Al anunciar la suspensión de los incrementos en las tarifas, De Vido sostuvo que los problemas con los usuarios se produjeron por “la mala evaluación del mercado eléctrico que hicieron las concesionarias y que nos llevó a realizar una segmentación tarifaria errónea y a no tener en cuenta que la gente utiliza en forma masiva la energía eléctrica para calefaccionarse”.
Bueno, uno podría decir que es la argumentación típica del kirchnerismo de echarle siempre la culpa a otros de sus propios errores. Pero es a la vez un reconocimiento de algo mucho más grave: que durante todos estos años de gobierno kirchnerista, los organismos reguladores y el propio Ministerio no han hecho ningún estudio propio, que se han guiado y se siguen guiando por lo que le dicen los monopolios que manejan esos negocios. Vuelve a quedar en claro lo que son: sirvientes de esos monopolios, que dicen y hacen lo que les “sugieren” esos monopolios en función de sus intereses.
Dirán que esto viene así desde la época de Menem y De la Rúa. Pero, ¿qué hicieron en estos siete años? Congelaron las tarifas y le dieron subsidios a los monopolios de acuerdo a los cálculos de costos y beneficios que hacían esos mismos monopolios. Ahora que no alcanza el dinero, hacen lo que los monopolios les “sugirieron”, como balbucean también los funcionarios que supuestamente tienen que fiscalizar: por ejemplo le reprochan a Edenor que fueron los técnicos de la empresa los que “sugirieron” aplicar el esquema de aumentos a partir de los 1.000 kWh bimestrales sin tener en cuenta que no siempre los hogares que más electricidad (y/o gas) consumen son los que tienen mayores recursos económicos como para poder afrontar los aumentos de hasta el 500% que se habían autorizado a fines de 2008. ¡Ya hace rato que tendrían que haber renunciado todos, empezando por el ministro De Vido!
02 de October de 2010