A pocos días de fin de año, la Comisión Interna viene informando de una serie de conquistas, que entre sumas en efectivo, días no laborables pagos, cajas navideñas, bonos y voucher suman entre 150 y 200 mil pesos más para el bolsillo de cada trabajadora y trabajador.
Nos decía Penayo: “Nosotros entendemos que esto tiene que ver, en primer lugar, con que sigue vigente el conflicto del 2009, aunque parezca difícil de creer. Los mismos directivos de Mondelez te dicen que fue el conflicto más importante en 70 años. Y eso tiene que ver con el gran protagonismo de esa masa de trabajadoras y trabajadores de Mondelez Pacheco. Porque fue un conflicto protagonizado por más del 90% de las y los compañeros.
“En segundo lugar, creo que pudimos aprovechar la contundencia del último triunfo de la Comisión Interna, en la que las y los compañeros convalidaron a esta Interna con más del 60% de los votos, en medio de que veníamos con paros y luchas por distintas reivindicaciones. Hay un tercer factor, que es que la empresa quiere producir y no quiere conflictos.
“Estamos aprovechando esta situación favorable a los trabajadores para forcejear y arrancarle a la empresa más conquistas. Entiendo que esto tiene que ver con lo que hemos conseguido en estos meses, que no conocemos que se hayan obtenido en otras fábricas de la alimentación. Estamos hablando de conquistas por fuera de la paritaria. Son reivindicaciones internas.
“Creo que nos hemos movido con una línea justa, como Partido y como Corriente, y esto nos ha dado también el respeto de otras comisiones internas y de trabajadores de otras fábricas. La pelea por la unidad de los tres turnos es fundamental en esta pelea.
“En la empresa ha habido en los últimos meses un cambio de dirección. Esto lo pudimos aprovechar. Los yanquis sacaron a toda la dirección que estuvo en tiempos de la pandemia, cuando conseguimos también una cantidad de cosas. Que se cumplan los protocolos, sacar de la fábrica a los contactos estrechos, y una cantidad de beneficios y bonos. Los yanquis decían que estos directivos eran “dóciles” con los trabajadores.
“Nosotros hemos aprendido con la experiencia, y pudimos abordar a la nueva dirección antes que se termine de acomodar. Siempre con lucha, como los bloqueos de portones que hicimos en distintos momentos, desde el inicio de este año.
“Porque lo que está detrás de estas conquistas, siempre, es que los viejos directivos, y los nuevos, saben enseguida que esta es una masa que lucha. Así estamos cerrando un año en el que, sin tirar manteca al techo, venimos acompañando la feroz inflación que padecemos los trabajadores.
“Nosotros logramos esto sumando distintas cosas, haciendo un balance desde octubre para acá. Hemos logrado algunos sábados como feriados puente, voucher de mercadería por el Día de la Madre, bonos de fin de año, los días de fiesta, que se pare la producción todo pago para ver los partidos de Argentina y alentar a la selección, entre otros logros, todo por fuera de la paritaria”.
El básico en la alimentación tendría que ser de $200 mil
Cuenta Penayo que han discutido con la dirección del gremio tres puntos: “Primero que en las paritarias, que se firmaron por un 71%, quedamos muy por debajo de la inflación, que apunta al 100%. Es cierto que nuestra paritaria va de mayo a abril, pero sabemos que estamos por debajo de la inflación. Por eso le hemos planteado a la dirección del STIA que se reabran las paritarias. Y este reclamo viene de otras fábricas también, que están con peores condiciones que nosotros, porque sólo están cobrando el aumento paritario. Por eso hay mucha bronca, y conflictos como el de los compañeros de Molinos reclamando un bono de fin de año; hay otras alimenticias que también lo están pidiendo.
“El gremio dice que no quiere cambiar bono por paritarias. Nosotros le hemos dicho que no es correcto contraponer. Planteamos que dada la alta inflación, el bono es una ayuda por fuera de la paritaria. Hasta Cristina Fernández lo planteó en el plenario de la UOM.
“El otro punto que hemos planteado es porqué la Alimentación no acompaña el reclamo de varios gremios, entre ellos Bancarios y Camioneros, y también varios diputados como nuestros compañeros Juan Carlos Alderete y Verónica Caliva, de elevar el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias a nueve salarios mínimos. Nosotros reiteramos nuestra posición de que el salario no es ganancia, pero reconocemos que con esta propuesta de algunos gremios se consigue un respiro para muchos compañeros que hoy están tributando.
“Otro tema es el de la inflación. Porque sabemos que los grandes empresarios juegan para esos sectores de derecha que se quieren presentar como salvadores de la economía, cuando son los mismos que cuando estuvieron no resolvieron nada.
“La dirección del gremio defiende el acuerdo paritario que se firmó. Les hemos dicho que hubo un antes y un después de la lucha de los trabajadores del neumático. Todos los que firmaron después lo hicieron por un 90% de la inflación. Por eso nosotros decimos que tenemos que salir de los porcentuales y pasar a hablar de los básicos, un mínimo en la alimentación tendría que ser de 200 mil pesos”.
Consultado sobre cómo ve el compañero el comienzo del 2023, afirma que “creo que va a ser complicado. El gobierno también está complicado. El acuerdo con el FMI es ajuste, como se expresó con los movimientos sociales, con muchos compañeros sin cobrar su plan. Por eso fue tan grande la marcha del 7 de diciembre. Y con el convenio de “precios justos”, las cámaras empresarias sacaron ventaja de nuevo. Son muy pocos los productos que ponen dentro de este programa, y aumentan mínimo un 4% mensual. Además les han dado un dólar a los sojeros que los beneficia. Esta sigue siendo la discusión, quién va a pagar la fiesta del endeudamiento y del macrismo. Nosotros entendemos que con estos logros estamos en mejores condiciones para enfrentar lo que se puede avecinar en el 2023. Porque entramos en un año electoral, y no va a ser sencillo. Es momento de poner en primer plano qué Argentina queremos para los trabajadores y el pueblo”.
Hoy N° 1943 14/12/2022