Como todos los años, del 4 al 9 de enero, el MUS realizó su campamento de verano con estudiantes de todo el país. No la tuvimos fácil, el tercer día llegó con la subida del río y tuvimos que evacuar. La inmensa ayuda de los compañeros de Zona Norte GBA garantizó que en pocas horas hayamos podido encontrar otro camping donde continuar. La actividad no hubiese seguido de no ser por el enorme aguante de todos los estudiantes, que pese a las malas condiciones de la evacuación, con la solidaridad y el compañerismo, garantizábamos entre todos que ninguno se quede sin carpa y que la comida alcanzara.
Tuvimos dos días de comisiones, discutimos la situación política que se abrió con el cambio de gobierno. Ante las expectativas de algunos de “hay que ver qué hacen”, discutimos que la devaluación no vino a terminar con la inflación, sino que fue un golpazo al bolsillo de nuestros viejos, y que ninguno de sus decretos fueron medidas populares, sino que han enriquecido a distintos sectores de las clases dominantes. Rodó el debate de cómo no le regalamos el balance de los doce años al kirchnerismo, que es hoy en día la principal fuerza política en el movimiento secundario. Su gobierno no ha abierto comedores escolares, no entregó las becas, las condiciones edilicias fueron pésimas y ha vaciado la escuela técnica. Ha precarizado la educación pública. Y los pocos avances que hemos tenido fueron producto de la lucha y la combatividad de los secundarios. Acordamos que este movimiento no espera nada del nuevo gobierno, ya en Capital con la aplicación de la NES y la situación de infraestructura durante estos años mostró su cara con la educación.
Estamos dispuestos a colocarnos a la cabeza de la lucha por todas las necesidades, a armar los cuerpos de delegados para ganar el protagonismo de toda la masa estudiantil, y a disputar las conducciones de los Centros que, en manos del kirchnerismo, van a ser herramienta para la vuelta de Cristina y no para una salida popular.
Fueron invitados compañeros de Vientos de Libertad y del movimiento #Niunpibemenosporladroga de Casilda, para una charla sobre la droga y la cultura del reviente en los jóvenes. También fueron los compañeros de la Comisión interna de Kraft, Penayo y “Látigo”, para hablar sobre la organización dentro de la fábrica y de la potencialidad de la unidad obrero-estudiantil.
Luego del cierre, con emotivas intervenciones, concluimos que tenemos que hacer crecer este movimiento, poniéndonos a la cabeza de la lucha, peleando el protagonismo del conjunto, con la más amplia unidad, para que este gobierno no descargue el ajuste sobre nosotros, para darla vuelta e imponer, como dice nuestra canción, un gobierno popular.
*Coordinador nacional del MUS
