De Renzis: Parecería ser que en lugar de resolver el hambre, atacamos a los que tratan de paliarlo, porque cuando se encuentra una falla en algún comedor que no existe o en algún agente social que no cumple, esta es la noticia, pero no se habla de que la asistencia no llega.
Arnoldo Gómez: Miles de comedores que resolvieron cómo pasar la pandemia en los lugares donde se la sufrió en forma más terrible. Y a esos protagonistas, a esas mujeres que revuelven la olla, que están en un barrio, que viven en una casa humilde, las fiscalizan y no a aquellos que fugaron los dólares.
Lo que lograron de las 1.200 denuncias telefónicas en esta causa son cinco testimonios en vivo. Hay miles de ollas de los movimientos, a los cuales el Estado les delegó la asistencia social. Esas ollas tendrían que ser puntos de asistencia a todos los que no pueden comer en la Argentina del Departamento de la ministra de Capital Humano Pettovello. Un desastre que en nuestro pais haya gente sin comer.
De Renzis: Yo diría que no es una obligación del Estado. La responsabilidad del Estado es no haber encontrado, en los distintos turnos políticos, la solución para que la gente trabaje y se gane el sustento.
Arnoldo Gómez: Desde ya, pero si hay hambruna, como hay en la Argentina, es un deber asistirla. Esto lo han conquistado con años de lucha las organizaciones sociales. Ya hace 20 años que se salía a la ruta y no nos íbamos si no entregaban bolsones de comida. Ese era el reclamo.
Bueno, esta realidad pica abajo ahora. Y frente a esta realidad el gobierno lanzó esta campaña de demonización de las organizaciones sociales y de ver en un pobre como un enemigo. Y lo está haciendo para prevenir y achicar la gran movilización que se va gestando contra la Ley Bases, contra la que se van pronunciando todas las organizaciones de los desocupados y precarizados junto a los obreros sindicalizados, la CGT y ambas CTA. Están tratando de dividir al pueblo para obstaculizarla y reprimirla. El sábado estuvo el plenario de las multisectoriales realizado en Florencio Varela, que preanuncia esta gran movilización cuando se trate en el Senado.
Tener en cuenta qué es esta Ley Bases, porque tiene lo que se llama RIGI, Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones, por el cual si cualquier empresario paga el 35% por ganancias, el capital externo de más de 200 millones de dólares que se invierta en Argentina pagará sólo un 25%, se le exceptúa del IVA e ingresos brutos, le garantizan que puedan ingresar y sacar las divisas que quieran y libre importación no sólo de maquinarias y repuestos, sino hasta los uniformes. Una ley de la entrega que fomenta, por ejemplo, Techint, porque tiene este acuerdo con Petronas para hacer grandes inversiones conjuntas en Vaca Muerta, donde ellos provean sus tubos sin costura y gasoductos con su acero. Así también en varios proyectos mineros y del litio. Depredación, ganancias para esos grupos externos y la burguesía intermediaria asociada y liquidación del resto de la burguesía nacional, del mercado interno y mayor dependencia. En definitiva todos los factores que explican y desarrollan el hambre en nuestro pueblo.
Lo otro de esta Ley Bases es la Reforma Laboral. Una reforma por la cual si ahora hay tres meses de posibilidad de estar a prueba, se amplía a seis. Pero además se quita toda penalidad al que no cumpla con las leyes de blanqueo laboral. Por lo tanto, se eterniza y se castiga a los precarizados y desocupados, a los mismos que se están castigando en las ollas.
En Argentina hay seis millones de asalariados en blanco y siete millones que trabajan en forma precaria, en negro, o con contratos de renovación cada tres meses. Y ese trabajador precario, que hoy está vendiendo una latita en la calle, limpiando para brisas, o entrando en una empresa por tres meses para que lo vuelvan a despedir, se las arregla con las ollas, en los comedores o con los planes de trabajo que están supliendo muchas de las actividades municipales.
Además, quita la posibilidad de la jubilación anticipada del ama de casa. O sea, quita todos los derechos a los más pobres de la población para crear una Argentina sumisa a los grandes grupos que son los que lo apoyaron a Milei en el Llao Llao, que son los que empujan esta Ley Bases. Pobres, obedientes y sumisos por 20 o 30 años y obreros industriales disciplinados y con bajos salarios en dólares. Este es el proyecto de la Ley Bases.
El qué hacer se fue respondiendo con el propio llamado de los oyentes en el programa de hoy. Hay que mover los pies, vincularse, en cada barrio hay alguna organización, hay algún centro de jubilados, hay alguna organización social que está organizando cómo movilizarse para ir al Senado el día que se trate la Ley Bases. Tenemos que ir todos para neutralizar y pararle la mano a la Bullrich que va a buscar reprimir la manifestación. Pero cuando la movilización es masiva estos operativos quedan en ridículo y paralizados.
De Renzis: Hay algo que me parece central en todo esto, que es la presencia activa en la vía pública del pueblo en queja. Porque si no, da la impresión que se hace a través de cuestiones muy puntuales, pero que no hay una concurrencia generalizada de coincidencia. Y, sin embargo, si vos le preguntás a la sociedad cómo la está pasando, hasta los que votaron a Milei dicen que la pasan mal.
Arnoldo Gómez:. Era muy interesante escuchar lo que te decían hoy los oyentes. Por ejemplo, “tenemos el producto de lo que somos”. Bien, si no nos gusta el producto dejemos de ser lo que somos, por ejemplo que no estamos organizados plenamente y dejamos hacer a los que nos representan. Dejamos hacer al gobierno de Fernández que fuera neutro con Vicentin, que no aplicara la ley de abastecimiento… También se preguntaban los oyentes cuál es la salida. Bueno, aprendamos de los hechos, será necesario controlar el comercio exterior, y no como fue Fernández con Vicentin.
De Renzis: Decía Perón, la organización vence al tiempo.
Arnoldo Gómez: Es un gran momento de movilizarse y organizarse. Esto nos va a dar un futuro y una salida.
De Renzis: Yo creo que hay una gran comodidad en todos nosotros que la tenemos que dejar de lado porque está en juego todo.
Arnoldo Gómez: Pero también te contestaba otro oyente “somos un pueblo muy luchador que ha hecho grandes cosas. Si hace veinte años echamos un presidente…” Bueno, se puede volver a repetir. O sea, es un pueblo que quiere vivir en paz, que quiere ilusionarse pero hay sectores muy poderosos que hasta que no logremos nosotros domarlos y erradicar toda esa runfla que se reunió en el Llao Llao y le dijo al Presidente en la voz de Rattazzi “coraje, presidente, siga adelante”; ese es un sector muy poderoso que va a haber que luchar duro para sacarlo. Pero es posible, como dijo la oyente…
La salida que se busca hay que verla en la propia experiencia, no repetir Vicentin y nacionalizar el comercio exterior, y al revés cuando se sancionó la ley de las Grandes Fortunas logramos un momento de alivio al pueblo, bueno, tendrá que tener vigencia permanente. Cuando con el levantamiento del 2001 se suspendió el pago de la deuda externa, tuvimos los seis años de mayor crecimiento que hubo en la Argentina. Entonces, nosotros tenemos que aprender de nuestra propia experiencia y transformarlo en programa “suspender el pago de la deuda externa.” Otro de los oyentes decía, “hace falta trabajo e inversión”, lo contrario de lo que está haciendo Milei que es emitir para asistir la timba financiera, bueno, entonces medidas para que los pesos vayan a la producción…
De Renzis: Cambiar esta realidad necesita la gente en la calle.