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02 de October de 2010

Con la plata de los jubilados financian a las grandes empresas, en vez de dar aumento de salarios, jubilaciones y planes sociales para que crezca el consumo.

El “plan antiKrisis” es más hambre

Hoy 1246

1. La crisis y Obama
El mayor banco yanqui, el Bank Of America, está jaqueado por la crisis. En la semana pasada, hicieron un "salvataje" del segundo, el Citibank. Así es esta crisis económica mundial: cada semana golpea a un gigante, con sus consecuencias de despidos y quiebras de las empresas subordinadas.
"El ritmo con que empeoran las cosas es tan veloz, que es difícil ver cómo pueden resultar las medidas de rescate", declaró Paul Krugman, el nuevo premio Nobel de Economía. Así viene esta crisis, con una profundidad inédita, prolongada hasta el punto de que nadie ve el final del túnel, y de una velocidad arrasadora.
Mucho se unió para presentar a un Obama "salvador": desde Hollywood con sus películas de presidentes negros hasta poderosos grupos económicos. Pero ya antes de asumir el nuevo presidente, Krugman calificó sus planes de "insuficientes". La izquierda del Partido Demócrata que apoyó a Obama quedó afuera de su gabinete ministerial, y ya critica la ausencia en sus planes de sus promesas electorales: subir el impuesto a los ricos, sindicalización obligatoria de los trabajadores, condena de los "grupos de presión" de los monopolios, etc.
El gabinete del nuevo presidente es un reciclado de la antigua "burocracia de Washington" que Obama había prometido "barrer". El equipo económico incluye viejos personajes de la derecha republicana de las presidencias de Ronald Reagan con otros "de centro" de las de Bill Clinton. El equipo político lo encabeza Hilary Clinton e incluye a un ex oficial del servicio secreto israelí. El equipo militar une al actual jefe del Pentágono y ex jefe de la CIA con Bush, con un representante de la Marina.
Aunque Obama difícilmente pueda zafar de compromisos como cerrar el campo de concentración nazi en Guantánamo, la fórmula que anunció: "Estados Unidos no puede salvarse sin el mundo, y el mundo no puede salvarse sin Estados Unidos", muestra su decisión de sostener la disputa por la supremacía mundial. Ya anunció su disposición a salvar a las automotrices a las que definió como "la espina dorsal de la industria manufacturera", pero les impondrá "severas condiciones", es decir, "un ajuste" con despidos, bajas de salarios, y cambios en la producción. Amenazó a Irán con una política de "palo y zanahorias". De América Latina ni habla; para cualquier gobierno yanqui es "su patio trasero".

2. El pueblo está pagando la crisis
Despidos abiertos o encubiertos como retiros voluntarios, jubilaciones anticipadas y no renovación de contratos; suspensiones, vacaciones adelantadas, fin de planes de inversiones: la crisis avanza al galope en la Argentina. Hasta la CGT "descubrió" que hay más despidos que los que imaginó, pero no hace nada. La crisis golpea a trabajadores de la construcción, mecánicos, de curtiembres, acerías, frigoríficos, telefónicas, agroindustria, bancos, cerveceras, etc.
Por la crisis, la política K y la sequía, la cosecha de granos se estima que bajará de $ 70.840 millones a $ 47.000 millones, es decir, $ 23.840 millones menos. La soja bajó de $ 1.163 la tonelada a $ 640. El maíz cae a pique. El trigo tendrá la peor cosecha en 12 años. El aceite de girasol cayó de $ 1.400 a 800 dólares la tonelada. Cayó el precio de la leche y la carne.
Pero nada baja en los supermercados. Quiere decir que la crisis golpea a obreros rurales y campesinos pobres y medios, y a los trabajadores y el pueblo, y un puñado de molinos, aceiteras, frigoríficos, supermercados y monopolios de la alimentación se aprovechan de la baja de las materias primas y ganan con ella, aunque vendan menos. Mientras cae el consumo popular y crece el hambre: cayeron las ventas en el 76,5% de los comercios, el 18,8% está igual, y solo mejoraron el 4,7% (Ambito Financiero, 8/7).

3. Las "oportunidades K"
En varios discursos, Cristina Kirchner pronunció una frase que pasó desapercibida: "La crisis es también una oportunidad". El problema es ¿para quién es esa oportunidad?
El plan kirchnerista de "blanqueo" es un ejemplo. El lavado de "plata sucia" -según La Nación- paga un 20%; la "oferta K" de cobrar entre el 1% y el 8% deja un amplio margen para "comisiones". Como los yanquis han puesto el grito en el cielo en la Unidad de Investigación Financiera (porque ese es un negocio de "sus bancos"), y el gobierno encuentra resistencias para su aprobación en el Congreso, trabaja para mezclarla con otras medidas, tratando de reunir los votos necesarios para aprobar la ley. El "paquete" incluiría el "rescate" de las automotrices, usando la plata de los jubilados, a pérdida (pág. 4). Además, el manejo de los ahorros de los trabajadores en el Anses, puso en manos del gobierno depósitos en los bancos y las acciones de las principales empresas del país: son más "oportunidades" de negocios K.
Cada medida es "una oportunidad", pero solo se ejecutan cuando se define el ganador.
Ejemplos. La Serenísima está quebrada y sobrevive con subsidios del Estado. El monopolio francés Danone, que ya se quedó con una parte, quiere "aprovechar la oportunidad" y comprar el resto, y el gobierno presiona para que "la oportunidad" sea para capitales del "grupo K" (Eskenazi). Edelap, de la yanqui AES (vinculada al Partido Demócrata yanqui y a los Clinton según La Nación), malversó fondos. Los K quieren "aprovechar la oportunidad" para que la compre una empresa de su grupo, Electroingeniería, que maneja Gerardo Ferreyra, viejo amigo del secretario legal y técnico de la Presidencia, Carlos "el Chino" Zanini.
El escandaloso veto de CK a la ley de protección de glaciares, mostró al gobierno defendiendo las inversiones contaminantes de los monopolios mineros imperialistas que amenazan con envenenar enormes reservas estratégicas de agua potable. Otra "oportunidad K".

