—Cómo se desató el conflicto?
—El detonante del conflicto fue el recorte de becas que hizo el gobierno de Macri y su ministro de Educación, Mariano Narodowsky. En mi colegio empieza la semana anterior a las vacaciones de invierno.
Empezamos a discutir el tema de las becas e hicimos una asamblea para ver que hacíamos. Sabíamos que se iba a tomar el Acosta y definimos impulsar una marcha a la Jefatura de Gobierno el viernes 25 de julio antes de las vacaciones. Fuimos con esa propuesta al Moreno y la llevamos al Acosta. Ese viernes se hizo una marcha con unos 250 estudiantes. De mi colegio unos 70 de los 300 que somos.
Ahí les dijeron a los del Acosta (que era el que había sido más mediático por la toma) que les daban una reunión durante las vacaciones, pero que nunca les dieron. Había mucha bronca y ya se hablaba de empezar con tomas a la vuelta de las vacaciones.
Durante la primera semana se discutió en los cursos, en asambleas generales y se resolvió tomar el colegio el miércoles 20. Al mismo tiempo tomaron los del Belgrano. Acá se precipitó la lucha que venía planteada en otros colegios para el lunes siguiente, así que empezamos a coordinar. El viernes 22 hicimos otra marcha a la Jefatura de Gobierno y ya éramos más de 1.000.
—¿Cuántos colegios participaron?
—Empezamos dos, el lunes siguiente se fueron sumando más y terminamos la semana con trece colegios tomados y muchos otros con otras medidas de lucha. Los del Avellaneda por ejemplo hicieron una maratón de 24 horas de clase junto con los docentes. Y terminamos la segunda semana con otra marcha de casi 2.000 estudiantes. Esta marcha fue desde el Congreso hasta el Ministerio de la Ciudad, pasando por Jefatura de Gobierno y la hicimos estudiantes con nuestros padres. También nos acompañó Tati Almeida de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora.
—¿Cómo viene la organización en tu colegio?
—En mi colegio el Centro funciona a través del cuerpo de delegados por curso que se volvió a rearmar este año.
—¿Qué agrupación conduce el Centro?
—Ninguna. No hay agrupaciones en el Cerámicas. Viene un movimiento muy amplio que discute todo en asambleas generales o por curso y toma todas las decisiones por asamblea. Ahí se expresan todas las ideas que expresan posiciones políticas. Algunos, si, agrupados a nivel nacional, pero la mayoría no. Yo por ejemplo soy de la JCR y me referencio a nivel nacional con el MUS que es un movimiento que nuclea a agrupaciones de todo el país.
—¿Y el MUS qué plantea para avanzar en este conflicto?
—Bueno, nosotros vemos a grandes rasgos, que hay tres visiones diferentes de cómo encarar esta lucha. Por un lado están las agrupaciones kirchneristas que salvan al gobierno nacional de su responsabilidad y plantea que hace todo lo que tiene que hacer y cubre las becas que tiene que cubrir, poniendo el blanco en Narodowsky principalmente y también en Macri.
Por otro lado está el Partido Obrero que, partiendo de la tesis que avanzó la derecha contra Kirchner (que vendría a ser la izquierda) plantean que no es momento para luchar, que no se va a conseguir nada, y por lo tanto plantean un programa general, que en definitiva es testimonial. Con actos políticos frente al Ministerio Nacional o en su defecto en la Jefatura de Gobierno, pero queriendo salvar siempre del golpe al ministro Narodowsky. Su análisis político lo inmoviliza frenando la lucha. Será por eso que ya están empezando con sus actos electorales para el 2009.
Y después hay una corriente, que es con la que nosotros empalmamos, que plantea que la crisis política nos da buenas condiciones para salir a luchar y para ganar; que no le quita la responsabilidad al gobierno nacional que descarga el 60% del presupuesto educativo en las provincias y municipios; que pelea por más presupuesto por un lado y que ante los ajustes de Macri-Narodowsky sale a luchar en concreto por las becas; que denuncia la tercerización y la privatización de la educación a través de la ONG Cimientos que es la que asigna las becas (ver recuadro). Porque sabemos que si nos organizamos en los colegios se lo podemos arrancar.
—¿Cómo se organizan entre los Colegios?
—Acá tenemos otra polémica con el PO que hace varios años ya hace uso y abuso de la CES (Coordinadora de Estudiantes Secundarios). Ellos conciben a la CES como una Coordinadora de las “tendencias en lucha” y no de la coordinadora real de centros con mandato de base. Nosotros pensamos que tiene que haber una coordinación de los centros (tengan la forma que tengan, cuerpo de delegados, con comisión directiva, etc.), que coordine las acciones discutidas y definidas por los estudiantes de los colegios. Este manejo hizo crisis con la masividad que viene tomando este movimiento, donde se empiezan a organizar incluso colegios que no estaban organizados. Hoy en los hechos se viene dando una coordinación real. En la medida que avance este movimiento, va a requerir que se vaya puliendo mas la forma de coordinación, que sea mas democrática y representativa y no cometer los mismo errores que cometieron con la CES.
—¿Cómo sigue?
—El sábado definimos levantar las tomas para volver a clases y sumar mas fuerza a esta lucha. Quedo planteada para el miércoles 3/9 otra marcha al Ministerio con los listados de los que no recibieron las becas, exigiendo una entrevista con el ministro para que resuelva este tema.
