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17 de July de 2024

Pone a Rusia como principal enemigo,y a China como su cómplice

La OTAN alimenta la maquinaria de guerra

El jueves 11 de julio culminó en Washington, Estados Unidos, la cumbre del 75 aniversario de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte), la alianza militar entre Estados Unidos y 31 países de Europa.

El documento aprobado tras tres días de reunión identifica a Rusia como “la mayor amenaza para los socios”, y menciona a China como un “cómplice decisivo” en la agresión bélica rusa.

Además, tras dos años y medio de invasión imperialista rusa a Ucrania, la OTAN renovó su apoyo en armamento y logística al gobierno ucraniano, aunque volvió a postergar el ingreso de este país a la alianza militar, pero diciendo que “se va a concretar de manera irreversible”.

Para la alegría de los complejos militares – industriales de Estados Unidos y de Europa, la cumbre de la OTAN asignó nada más y nada menos que 43 mil millones de dólares en ayuda militar a Ucrania en su lucha contra la invasión rusa. En un foro con representantes de la industria militar europea y norteamericana, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseguró “No hay forma de proporcionar una defensa fuerte sin una industria de defensa fuerte”.  Y con absoluto cinismo le dijo a los industriales que tengan en cuenta que para los gobiernos, el problema no es cuánto invertir en defensa, sino decidir “a qué se destina menos, o si se aumentan los impuestos o se incrementa el déficit”, comentó.

Otro de los acuerdos fue la instalación de un centro de mando de la OTAN en la ciudad de Wiesbaden (Alemania), para coordinar tanto la entrega de armas como el entrenamiento de militares ucranianos.

En la capital norteamericana, Stoltenberg, se reunió también con sus socios de la región del Indo-Pacífico (Australia, Nueva Zelanda, Japón y Corea del Sur), firmando nuevos acuerdos de cooperación.

Stoltenberg, quien afirmó que “Estados autoritarios” como Irán y Corea del Norte están apoyando a Rusia con drones y municiones, destacó que “En un mundo cada vez más peligroso, debemos permanecer unidos para defender nuestros intereses comunes en materia de seguridad y nuestros valores compartidos”.

Los acuerdos de la cumbre incluyen millonarias inversiones en comunicaciones, tecnología digital, vigilancia desde el espacio, además de declaraciones de cooperación en espacios aéreos fronterizos, y la venta de misiles antiaéreos portátiles por parte del gobierno de Estados Unidos a Alemania, Italia y Países Bajos.

El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Lin Jian, contestó a la OTAN declarando que “La exageración de la responsabilidad de China en la cuestión de Ucrania por parte de la OTAN no es razonable y tiene motivos siniestros”, mientras las embajada del Gobierno de Xi Jinping en la Unión Europea reclamó a la OTAN que “abandone la mentalidad de la Guerra Fría”.

La cumbre de la OTAN también mostró contradicciones internas, como el planteo del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, de que “La OTAN debe ganar la paz, no guerra”, y se volvió a oponer a dar apoyo militar a Ucrania. Orbán, que ocupa la presidencia del consejo de la Unión Europea, ya se había entrevistado con Putin, sin consultar a la UE.

 

Biden en la cuerda floja

Un capítulo aparte de esta cumbre fue el cierre por parte del presidente yanqui, Joe Biden. En plena campaña electoral contra Donald Trump, y en medio de reclamos por parte de sectores de su propio partido, el Demócrata, para que baje su candidatura, Biden volvió a meter la pata, al presentar al presidente ucraniano Volodímir Zelenski, como “presidente Putin”.

En una conferencia de prensa posterior, en la que Biden trató de mostrarse firme en sus declaraciones de apoyo a Ucrania y de enfrentamiento con Putin, casi todas las preguntas lo llevaban al terreno de si estaba en condiciones de sostener un eventual segundo mandato.

Habrá que ver las derivaciones, en esta carrera presidencial, del atentado contra Trump el 13 de julio.

 

Aumentan los preparativos de guerra en Europa

El Departamento de Defensa de los Estados Unidos dijo el miércoles 10 que, en 2026, Estados Unidos comenzará a desplegar sistemas de ataque de largo alcance en Alemania, con lo que la OTAN podría atacar a Rusia desde allí.  Algunos de estos misiles pueden llegar a transportar armas nucleares. Rusia contestó inmediatamente que esto es una nueva agresión hacia ellos y que tomará medidas para contrarrestarlo.

Biden dijo que si no se frena a Rusia en Ucrania, seguirá su avance sobre otros países de Europa. Al tiempo que se desarrollaba la cumbre de la OTAN, Polonia, Francia, Alemania e Italia firmaron un proyecto para desarrollar un misil de crucero de largo alcance.

Alemania se comprometió a custodiar el flanco oriental de la OTAN, con 35.000 soldados en Lituania. Además, se aumentará el gasto en defensa: del actual 2,5 por ciento al 3 por ciento.

Todos estos movimientos de las grandes potencias imperialistas acercan peligrosamente al mundo a una nueva y terrible guerra interimperialista. Como ya hemos conocido por las desastrosas guerras en el siglo 20, seremos los pueblos del mundo los que sufriremos las principales penurias de esta confrontación.

Por eso unimos a nuestra lucha cotidiana, el rechazo a la agresión imperialista rusa a Ucrania, exigimos el fin del genocidio de Israel en la Franja de Gaza, y somos los más firmes defensores de la paz entre los pueblos, denunciando al imperialismo, que lleva la guerra como la nube a la tormenta.

 

hoy N° 2018 17/07/2024