Hace ya más de dos meses que la lucha por la tierra para vivir y producir están en boca de todos en el Gran La Plata. Con el Cuerpo de Delegados a la cabeza y tomando las decisiones en las asambleas por manzana y en la asamblea general, se logró que el 14/5 se apruebe por unanimidad en las Cámaras de Diputados y Senadores la Ley de Expropiación de las 56 hectáreas de la empresa ex Texlen.
Hace ya más de dos meses que la lucha por la tierra para vivir y producir están en boca de todos en el Gran La Plata. Con el Cuerpo de Delegados a la cabeza y tomando las decisiones en las asambleas por manzana y en la asamblea general, se logró que el 14/5 se apruebe por unanimidad en las Cámaras de Diputados y Senadores la Ley de Expropiación de las 56 hectáreas de la empresa ex Texlen.
Desde el sábado 16/5 estamos acampando en el frente de los terrenos que habíamos recuperado y de donde fuimos violentamente desalojados. Nos fuimos organizando para resolver las necesidades cotidianas: finanzas, cocina, limpieza, seguridad, difusión de las actividades, etc.
Realizamos un Festival por el Día de la Madre boliviana y paraguaya. También, a propuesta del Cuerpo de delegados, hicimos un torneo de fútbol con gran participación de vecinos de Abasto y zonas aledañas. Se coronó campeón el equipo de la manzana 35. Se participó activamente en la gran movilización del 3/6 contra la violencia de género. Y más de 700 vecinos fuimos parte del gran paro nacional del 9/6 (decidido en asamblea), confluyendo en el corte de Ruta 2 y 520 con Asoma (Asociación de medieros y afines), la CCC, la CEPA, docentes de Suteba, Unidad popular y el PTP en el Frente Popular. Con gran combatividad muchos vecinos cortaron una ruta por primera vez en su vida, con la alegría de de ser protagonistas de un hecho de relevancia nacional.
Se sigue desarrollando el Censo Oficial, avanzando hacia los 1.020 inscriptos. El proceso continúa, y los parámetros de depuración serán según la reglamentación aprobada en Asamblea general.
El 24/6 más de 500 vecinos nos movilizamos a la Corte Suprema provincial para exigir que se saque la competencia al Fuero Penal (juez Reale, quien ordena el desalojo y la represión) y que dicho Fuero no pueda decidir sobre derechos posesorios y se pase al juez en lo Contencioso Administrativo Luis Arias (quien se opuso al desalojo y estableció en el amparo judicial que se nos restituyan las tierras), derogación del Art. 231 bis: la herramienta “legal” de la que se valen para realizar desalojos de ocupaciones masivas. Basta de criminalizar la protesta. El urgente desprocesamiento de los 13 compañeros. que se investiguen los ilícitos cometidos durante el desalojo y se castigue a los responsables
Durante la combativa marcha repartimos miles de volantes con nuestra verdad y luego movilizamos hasta el diario El Día, donde logramos que nos recibieran e hicieran una nota que fue publicada al día siguiente, esta vez, con nuestras posiciones.
¿A quiénes nos enfrentamos?
Vamos ganando batallas pero la pulseada sigue siendo dura, nos enfrentamos a las mafias inmobiliarias (en este caso Alberto Mattioli), jueces penales (detrás de los cuales está el ministro de Seguridad Casal), un sector de la Iglesia anti Papa Francisco, y los diarios Hoy y El Día, como voceros de esos sectores.
Hay un déficit de 4 millones de viviendas en la Argentina, y los especuladores y terratenientes amparados en el poder político hacen negocios alquilando y vendiendo tierras que no son suyas: en este caso hay 8 contratos truchos de alquiler. Está fresco en la memoria el Indoamericano y Libertador en Jujuy.
Las 56 hectáreas propiedad de la empresa quebrada ex Texlen tienen casi toda su deuda a favor del Estado nacional y provincial. Estos sectores atacan constantemente a la Asamblea de Legítimos poseedores de la tierra y justifican la represión de la que fuimos víctimas. Pretendieron armar una oposición organizada con la Cámara de comercio de Abasto y Olmos, la cooperativa de Agua, la Iglesia de Abasto, la policía y delegaciones municipales de zona oeste. En estos últimos días, en la misma dirección, la Cámara Inmobiliaria de la Provincia de Buenos Aires reclama la restitución de las tierras a la mafia.
Estos canallas dicen: “¡Cómo se atreven a reclamar para mil familias del pueblo tierras ociosas y deshabitadas en propiedad para vivir dignamente! ¡Cómo se atreven a armar un barrio organizado!”.
No… la propiedad privada es para unos pocos elegidos y protegidos por el Estado y sus leyes que otorgan las tierras a unos pocos terratenientes que se valen del Código Civil escrito con la sangre de la masacre de los pueblos originarios. Este Código Civil, que fue modificado en el 2014 por este Gobierno y en el que el régimen de posesión y propiedad de la tierra no fue tocado.
Estos canallas están claros… se alarman y alertan a los que dominan sobre la gravedad que significa la Ley de Expropiación para sus intereses. Para el pueblo es un camino para millones.
Mostramos un camino
Hoy estamos en la etapa en que la provincia ejecute la Ley de expropiación y compre los terrenos para entregarlos a los vecinos.
La lucha perseverante y una línea acertada hicieron que hoy estemos cerca de nuestro objetivo, ya no es un sueño porque lo podemos imaginar y vamos por más: Logramos que las autoridades en la Mesa de Gestión se comprometan con nosotros y toda la comunidad abastense a construir un barrio en base a un proyecto urbanístico integrando lo urbano con lo productivo rural, elaborado por la Secretaría de Hábitat de la Nación en colaboración con la Comisión Técnica del Cuerpo de Delegados.
Un barrio con calles, luz, agua corriente, sala de salud, escuela agrotécnica con un polo productivo agroecológico y cooperativo, polideportivo, plazas. Incluyendo un plan de viviendas para los poseedores. Obras que están proyectadas para mejorar los servicios y regularización dominial de gran parte de los vecinos de la localidad.
Abasto es una muestra de una gran parte del pueblo argentino que está dispuesto a ir por más en la pelea por una vida digna, luchando por la tierra para vivir y producir. Pasamos frío, pasamos hambre, lloramos nuestros muertos. Pero sobre la base de la decisión de todos seguimos firmes.
