% el acatamiento, dato que no pudo sostener cuando sus medios de comunicación tampoco pudieron desmentir lo que sucedía fueron a las escuelas y comprobaron en vivo que las escuelas estaban vacías.
Es un cachetazo a Suárez y a su política de ajuste y a su arma ítem aula (que sanciona con fuertes descuentos por no cumplir con el presentismo), porque con las escuelas vacías y las calles llenas, se inició esta segunda etapa que demuestra que ya no hay miedo.
“La clase la estamos dando en las calles”, decía la secretaria del SUTE en su discurso, y así fue porque en las calles de la ciudad y de toda la provincia se leían carteles que decían: “Un docente que lucha, también educa”, “Soy profesional de la educación, merezco un sueldo digno”, “Basta de miseria”, “Marcho por la dignidad”, “No al ítem aula”, entre otros, sumado a que se escuchaba que desde los autos gritaban: ¡Paguen más a las maestras!
Cuando Cornejo impuso su ítem aula, luego los aumentos por decreto, y así las siguientes pérdidas de derechos con Suárez, las trabajadoras y trabajadores de la educación fueron juntando tanta bronca que hoy, sumado al hartazgo de la miseria que ofrece en paritaria y a la situación de angustia al ver que el salario no alcanza con una inflación que devora cada centavo, el paro, la medida que en otros momentos no fue masiva, hoy fue impactante. Cada maestra que marchaba lo hacía con alegría, con esperanza, se oía “por fin salimos, por fin el paro es masivo”, etc. El alto acatamiento demuestra que ahora no solo van por aumento salarial, sino por la derogación del ítem aula. Con el salario no se jode y eso quedó demostrado con la gran jornada de lucha del 26 y 27.
Cabe destacar que la jornada de 26 estuvo teñida de la unidad de trabajadoras y trabajadores estatales de distintas áreas, educación pública y privada (Sadop) y salud (Ampros), también adhirieron el gremio de Casinos, Judiciales, Atsa, Sitravi, Bancarios y la CTA de los trabajadores Mendoza. También destacamos las familias y estudiantes que se sumaron a apoyar a la comunidad educativa.
Entrevistamos al coordinador provincial de la agrupación Verde Cuatro de Abril SUTE, Alberto Muñoz y nos decía: “…Acá estamos reunidos los trabajadores y trabajadoras de la educación en las calles, para exigirle al gobierno de la provincia, al gobierno de Suárez, de cambiemos, que aumente de forma urgente los salarios, que ponga más presupuesto para las emergencias educativas entre otras emergencias como la alimentaria, la social. Somos los trabajadores que tenemos el salario más bajo de todo el país, por lo tanto, acá nos hemos reunidos, convocados por las asambleas provinciales del SUTE, para decirle al gobierno que no estamos dispuestos a seguir perdiendo derechos y que en estos momentos donde hemos perdido todo, ya no tenemos miedo. Acá nos hemos juntado, hay un acatamiento del 90% al paro, somos miles en las calles y estamos peleando por la unificación de un plan de lucha nacional que permita de una vez por todas abrirle la mano a todos los gobiernos que vienen ajustando al pueblo.”
En la movilización fue importante la delegación de la CCC, apoyando la lucha y acompañando hasta la casa de gobierno, al igual que el PCR y las y los jóvenes de la JCR.
También pudimos entrevistar a Guido Peña, coordinador de la CCC Mendoza quien decía lo siguiente: “Hoy es un día de lucha de los trabajadores estatales de la salud, de la educación, en la que desde la Corriente Clasista y Combativa venimos a traer la solidaridad, mostrar que el camino es la lucha… nosotros trabajamos y refaccionamos los edificios escolares que el gobierno no mantiene, lo hacemos con nuestro trabajo, y apoyamos la lucha de las y los trabajadores estatales por un salario digno”.
Sin dudas que esta jornada de lucha marca un antes y un después en la política de la provincia, son momentos de debate intenso sobre la salida, la situación de desesperación ante la inflación que avanza a pasos agigantados, quita el miedo a cualquier medida antidemocrática y genera la posibilidad de salir y decir basta. Seguiremos a la espera de lo que suceda la semana próxima ya que el gobierno el 29 de julio corta la discusión y aumenta por decreto, tal como lo viene haciendo desde que asumió. Desde el SUTE se está trabajando en las asambleas escolares y en los plenarios la semana próxima.
En estos momentos la unidad de trabajadores y la comunidad escolar es clave porque la lucha que se viene es larga. También hay que trabajar en la unidad con los otros sectores estatales y las organizaciones sociales, para exigirle al gobernador Suárez no solo un salario digno activando la cláusula gatillo, sino para que se arreglen las escuelas, se construyan nuevas divisiones para que los estudiantes no estén apretados en las aulas y por los derechos que este gobierno autoritario ha quitado en estos años a las y los trabajadores estatales y el pueblo en general.
Corresponsal
Hoy N° 1924 03/07/2022
