Tuvieron que pasar más de 30 años para que la San Nicolás del acero, la proletaria, la dueña de Somisa, hiciera vibrar nuevamente a su pueblo y a sus calles.
Miles de metalúrgicos llegados de Matanza, Campana, Rosario, Santa Fe, Pergamino, Zárate, Villa Constitución, Avellaneda y muchas seccionales más, con sus banderas, cánticos, batucadas, hicieron vibrar el centro conservador, peludo, gorila y perfumado de los que se creen los dueños de todo.
Vinieron de todos lados: eran miles. También de Siderar, los trabajadores de fila, y no solo los delegados y cuerpos orgánicos. Por voluntad propia, decenas de compañeros de a pie, en moto, solos o en grupo. desafiando la prepotencia del patrón más rico del país, Paolo Rocca, el ladrón de Somisa y ahora de YPF y el petróleo; el dueño del gasoducto que hizo con la laminadora de chapa caliente que le robó a Somisa cuando la privatización en épocas de Menem y con otras complicidades que más vale no recordar.
Rocca ahora se encapricha y como los que se creen los dueños de todo dice: no pago ni un centavo más y amenaza a las empresas de la Cámara con no venderles ni una chapa si rompen el acuerdo salarial que él comanda. Y que es la posición oficial de su socio Milei, que para eso le bancó la campaña en su momento y ahora cobra con la presidencia de YPF.
Al finalizar la marcha, frente a Tribunales y la Catedral hablaron el secretario adjunto de UOM, Naldo Brunelli y Abel Furlán, secretario general del gremio.
Dijo Brunelli, aludiendo a palabras de un miembro de Comisión Directiva, Luis Sánchez, “si luchamos podemos perder todo… pero si no luchamos estamos perdidos”.
Por su parte, Furlán afirmó: “Los salarios están congelados a noviembre de 2023. Esta marcha es una marcha por la dignidad. Rocca tiene más funcionarios en este gobierno que el propio Milei”. Mientras tomaba aire, los muchachos arrancaban con “el que no salta vota a Milei” y “pagá el aumento la puta que te parió”.
La UOM, continuó Furlán “una vez más está demostrando la voluntad de lucha, de pelear, de defender la dignidad que nos toca a cada uno. Que entienda el grupo Techint que no puede pisotear la dignidad de los trabajadores. La vamos a defender cueste lo que cueste”, cerrando su discurso entre aplausos y un griterío ensordecedor.
El gigante se ha puesto de pie. Lo acompañaron las organizaciones sociales como la CCC, el Mov. Evita, multisectoriales de distinto tipo y nuestro querido Partido Comunista Revolucionario. Nuevos vientos soplan entre los metalúrgicos.
Corresponsal
Hoy N° 2005 10/04/2024