Veamos algunos conceptos de qué es un Swap. La Argentina tiene en su Banco Central unos 130.000 millones de yuanes que equivalen a 20.000 millones de dólares (el BCRA no precisa los datos). El Banco Central chino tiene también en sus cuentas un equivalente en dólares de pesos argentinos. Si querés importar insumos ferroviarios de China, lo que tenes que pagar en yuanes a ese exportador chino, lo pagas en pesos al Banco Central y este paga en yuanes al exportador chino. Pero cada uno de estos movimientos tiene que estar acordado por el Banco Central chino. Después el BCRA tiene que reponer esos yuanes a la cuenta, durante el tiempo que no los reponga paga intereses, que no son bajos.
Esto tiene una historia, arrancó en el 2009 con un Swap por un equivalente a 10.000 millones de dólares, a su vez cada acuerdo de Swap tiene un vencimiento, al final del cual hay que cancelar las cuentas, se lo fue renovando cada 3 años y se lo fue ampliando, la última ampliación fue en febrero de este año. Ahora viene esta nueva ampliación por un equivalente a 5.000 millones de dólares.
Lo ampliaron, y lo que plantea el ministro de Economía Massa, es que le dieron libre disponibilidad, no solo para el comercio con China sino que -según el ministro- le permite cambiar los yuanes por dólares y usar esos dólares, por ejemplo, en el Mercado Unico de Cambios de la Argentina, o sea, que podes usar esos dólares para liberar una importación con Europa. Esto es lo que no es tan fácil que suceda, porque los chinos hacen los Swap con un objetivo que es imponer el yuan como moneda de intercambio mundial. Pero lo que quiere el gobierno argentino es la libre disponibilidad de cambiar estos yuanes…
De Renzis: Esta vez dijo que sí Xi Jinping porque los chinos son sostenedores de gran parte de la deuda norteamericana en dólares.
Arnoldo Gómez: En ese sentido otra cosa que se negoció es que desde el año 2020 los créditos que tenía otorgados China para las represas del sur se cortaron, no entró más un dólar en la Argentina, porque los bancos chinos exigieron el acuerdo con el FMI, sino no liberaban los créditos. Los chinos sostienen todo el sistema de relación internacional vinculado al FMI.
Los swap en principio tienen un objetivo de supremacía comercial de China. Argentina es deficitaria en su comercio con China. Hoy estamos en un déficit de unos 8.000 millones de dólares.
Acá viene el tema grueso de la noticia. ¿Es exactamente como lo dice Massa? ¿Va a tener la libre disponibilidad sobre este nuevo tramo que equivale a 5.000 millones de dólares para cambiar los yuanes en dólares y usarlos como dólares en el mercado nuestro? O sea que cuando un importador quiera importar algo de cualquier lugar del mundo pueda disponer de eso ¿sí o no? No queda totalmente claro. El ministro lo afirma, así que es posible que así sea, aunque hasta donde yo conozco, cada operación está sujeta a acuerdo del Banco Central chino.
De Renzis: Las declaraciones de Xi Jinping afirman eso de libre disponibilidad. Ahora de ahí a transformarlo en billete verde para pagar importaciones van a tener que consultar cada caso, como vos planteas.
Arnoldo Gómez: Hasta lo que uno conoce es así.
De Renzis: … “qué quieren importar”, “tornillos”, “no, nosotros fabricamos tornillos”. Sirve más para que internacionalmente vos digas que tenes reservas, que en realidad no tenes.
Arnoldo Gómez: Es probable, por ejemplo, que si hay una corrida que la provocó una movida de los fondos Templeton que operan en el mercado interno nuestro, la diplomacia china diga “bueno, está bien, aflojemos” y te lo permitan.
De Renzis: De hecho, uno de los buitres se fue el otro día e hizo aumentar el dólar de las cuevas.
Arnoldo Gómez: Templeton y PIMCO retiraron parte.
Habrá que estar atentos y, desde ya, que el gobierno está contento, pero además hay que ver la letra chica de lo que se firmó. Y entre otras cosas lo que se firmó fue liberar que siga vigente el crédito para construir las represas del sur, que como decía está suspendido desde el 2020. El crédito consiste en que los bancos chinos le pagan al ministerio de Economía de la Argentina, y éste es el que libera los pagos para las contratantes. Como no liberaban los créditos y ante la presión de las empresas, la principal es china, el Estado argentino tuvo que hacerse cargo y lleva pagado 280 millones de dólares para continuar la obra, que es lo que ahora el gobierno reclama que los bancos chinos liberen. Pero en la semana que viene voy a detallar lo leonino de estos créditos que estamos mendigando y lo feroz que es la usura china.
