¿Cómo hacemos para vivir en la Argentina de los falsos?
Hay que sostener la verdad, sino nos vamos a transformar también nosotros en falsos. Señalabas la actuación ridícula que quedó al descubierto (el plagio del discurso en la ONU), me decía una sobrina “tengo vergüenza de la presidencia que tenemos, siempre teníamos un orgullo de nuestras posiciones, Malvinas, los Derechos Humanos, el piquete…”.
Una parte del pueblo va calibrando la falsedad de Milei, mantiene el gesto, pero toda esa mentira que él logró hacer pasar en la campaña electoral se va desgranando de a poquito, y esto lo va poniendo cada vez más nervioso.
Llegar al error de hacer un plagio, que iba a quedar al descubierto, implica un grado de incertidumbre en el equipo que lo rodea muy grande. Tiene necesidad de redoblar las apuestas para mantener el gesto. Por eso es que va a sostener el veto y ahora está en el brete de qué va a suceder con este veto.
El apoyo del PRO (como sucedió), y si el PRO ya queda encerrado en la subordinación política a Milei, produce una crisis interna y una gran dificultad en su alianza con el radicalismo. En el propio radicalismo, si Macri se termina de subordinar a Milei como éste lo quiere obligar, le produce una situación de ruptura entre un ala que ya está en ese camino de subordinarse y otra ala que quiere mantener cierta coherencia con el perfil histórico del radicalismo.
El tablero político argentino está en reconfiguración. En medio de esta reconfiguración hay un proceso que de distintas formas y con distintos protagonistas se expresa en la calle, como fue la última gran movilización universitaria, y va surgiendo en la calle la decisión de frenar este proceso. Se van uniendo distintos afluentes, algunos por convicción política, otros por no poder soportar más esta situación. En la propia procesión a Luján se planteó la necesidad de construir la unidad. Va surgiendo frente a un peligro muy grande, porque Milei no solo es un falsario y un mentiroso, en su acto fomentó que sus fanáticos salgan como grupo de choque a la calle.
Entonces, no hay que perder de vista esta peligrosidad que tiene, y quienes se van subordinando a su liderazgo.
Esa es la situación, y por eso lo que no se puede es abandonar la calle, hay que sostener el reclamo en forma creciente, y lo que va surgiendo en la calle tiene que unirse con una propuesta de salida a favor del pueblo y la patria. Unidad que hay que hacer crecer en la calle y también en las urnas será una nueva unidad.
De Renzis: Además hay un detalle fundamental que por autodefensa la sociedad va a tener que empezar a ordenarse.
Arnoldo Gómez: Esto va sucediendo, cada vez son más las manifestaciones de quienes dicen, “me equivoqué, discúlpame”….
De Renzis: No me refiero al votante, me refiero a la sociedad en su conjunto, porque todos los días, con las medidas que toma, afecta a un sector, todos los días hay algo que se perjudica.
Arnoldo Gómez: Como el cierre del hospital psiquiátrico Laura Bonaparte, es natural que vaya surgiendo bronca en ese hospital.
De Renzis: ¿Cuál puede ser el ahorro de cuando cierran un desarrollo científico? ¿Cuál puede ser el ahorro cuando echan 20 o 30 personas que trabajan en un proyecto atómico? ¿Cuál puede ser el ahorro?
Arnoldo Gómez: Además es con odio. Aparece un rencor muy grande a todo lo que construyó el pueblo. Tienen necesidad de destruir lo que es organización popular y sus triunfos.
De Renzis: Está cumpliendo con lo que dijo, que venía a destruir el Estado, y la sociedad lo votó. Le dijo en la cara a los argentinos vengo con una motosierra, voy a romper todo. Y sacó la mayoría de los votos. No es un problema de Milei. Es un problema de la sociedad y del grupo que integramos todos y de qué deberemos hacer para cambiar la mentalidad de nuestro conciudadano, de nuestro hermano, del que está todos los días con nosotros y que a la hora de elegir y de votar hizo realidad Milei presidente.
Arnoldo Gómez: Esto hay que analizarlo más tranquilo. El 30% fue el que dijo Milei presidente. Lo otro fue el apoyo del 25% de la derecha histórica que viene diciendo aprovechemos a Milei para destruir a los de abajo. Esa es una derecha que la conocemos.
Una parte del pueblo se confundió, se equivocó y entendió el mensaje en una dirección, entendió que iba a destruir los privilegios del Estado, y existían privilegios del Estado.
Ese fue un error. Eso es lo que se va desnudando. Acá no es que se están rompiendo los privilegios del Estado, los curros de los que hacen negocios con la política. Lo que va quedando claro es que él destruye lo popular. Y ahí es la reacción y el odio. Es un proceso doloroso, pero está claro que resulta necesario.
De Renzis: Me parece que lo que está asomando es una gran reacción popular que se va incubando y que cuando esto pase, después podemos llegar a lamentarnos.
Arnoldo Gómez: O podemos llegar a festejarlo.