4. El viaje de CK a Rusia
La presidenta viajó a Moscú. El 70% de las exportaciones a Rusia son agropecuarias (carne, frutas, etc.). En la lista de los que acompañaban el viaje estaban dirigentes de la Sociedad Rural, Coninagro y Carbap, pero a último momento el gobierno las bajó, según dice la prensa, porque Néstor Kirchner "está enojado" por la baja en la recaudación de retenciones. Notoriamente, nunca estuvo en esa lista Federación Agraria, blanco del "castigo infinito K" por las puebladas.
Se anunció que CK firmará un acuerdo de "asociación estratégica" con Rusia. Dos viejos testaferros rusos, Eurnekian y Bulgheroni, la acompañan.
Sin el componente agrario, el petróleo será el centro de las negociaciones. Los K compraron el 15% de Repsol YPF. Lo hicieron con créditos, entre ellos uno de la propia Repsol por 1.000 millones de dólares. Ahora la empresa rusa Lukoil (de capitales ligados a Putin y un porcentaje estatal) negocia comprar el paquete mayoritario de Repsol YPF. ¿Qué tienen para negociar los Kirchner con Lukoil? Areas petroleras marítimas del Estado manejadas por Enarsa (sociedad anónima estatal). Y ¿quién viajó con CK en Moscú? Exequiel Espinosa, el titular de Enarsa…
Lejos de recuperar la renta petrolera, al filo de un nuevo aniversario de la muerte de Mosconi, los K negocian "su oportunidad" de convertirse en grandes empresarios petroleros, atados, antes a los españoles, y negociando ahora con los rusos. Típico de burguesía intermediaria del imperialismo.
Habrá que ver los acuerdos firmados en Moscú para comprender sus "rebotes" en Buenos Aires.

4. El camino de la lucha
Sigue adelante la lucha ejemplar de los mecánicos contra los despidos. La semana pasada, el paro dentro de la fábrica de los de GM forzó al gobierno nacional a 15 días de conciliación obligatoria. Esta semana, desbordando a la dirección propatronal del gremio en Córdoba, hay una nueva movilización de los trabajadores de varias plantas. El camino de la lucha de los mecánicos, es el único válido para la defensa de sus puestos de trabajo y sus salarios. Camino que están recorriendo los estatales pampeanos y de otras provincias.
Mientras el gobierno habla de miles de millones de pesos para sus planes, entrega $ 1,95 por ración a los comedores populares, y no hay respuestas a las largas listas de espera. Tampoco están garantizados los comedores de las escuelas en el verano, el único alimento diario de miles de niños. En las barriadas populares, no hay otro camino que la lucha para enfrentar el hambre, como las iniciativas de los Desocupados y la Juventud de la CCC, los jubilados del MIJP, y las mujeres de ACP, junto a otras fuerzas populares.
Con cortes y tractorazos luchan los productores de la fruta en Mendoza. Avanzan los preparativos de los campesinos pobres y medios para retomar la protesta agraria. La política de "venganza" que les aplica el gobierno, los empuja a la quiebra en beneficio de pules y terratenientes, y castiga también a las grandes masas populares con el encarecimiento de sus alimentos.
El estudiantado enfrenta la persecución judicial de los estudiantes de la FUBA, con la amenaza de penas de hasta 25 años de prisión: una muestra del falso "progresismo K". Todas las fuerzas democráticas deben solidarizarse con la lucha de los estudiantes contra esa persecución fascista.
La lucha de los mecánicos y los trabajadores de otras fábricas, puede confluir con la de los chacareros y los estudiantes, a través de las multisectoriales y comités de crisis, con paros regionales, y creando las condiciones para un paro nacional activo obrero y popular.
El gran picnic de hoy y Chispa, del PCR y la JCR, a 40 años de su fundación, mostró a una fuerza política en avance, luego de un año de dura lucha, con grandes aciertos políticos. Fue un gran esfuerzo organizativo para disfrutar una jornada de unidad y recreación de familias trabajadoras y del pueblo, de luchadores y luchadoras, jóvenes y veteranos, junto a amigos. Una fuerza con una línea de masas, que levanta las banderas del Argentinazo y la rebelión agraria en el camino de la revolución.